El lugar correcto de las cosas II

Subido el 47

Capítulo 26
-. ¡Dennis! ¿Qué haces aquí? ¿no se supone que tienes que estar ahí dentro? – le preguntó su amiga extrañada.

.- Sólo he venido a daros la entrada a la fiesta y detrás viene la dirección del local.- Sonrió mientras repartía las entradas a los otros dos amigos.

.- Pero …- a kasia no le apetecía ir pero no sabía tampoco como negarse - … yo…prefiero no ir, chicos ir vosotros – sonrió temiendo que no la hicieran caso.

.- Tonterías , allí os veo– le dio un beso en la mejilla –¡a todos ! ¡no me falléis!, dio media vuelta y bajó hasta el pasillo que dirigía hacia el interior del escenario.

Kasia quedó derrotada, esa fiesta no sería el sitio mas divertido del mundo y además no quería poner a Lucy en un compromiso. No sabía como esta iba a reaccionar ante ella delante de todo el mundo.

Si Lucy reclamaba que kasia estuviera a su lado, alguien podría darse cuenta de la situación y meterlas en serios problemas, sobre todo para la morena. Pero si por el contrario su chica pasaba de ella para que nadie pudiera relacionarlas a kasia esa indiferencia le dolería mucho y sabía que no podría aliviar su dolor pensando en que Lucy actuaba así por su bien.

Aún no conocía del todo la forma de ser de esa preciosa chica que le había robado el corazón pero tenía que ser consciente que esta podría destruírselo como y cuando deseara.

Traisy dio varios saltitos y abrazó eufórica a Bodo que la recibió contento de la oportunidad laboral que tenía por delante, en esa fiesta habría grandes personaje del mundo de la escena.

.- ¡Vamos kasia! – dio un empujoncito a su amiga, que parecía haberse quedado perdida en sus pensamientos y se mantenía seria e inmóvil. - ¿kasia qué te pasa? – tiró de ella hacia la salida agarrándola de la mano hasta estar en la calle. La rubia se dejó llevar sin salir de sus pensamientos.

El taxi iba bastante despacio, había mucho tráfico ha esa hora de la noche por el centro de la ciudad, el tiempo acompañaba a la fiesta y muchos fans de los famosos aprovecharon para recibirlos en la entrada del hotel.

Kasia miraba por el cristal nerviosa, no sabía que se iba a encontrar y mucho menos como acabaría la noche, deseó estar en su cama del hotel bajo sus sábanas bien resguardada del mundo esperando impaciente la llamada de Lucy.

Llegaron a una intersección de calles muy anchas y largas, en todas direcciones se podían ver los adornos en las grandes farolas que iluminaban casi como el sol todos los rincones de esa zona de la ciudad volcada en el musical.

Al torcer la calle, vio con sorpresa y temor como en la puerta de una gran sala de fiesta; “El Tree” según ponía en el letrero luminoso de la fachada, se había preparado un pasillo cruzando la acera entre la carretera y la entrada al local.

Había gente con cámaras y fotos de los artistas en la otra para que fueran firmadas por estos, chillaban enloquecidos a todo aquellas limusinas de cristales oscuros. Estas se ponían en esa zona de la calzada para que algún personaje conocido bajara de ellas en dirección al interior del edificio.

.- ¡Ala! – Exclamo Traisy – chicos esto es emocionante, vosotros sois actores debéis iros acostumbrando a las cámaras y los fans locos.

Bodo las miró con una gran sonrisa, estaba muy ilusionado.

Cuando el taxi que estaba por delante de ellos avanzó para volver al cargado tráfico, el suyo se colocó justo en la zona preparada para que ellos bajaran.

“Es el momento” pensó kasia aún más nerviosa. Esta hubiera dado media vida porque Lucy estuviera con ella para enfrentarse a esos cegadores flashes. deseosos de saciar los caprichos de sus dueños.

Desde que la conoció, cuando ella estaba presente desaparecían todos sus miedos y sus inseguridades, y una vez probado esa fuerza para enfrentarse al mundo, se sentía desnuda sin ella a su lado. La necesidad de esa persona recién llegada a su vida la asustaba tanto que decidió no analizarla mas “será simplemente el amor” se decía.

Justo al bajar Traisy la agarró del brazo y la dirigió hacia el interior no sin pararse a posar antes.

Sonríe – la dijo en susurro pagada a su oído – que cualquier día te sale el papel de tu vida y vuelves una famosa engreída, jajaj, tienes que practicar.

Kasia actuó por inercia y sonrió a cada flash que la atacaba.

Se supone que eso era parte de la fama con la que había soñado pero le resultó de lo más estresante, tanto gritos y manos deseando atraparla en una lluvia de flashes.

Cuando cruzaron el pasillo entraron en un gran salón adornado como en una fiesta de fin de año. “Hay demasiada gente” pensó “seguro que no me ve o simplemente no me busca” no quería por nada del mundo hacerse la ilusión de convertirse en el centro del universo para Lucy, “tiene tanta gente adorándola, luego seguro que en el piso la veré”. Es lo que habían acordado antes por si el jaleo de la noche las separabas. “Si no os consigo entradas. Luego nos vemos en el piso, amor” dijo Lucy entrando por la puerta de atrás al teatro.

Tras coger unas copas y Bodo unos cuantos canapés, los tres amigos se arrinconaron en un lugar poco transitable del salón.

Traisy estaba todo el rato pendiente de Bodo y a este parecía encantarle sus atenciones.

Kasia no había hablado desde que llegaron al salón, sólo miraba casi sin descanso entre la gente y los huecos que iban dejando. Pensando una y otra vez que en cualquier momento vería a Lucy con un impresionante vestido. Estos según la había contado Lucy se los ponían en el camerino al acabar para que se arreglaran allí, con los modistos y los maquilladores. Realmente todos eran bellísimos aunque para ella era la mujer más hermosa del mundo y no podía imaginarla con más belleza aún.

Llevaban ya un buen rato en las fiestas y kasia empezaba a impacientarse .“Que hacía allí sin por lo menos poder verla” .

Dejó otra copa vacía en la bandeja, ya eran tres y decidió no beber mas, el alcohol no le sentaba nada bien y más si estaba nerviosa como era el caso.

Miró a Traisy que reía felizmente con los comentarios de Bodo acerca de las pintas de algunos invitados, quería pedirle que le acompañara al servicio pero decidió que no había necesidad de romper la magia de su momento con una pequeña desaparición de la escena.

Se fue sola, preguntó a una de las camareras y esta le indicó el pasillo por el que se llegaba al baño de mujeres.

Abrió la puesta despacio deseando que no hubiera gente, estaba cansada de estar rodeada de extraño. No había nadie aliviada entró.

Se enjuagó un poco la cara con mucho cuidado de no estropear el maquillaje. Respiró varias veces para espabilarse un poco, se estaba durmiendo con tanta falta de diversión. Estaba cohibida con tanta gente demasiado estirada para lo que ella conocía, pertenecía al mundo de la televisión y no del teatro, se quería ir.

Se disponía a salir cuando la puerta se abrió rápidamente apuntó de golpearle la mano con la madera.

.- ¡Hola Mi amor! – Lucy radiante se lanzó a sus brazos, haciendo que la rubia casi perdiera el equilibrio. – No sabes lo que te he buscado y cuando te encuentro, vuelves a desaparecer - la morena sonreía de oreja a oreja, sus ojos la miraban alborotados de alegría.

.- Bueno, pues aquí me tienes.- contestó kasia con media sonrisa y pausadamente, no quería dejarse influir por la euforia de su chica.

.- si, ven - la agarro de la cintura y la pegó contra la pared uniendo su cuerpo peligrosamente– no podía pasar ni un minuto más sin ti.- la dio un suave beso en los labios y luego se separó un poco para volver a mirar el rostro angelical que tenía en frente.

Kasia perdió la capacidad de hablar, la mujer más bella del mundo y el centro de atención de la gran fiesta que se celebraba a unos metros, la tenia contra la pared de un baño tan pegada a su boca que apenas podía respirar.

Su corazón se revolución al máximo, sus ojos miraron a la morena sin querer separarse de ellos en lo que le quedaba de vida y su cuerpo empezó a temblar. La preciosa sonrisa que acompañaban a esos dos los luceros azules, la hechizaban.

Otro beso, este más apasionado, el cuerpo de Lucy no había dejado de temblar y desearla desde que se perdió en eso ojos oscuros encima del escenario. Se había dado la mayor prisa posible en cambiarse.

Dennis la había confirmado la asistencia de sus amigos a la fiesta se volvio loca por llegar.

Una vez preparada tubo que esperar a recibir el visto bueno de todos las personas implicadas en su vestuario y maquillaje. Su imagen debía ser acorde con su éxito, perfecta.

Al llegar a la fiesta sólo tenia una idea en la cabeza, kasia. Miró por casi todos los huecos que la multitud ahora centrada en ella, la dejaban.

Su corazón rebotó dentro de su pecho al verla en un rincón con sus amigos, sonrió sola con sus pensamientos, la hizo gracia reconocer que kasia no estaba cómoda. Alguien tan sencilla y tan libre como la chica que había visto en el parque paseando y en el de atracciones disfrutando con todos lo que le rodaban, no podía estar mucho tiempo entre cuatro paredes llenas de esos extraños por muy iluminada y decorada que estuvieran.

Cuando por fin puedo zafarse de los anfitriones, directores, compañeros y demás personalidades presente. Se dirigió hacia ella.

Mientras se acercaba vio como su chica se iba para algún otro lado la siguió, ahora que por fin podía estar con ella no la dejaría escapar.

Al entrar en el baño, allí estaba, sola. El deseo de besarla la inundó y cedía a las demandas de su corazón.

Hay estaban las dos regalándose suaves besos con pizcas de pasión.







Capítulo 27
Alguien empujó la puerta desde fuera golpeando contra el pie de Lucy, esto impidió que la puerta se abriera de golpe.

Ambas se asustaron separándose varios pasos. Kasia fingió arreglarse el maquillaje frente al espejo y Lucy se acicala el vestido aparentando haber salido del servicio.

Entraron dos chicas absortas en su conversación y pronto ambas estaban dentro de los servicios.

Lucy rio en silencio mirando al reflejo de Kasia, ésta estaba seria se había asustado realmente.

Kasia se dio la vuelta y se acercó sonriendo mientras le quitaba sensualmente un mechón de pelo castaño que tapaba parte de su rostro, la susurró al oído.

.- Tenemos que hablar amor – le beso el lóbulo y se apartó.

La cara de Lucy estaba roja de esfuerzo, intentaba no soltar una carcajada, cuando se ponía nerviosa por algo poco importante la solía entrar ganas de reír.

Abrió la boca para decir algo pero su chica se lo impidió con un dedo, y con una mirada cómplice reclamaba seriedad.

.- Pero en casa – Lucy casi se vio obligada a leer los labios del tono tan bajo con el que la rubia dijo esas palabras.

Fue a retirar el dedo pero inmediatamente Lucy le agarro la mano y acercando el dedo aún recto a sus labios lo pasó por sus labios finalizando el acto con un suave beso.

A Kasia se le erizo todo el bello de su cuerpo como consecuencia de un escalofrío surgido en su interior. Resoplo.


La morena le soltó la mano con una tentadora sonrisa, Kasia dio varios pasos atrás luchando por no darlos hacia delante y comerse a besos esos labios que tanto la estaban alterando.

Salieron del baño y mientras andaban hacia la sala, Lucy agarró el brazo de Kasia con el suyo, esta se quiso soltar.

.- Relájate, Kas- no pasa nada si nos ven salir juntas del baño.

.- Si pero no agarradas del brazo- contestó esta nerviosa.

.- ¿Por qué no? Umm. Somos amigas – dijo mientras la miraba sonriente.

Kasia se relajó lo suficiente para devolverle la sonrisa. – Eres mi mejor amiga, te puedo agarrar y querer muy fraternamente si eso te hace estar más tranquila – le siguió el juego insegura.

Llegaron al salón. Kasia intentó soltarse y esta vez la morena se lo permitió.

.- Ven que te voy a presentar a mis compañeros.

.- No. – se encontraba demasiado nerviosa para actuar, temía que las demás personas leyeran el verdadero ardor de sus ojos al mirar a la estrella del musical.

.- Kasia, por favor – la miró con cara de tristeza infantil.

.- No, he dicho que tenemos que hablar, por favor Lucy- ésta pudo leer la cara de preocupación de Kasia y decidió aceptar su petición.

Sin más la rubia se introdujo entre los demás invitados. Los ojos azules la perdieron en pocos segundos entre el mar de cuerpos, se preocupó sintiendo una punzada de temor sobre lo que Kasia quería hablar. Miró a sus compañeros, el director había llegado y se fue a saludarlo cortésmente.

Kasia según buscaba a sus amigos, recordaba como la había tratado Lucy en el baño, la quería poco a poco se lo iba creyendo “puede que los sueños a veces se cumplieran” se dijo.

Estos pensamientos provocaron inconscientemente que en su cara ya de por si angelical se dibujara una sonrisilla tan dulce que recordaba la de una niña pequeña saciada de azúcar.

.- ¿Kasia? Por fin os encuentro – entre empujones vio acercarse a Dennis -¿Por donde estáis?.

.-¡Hola! Ya era hora.. anda vamos.. estarán por allí- Kasia agarro a su amigo de la mano y juntos se unieron a Traisy y Bodo que seguían inmerso en su particular mundo.

La noche iba pasando y todos se lo estaban pasando muy bien. Excepto Jonny que tras unas cuantas copas empezó a mirar a Lucy demasiado, se moría por acercase y volver a intentar hablar con ella.“ Jonny no puedo seguir contigo, realmente no estoy enamorada de ti, lo siento” eran las palabras que utilizó su ex novia para romperle el corazón en mil trozos.

Recordaba esto mientras veía con rabia como todos lo que estaban cerca de ella la adoraban, no le iba a resultar fácil acercarse a ella.

Desde que esas palabras le atravesaron el alma habían pasado casi 12 días. Intentó hablar con ella varias veces, la última, la noche anterior. Pero Lucy no reaccionaba antes las palabras de amor que intentaba susurrarle al oído, y salía huyendo de su lado.

“Hoy hay demasiados ojos” pensó, no quería ponerse en evidencia. Había sido invitado a la celebración que la propia primera actriz y ahora no pintaba nada allí, asi()que tomó una última copa y se dispuso a irse.

Justo cuando se disponía a salir del salón se encontró con Dennis y le sonrió amargamente rechazando la mano que este le brindó. Miró al lado del delgado chico rubio, y sus verdes ojos se encendieron de rabia. Allí estaba, delante de él con una sonrisa que se fue disipando al verle.

Lucy desde que la conoció solo sabia hablar de ella, al principio embelesada por lo simpática y entrañable que era esa chica bajita y después en sus últimos días en pareja de lo gran actriz que era.

Jonny había sentido celos de ella cada vez que Lucy la nombraba, aunque viéndola otra vez le pareció algo totalmente ilógico.

Se tranquilizó con esta última deducción y saludándola secamente se apartó para que lo chicos pasaran.

El dio un par de pasos y sintió una fuerte curiosidad que le hizo darse la vuelta y mirarlos bailando en la pista ,se volvió a centrar en Kasia. “Eres tonto, es una mujer y además bastante normalita a comparación de Lucy, simplemente es imposible tu chica no es de esas” se dijo mientras echaba un último vistazo a la fiesta, buscando localizar por última vez en la noche el rostro de su morena, adjetivo con el que solía llamarla cariñosamente.

La encontró mirando fascinada hacia algo o alguien, siguió el recorrido de esos ojos celestes y su corazón se paró horrorizado al ver a quien observaba tan interesada.







Capítulo 28

Jonny no se lo podía creer, era totalmente inconcebible para alguien tan tradicional como él en las cuestiones de parejas.

La mirada se le incendió mientras veía cómo cuando las miradas de las chicas se cruzaban, esos ojos azules que tan bien conocía se iluminaban acompañados con una media sonrisa sutil.

Tenía que aclarar aquello y como su novia estaba inaccesible se dirigió hacia Kasia.

Por la espalda alguien la agarro fuertemente del brazo, sintió dolor .

.- ¡Ven! – le gritó Jonny mientras la sacaba de la pista y la pegaba la espalda hacia la pared.

.- ¡Eh Jonny! Pero.. ¿qué te pasa?! – Kasia miró lo ojos del chico “este me quiere matar”, pensó.

.-¡ ¿Qué, qué pasa?! ¡Eras tú quien me lo pregunta! – el chico gritaba muy alterado. Kasia empezó a temblar por los nervios que le producía la situación - ¡Dímelo tú! – el joven se sentía tan traicionado por Lucy que deseaba pagarlo con alguien y quien mejor que con la culpable de su dolor.

.- ¿Yo? Jonny yo no sé que de qué me hablas – su voz templaba por la tensión – no tengo ni la menor idea – justo en ese instante un pensamiento fugaz la atravesó la mente “ ¡Sabe algo!¡No, ¿se lo habrá contado?!”. Apretó los dientes no quería hablar más, la rabia por el comportamiento de Lucy la estaba llenando por dentro “¡Es una bocazas!”

.- ¡Por supuesto que no lo vas a reconocer, zorra! – Bodo que acababa de llegar puso sus brazos en medio de los dos empujando al chico, obligándole a separarse de Kasia unos pasos. Dennis que iba detrás de los dos, ayudó a Bodo a parar la agresividad de Jonny.

El chico se tranquilizó y se zafó de los brazos de los otros chicos.

Lucy en la otra punta volvió a mirar para la zona del baile buscando de nuevo los ojos de Kasia.
No los encontraba, de pronto la vio terriblemente asustada mirando a alguien que ella no lograba ver, lo tapaba la espalda de Bodo.

Sin dudarlo salió en dirección hacia donde se encontraban, sintió como dos brazos la abrazaban impidiéndole seguir , miró a la dueña de esos brazos y enseguida reconoció las facciones, era la amiga de Kasia ,había estado al lado de ésta toda la noche.

.- ¡No! ¡Para! – Traisy la gritó mientras la sujetaba. Lucy volvió intentar liberarse con otro movimiento más rápido pero la chica era lo suficientemente fuerte como para sujetarla. – mira ya están Bodo y Dennis tranquilizándole.

.- ¿Pero que pasa? – Lucy se encontraba muy alterada sin comprender que estaba ocurriendo.

.- No lo conozco pero por las fotos que Kasia me enseño de vosotros dos, creo que es Jonny .
La chica fue relajando la presión sobre el cuerpo de la actriz. Esta ya no hizo más esfuerzos para zafarse. Miró a su carcelera con los ojos llenos de temor.

Traisy separó los brazos no sin alejar su mano de la de Lucy ,no quería arriesgarse a que Jonny se mantuvo unos instantes mirándola, ignorando las ordenes de los dos chicos para que se fuera.

Se acercó otra vez, señalando a Dennis que ya estaba tranquilo.

Clavo sus ojos en los de miel que tenia en frente .

.- Sé que te tiras a mi novia- la dijo con un tono de voz helador y con su mirada la hubiera fulminado allí mismo – no pararé hasta demostrarlo y entonces os hundiré – con estas palabras volvió a separarse unos pasos y regalándole una sonrisa sádica finalizó – lo juro –
Miró a los chicos y se fue.

.- Lo ves ya esta, Lucy – dijo Traisy, se dio cuenta de cómo le templaba el cuerpo a la chica mientras miraba abstraída hacia la escena, intentó tranquilizarla – hey, mírame – sujetó la cara de Lucy y la dirigió hacia ella. .- ahora, nos la llevaremos a tu piso vale y allí estaremos con ella hasta que tú llegues, ¿vale? Ahora tranquilízate por favor.

Lucy asintió con un movimiento de cabeza y volvió a girarse para intentar cruzarse con los ojos que más amaba en todo este mundo y que ahora los notaba llenos de terror.

Se miraron un segundo, Lucy sonrió intentando mostrar complicidad en la lejanía pero Kasia bajó la mirada, estaba dolida con ella y muy nerviosa por lo sucedido. “¿Cómo ha sido capaz? Se lo ha dicho, no hay otra forma de que lo supiera”. No podía explicarse porque las había delatado ante él.

Traisy la abrazó acariciando enérgicamente su espalda para relajarla.

.- Vamos tranquila, se ha ido, ya pasó todo- se separó y masajeándole el brazo la sonrió – Lucy de veras, estará bien con nosotros, tu acaba de disfrutar tu noche y yo me aseguraré que te espere en tu casa.- La actriz movió la cabeza en señal de haber entendido las explicaciones de esa amable chica. Y sin decir nada se dirigió hacia el sitio que ocupaba antes de la pelea.

Los tres chicos se ocuparon de Kasia, la sacaron del local y la llevaron a la casa de Lucy. Después de comer algo, Dennis convenció a la pareja para que se fueran al hotel, el se quedaría velando por su amiga mientras llegaba Lucy.

Kasia se había cambiado de ropa, se puso el pijama que su amante la había prestado la noche anterior y se tumbó en el sofá al lado del sillón donde su amigo se había quedado dormido.

Hacia un buen rato que Dennis dormía pero Kasia no podía dejar de pensar en lo sucedido, por muchas vueltas que le daba no conseguía entender como Jonny lo sabia, sin que Lucy se lo hubiera contado, y si era así porque tubo que contárselo.

Ya se había tranquilizado y el sueño empezó a aplastarla contra los cómodos cojines del sofá.





Capítulo 29 Parte 1

La luz del amanecer iba coloreando las calles, la ciudad despertaba en silencio. Lucy estaba agotada había estado toda la noche intentando cumplir con las obligaciones de su trabajo .

Cada minuto que había pasado desde el encontronazo de su ex novio con kasia, había incrementado sus ganas de abandonar la fiesta e ir a su lado. Necesitaba oírla decir que todo estaba bien.

La cerradura apenas sonó al girar la llave. Entró totalmente concentrada en no hacer ruido. Abrió suavemente la puerta de su habitación.

El temor la invadió, la cama estaba hecha y todo en su sitio. “¿Dónde esta?¡No!¿se abra enfadado?” la incertidumbre al no saber le produjo una corriente nerviosa desde su interior. Con el mismo cuidado se dirigió al comedor, todo estaba en absoluto silencio. Su cuerpo se fue relajando al ver la escena que tenía delante.

Dennis dormido aún vestido con la ropa de la fiesta en el sillón, en una mano apoyaba la cabeza y la otra descansaba en los pies de kasia tumbada en el sofá con su pijama, encogida de frio.

Se acercó sonriente la imagen le parecía entrañable, a los pies del chico estaba su abrigo y a los del sofá caída sobre la alfombra encontró la manta roja con la que el día anterior ambas se protegieron del frio abrazadas entre risas y amor.

Recogió la manta y la extendió sobre el cuerpo de kasia. Después tomó el abrigo de Dennis y con pequeños empujones en el brazo lo despertó susurrándole.

.- Hey, cariño deberías irte a la cama, estarás mucho mejor allí – el chico con los ojos entreabiertos se fue incorporando pesadamente.

.- Eg …Si mejor, me iré a dormir un rato- dijo mirando al sofá mientras kasia empezaba a moverse muy despacio reaccionando levemente al sonido de sus voces - hasta luego chicas – se despidió saliendo del comedor directo a su habitación donde cayó como plomo sobre el colchón ,estaba muerto de sueño.


Lucy se mantuvo al lado se kasia mirándola totalmente derretida ante la imagen de su chica despertando.

La quería con una intensidad que jamás había pensado que se pudiera sentir, la hubiera dado el mundo en esos instantes si se lo hubiese pedido.

.- Hola…¿Cuándo has llegado? – preguntó la rubia según iba incorporándose a un lado del sofá.

.- Hola mi amor- Lucy le apartó un mechón de pelo que tenia kasia delante de los ojos, y se dejó caer en el lado que quedó libre, mirándola– ¿Estas bien? Vámonos a la cama anda que yo también estoy rendida.

Kasia algo más despejada miró a la ventana, ya casi era de día luego la recorrió de arriba a bajo – Lucy ¿Qué hora es? ….puff- se hecho la mano a la frente – me duele la cabeza.

.- Cariño seguro que no has dormido nada aquí- se levantó y la ayudó a incorporarse aun atontada por el sueño – vamos, vamos a la cama.

.- Pero… Lucy tenemos que hablar – balbuceó de camino a la habitación mientras Lucy la ayudaba a tumbarse en la cama.

.- Ssss… calla primero tenemos que dormir – la acostó asegurándose que estuviera bien tapada por las manos, bajo al máximo la persiana y se acomodó a su lado.

.- Por favor quiero que hablemos- insistió kasia entre las sabanas haciendo que su susurro se quedarán perdidos entre ellas.

Lucy se pegó a su espalda , abrazó la cintura de su chica y acomodó su cabeza en ese cuello rozando la piel que tanto la enloquecía – uhmm…mi vida hablaremos luego , ahora vamos a dormir.- kasia enseguida cayó profundamente dormida.


Poco a poco se iba despejando, iba a moverse pero notó como el cuerpo de Lucy la tenia completamente sujeta, con los brazos y las piernas la aprisionaban en un profundo abrazo.

Kasia la miró con los ojos completamente rebosantes de ternura. La amaba no podría negarlo nunca. Si algo tenía claro en la vida es que esa chica era increíblemente bonita, buena y valiente era la pieza que le faltaba del puzzle, la pieza principal, justo para completar su alma .

Intentó moverse porque aunque hubiera permanecido junto a ese abrazo una eternidad, los músculos se le empezaron a entumecer. Al moverse por mucho empeño que puso en no hacerlo la despertó.

.- Buff, Buenos días mi amor- se desperezó con un gran sonrisa.- necesitaba este descanso .-

Kasia en silencio se vistió rápidamente y tras dar los buenos días sin mirarla. Se dirigió al salón.

.- ¿kasia? Mi amor – a Lucy la asustó esta actitud tan fría - ¿Qué pasa? espera… – saltó de su cama y la siguió hasta el comedor.

Kasia se centró enseguida en poner café mientras que Lucy la miraba cada vez más preocupada. Se puso firme y seria delante de ella cortándole el paso.

.- Dime que pasa. No aguanto este silencio.-

Su chica la rodeó y tomando una taza de café recién hecho. Se sentó en el sofá y mirando el fondo del líquido humeante.- No, dímelo tú, creo que hay muchas cosas de las que no hemos hablado.-

.-Bien pues hablemos – dijo acomodándose a su lado – vale amor pero me harás el favor de empezar tu…-

.-Traisy me dijo que viste lo que pasó ayer entre tu…tu…- ni siquiera podía decirlo del dolor de oír esas palabra la causarían.

.- ¡mi ¿qué?! Kasia no es mi nada – se levantó al recordarlo la tensión de aquellos momentos en la fiesta la empezó a irritarse - ayer no quise sacar el tema porque estaba en el cielo y no quería volver a la tierra tan pronto.

kasia sin levantar la mirada habló pausadamente con un tono tranquilo .- Dime la verdad si aun es tu novio necesito saberlo .–

Lucy se inclinó ante ella buscando su ojos quería dejar bien claro la sinceridad de sus palabras entonces pudo ver como una lágrima la recorría la mejilla.

.- Cariño no es mi novio ….- sujetó su rostro con ambas manos y hablando pausadamente para quedar bien fijada esas palabras- lo dejé hace como unos 12 días, ya no tengo nada que ver con él. – le limpió muy dulcemente con el pulgar las lágrimas.

Kasia respiró hondo un par de veces y sin decir nada tomó otro sorbo de café.

.- Amor, no sé lo que te dijo pero esa es la verdad… – se sentó a su lado esta vez mirando hacia el frente- …simplemente no pudo más.- La miró triste, kasia no reaccionaba, cogió su mano decidida a hacerse creer de alguna manera.-cariño no soportaba más tenerlo cerca continuamente pensaba en ti; en tu risa, tus ojos, al recordar tus carias y besos se me rompía el alma. Kasia simplemente no podía soportar que otra persona me tocara si no eras tú.

La chica rubia la miró con amor infinito y miedo le sujetó el rostro con las manos y la besó tiernamente.- Te entiendo a mi me pasó lo mismo pero … lo que no entiendo es por qué se lo tuviste que contar si ni siquiera estábamos juntas – volvió a besarla ,sonrió –podrías haber inventado algo..no sé..no tengo ni idea pero...-

Lucy le cogió las manos y las besó, con una pequeña sonrisa mientras negaba con la cabeza.- Amor yo no le conté el porqué me separaba de él, sólo le dije parte de la verdad que no le amaba y que no quería estar con alguien a quien no amara, simplemente fue eso.- se entristeció al recordarlo y soltando sus manos prosiguió – tampoco fue fácil para mi, kasia. – se levantó frotándose las manos nerviosa – antes de todo esto sentía que llevaba media vida con él y que quería pasar la otra media en su compañía y de la noche a la mañana, todo eso se esfumó. Simplemente no existía nada en mi mundo que no fueran tus recuerdos y el dolor de negarme a estar contigo.

Kasia la abrazó fuerte – ahora estoy aquí y no te dejaré libre nunca más – le dijo al oído, besándola cada milímetro dirigiéndose hacia sus labios.

Se fundieron en un intenso beso, al separarse para controlar la respiración Lucy dijo rozando sus labios – jamás te pediré que me dejes escapar.- otro beso.

.- Sólo si tú me lo pidieras lo haría.- y con una mirada provocativa la empujo de la mano hacía el sofá.

Ambas se sumergieron en su pequeño duelo de poder sobre la pasión desatada la una contra la otra.

Se besaron durante un largo rato hasta que el deseo se fue tranquilizando volviendo a dejar paso al razonamiento.




Capítulo 29 Parte 2
.-Mi amor ¿que vamos ha hacer? Jonny me amenazó con descubrirnos y destruirnos – Lucy tenia la cabeza apoyada en el pecho de kasia y enseguida notó que su corazón volvía a acelerarse pero ahora no de pasión sino de temor – veras es que yo creo que es muy pronto para que esto ….Lucy …es que es … -

Lucy se incorporó para mirarla mejor.- haber soy consciente que no llevamos ni dos días juntas pero por mi kasia se puede ir todo a la mierda. Yo estoy hechizada… respiro de ti– Se levantó y sin soltar su mano la obligó a ponerse en pie, abrazándola y alzándola del suelo, la giró sobre si misma torpemente – te quiero, te quiero, ¡te quiero! -gritó.

.- jajaj, Lucy ¡para!-las carcajadas llenaron todo el piso mientras se perdían entre besos y caricias.

Volvieron a quedar tumbadas en el sofá.

.- Yo también te quiero con todo mi ser– dijo kasia mirándola perdiéndose en el mar azul de esos ojos rebosantes de un amor sólo para ella- es realmente grande lo que siento y tengo la sensación de que eres parte de mi de tal forma que me has completado en todos los sentidos amor, creo que ya no podría pasar sin ti ni un día más.

.- Kas a mi no me importa lo que el mundo diga, no quiero dejar que nadie nos aleje jamás por amarnos.

.- Si te comprendo pero…¿ no te da miedo de perder lo que viviste ayer?, después de tanto trabajo y esfuerzo que te ha costado y tu ….-

.- ¿El musical dices? Es cierto que …- kasia la cortó.

.- Tu dijiste que no querías perder la vida que tenías cuando nos conocimos – este tema sobre los posibles cambios en su destino la hacia llenarse de temor a que la morena se lo volviera a pensar y la abandonara por mantener todo lo que llenaba su vida. – y ahora, no sé que vas ha hacer ,que… - bajó la cabeza entristecida.


.- Es cierto kas que puede que me meta en varios problemas por esto incluso no me imagino como lo aceptará mi familia. Pero cuando te dije todo eso, no era yo la que hablaba era mi parte más cobarde llena de miedo, estaba terriblemente asustada.

.- Pero parecías tan convencida de ello y …Lucy ¡tu vida es tan genial tal y como está! – se levantó intranquila.- yo no sé si quiero ,mejor dicho no sé si puedo permitir que pierdas tu trabajo en el musical o destruyas la relación con tus padres.- paseaba nerviosa de lado a lado en el salón – ya has perdido un fututo perfecto con el hombre ¡tal vez! de tu vida, con maravillosos hijos y una familia feliz y perfecta…

.-¡ Basta! -se levantó alzando la voz -¿Qué quieres decir? ¡Me estas diciendo que no puedes permitir esto y lo otro sin preguntarte que es lo que yo quiero o no hacer! Además no creo que sea tan terrible, estamos en el siglo veintiuno, ¡por Dios!.

.- Sabes que es una posibilidad… según me dijo Dennis, los inversores del musical …son muy tradicionales y esto Lucy , no está bien.

Lucy volvió a dejarse caer en el sofá – no te entiendo kasia… no entiendo estas dudas y suposiciones totalmente apocalípticas que te estas montando en tu cabeza.

.- ¿Así? ¿Crees que estoy exagerando? – se paró delante de ella – no lo creo, por mucho que estemos en el siglo de la libertad, la realidad aun es así , no te miraran igual que ahora.

La morena se tapó la cara con las manos y gruñó , teniendo la sensación de no saber explicarse.

.- Por Dios, ¡kasia me da igual todo y todos , haber si lo entiendes!

.- Pero el musical.. – estaba notando como Lucy se empezaba a enfadar por sus suposiciones, bajó la voz que quedó casi en un susurro – y tu familia.

Respiró varias veces intentando no alterarse más de lo necesario – Muy bien, pero no crees que eso es asunto mío, si quiero mandarlo todo a la mierda lo haré contigo o sin ti. ¡En esto sólo yo puedo decidir! – la agarró de la mano y cariñosamente le pidió que se sentara a su lado.

.- Mi amor, es cierto que me he dejado la piel en ese trabajo, claro es lo que llevaba años soñando.- la sonrió mientras se fijaba en cada lunar en esa blanca piel – pero sin ti no quiero nada, para que quiero existir si no te tengo a ti para respirar. ¿No lo entiendes verdad? , no quiero una vida aunque sea la más deseada por cualquiera si tu no estas en ella.

.- Tengo miedo –

.- Lo sé .

.- No quiero que algún día me reclames lo que nos pueda pasar de aquí en adelante.

.- ¿Y por qué haría eso?.

El color del rostro de kasia se estaba tornando de pálido a rosado, estaba seria apunto de llorar de puro miedo al futuro.

Lucy le agarró la mano con las suyas e intentaba tranquilizarla con suaves caricias.

.- Mi vida yo nunca haría algo como eso, sobre todo porque tu no me estas haciendo elegir, algo que siempre te agradeceré, porque si me lo pidieras no podría negarte nada.

.- Pero….-

.- Susssss..– la cortó poniendo un dedo en sus labios – Yo lo decido y por mi mañana mismo saldríamos a la calle de la mano y ¡que se me caiga el cielo encima si ha de pasar! que mientras te lleve a mi lado no me asustaré. Cuando estoy contigo siento que lucharía contra el mundo entero si fuera necesario, que mi fuerza.. amor.. es tan grande como mi amor a ti y que nunca me dejaría vencer.

.- Pero yo estoy muy asustada Lucy, al conocerte apenas pude pensar en todo esto y al no tenerte tu recuerdo y el dolor me nublaban el pensamiento apenas me quedaban esperanza de que pudiéramos estar planteándonos esto algún día. Y ahora estoy simplemente aterrada.

.- ¿Te da miedo tu entorno?, aún no me has contado nada de tu familia.- regalándola una sonrisa consiguiendo otra a cambio.

.- No …bueno si, un poco. – le acarició la cara disfrutando de su suavidad– pero estoy segura de que lo aceptarían enseguida. Bueno mi padre es más tradicional aunque realmente no creo que pase de unas cuantas voces y malas caras, luego con el tiempo seguro que se tranquilizará. Y el trabajo...

.- ¡Si ya! esa gran serie que cada día te tiene más contenta – la dijo Lucy con cara de burla luego algo más seria -¿crees que tendrías problemas?

.- No no creo, la televisión es más abierta que tu mundo y además como alguien, supongo quien, te ha contado esa serie no es el trabajo de mi vida. Me preocupa el tuyo.

.- Ya vale kasia deja que eso lo decida yo, mira haremos una cosa - la pasó un brazo por los hombros y la acercó a ella – estaremos ocultas durante no sé ¿un mes? Y luego según estemos pues nos volveremos a plantear el gritárselo al mundo. – la besó la cabeza que ahora la tenía apoyada sobre su pecho.

Alzó esos ojos color miel y sonriendo dijo – vale amor ..un mes – la besó en los labios y se acomodó más sobre Lucy.

.- Te quiero, te amo con todas mis fuerzas.- volvió a besar su cabello mientras lo acariciaba con su mano.

Un ruido surgió del interior del cuerpo de Lucy, Kasia se incorporó riéndose.

.- ¿Tienes hambre? Cariño.

.- Claro, te recuerdo que no hemos merendado y ya es hora casi de cenar. ¿te apetece salir o comemos aquí?

.- Mejor aquí.-

.- kas podemos salir como cualquier par de amigas.

Kasia la abrazó fuertemente aplastando su cara contra en el cuerpo de Lucy – ya lo sé, pero no quiero dejar de hacerte arrumacos ni estar a diez centímetros de tu piel.

Su chica la respondió rodeándola con sus brazos y regalándole mimitos. Ambas cenaron entre risas y besos. Se sentían fuertes y felices , mientras se mantuvieran juntas nada ni nadie conseguiría separarlas.




Capítulo 30

La mañana del lunes llegó muy rápidamente para las dos chicas. Kasia apareció casi sin respiración en la estación donde Treisy y Bodo la esperaban. Una vez acomodados en sus asientos los tres chicos se dispusieron a volver a su vida cotidiana en Berlín.
Bodo se puso los cascos mientras leía una revista, Kasia cerraba los ojos intentando descansar había estado toda la noche con Lucy , amándose y hablando sobre los planes para la semana siguiente que volvería a Sturgatt.
Hablaron sobre como poder pasar desapercibidas pero sin dejar de disfrutar juntas de la vida. “Nunca nos separaremos” se repitió varias veces las últimas palabras pronunciadas por Lucy al despedirse de ella en el piso, había decidió guardarlas para poder recordarlas cada vez que el temor al futuro juntas amenazara por inundarla.
Muy despejada en silencio, Traisy observaba a sus amigos pensativos.
.- ¡Hey!, amiga casi que no llegas - dijo la maquilladora dándole un pequeño empujoncito con su hombro- ¿Has estado ocupada esta noche?.
.-¡Eh, cotilla! – la golpeó el brazo más fuerte mirándola fingiendo estar molesta.
Traisy riéndose se acerco hacia su oreja vigilando que el chico no mirara, la susurró.
.- Amiga, yo no he dormido mucho tampoco, Bodo y yo… bueno…ya sabes.-
.-¡¿Qué?¡ jajá, menuda sorpresa por fin os habéis declarado y..¿Cómo fue?.-
Bodo las miró extrañado y Traisy se puso roja de vergüenza ante él. La actriz viendo la escena rió para si misma y se implantó el silencio.
Tras descansar un par de horas los músculos entumecidos por el duro asiento empezaron a molestarla y se despertó desperezándose lo mínimo posible para no molestar.
Se había quedado dormida en el vagón, miró a su alrededor, la imagen de Traisy dormida apoyada en el hombro de Bodo y este a su vez con la cabeza descansando en la de ella la hizo sonreír pensando en lo dulce de la estampa.
Sacó el móvil y miró la hora, Lucy estaría apunto de empezar los ensayos. Se fue al baño para hablar más íntimamente.
.-¡ Hola! ¿Qué tal el viaje amor?.- se metió en su camerino antes de coger el teléfono, estaba loca por hablar con ella.
.- Muy bien, me he quedado dormida ¿y tú has conseguido dormir algo?.-
.- La verdad es que no, pero luego descansaré…soñando contigo.-
.- Te quiero y ya te echo de menos.- las palabra surgieron en un hilo de voz del interior de la rubia.
.- y yo también amor ¿me llamaras luego?.-
.- Si ,en cuanto esté en casa tenlo seguro. Yo cumpliré mi promesa de ir a Sturgatt cada vez que pueda y , tu céntrate en el musical y hazte imprescindible ,mi amor, como ya hemos hablado.
.- y luego se lo diré a todos.- dijo Lucy tajante.
.- Si y yo estaré a tu lado en ese momento - la voz de Kasia sonaba mas insegura de lo normal en ella.
“Señores pasajeros llegaremos a la estación central de Berlín en 15 minutos” sonó con voz metálica el aviso por los altavoces del tren.
.- Amor te dejo que hemos llegado...-
.-Muy bien ¡te quiero! ¡Llámame! -
.- Si…lo haré – Kasia colgó y corrió a preparar las cosas para bajarse. Los tres irían directamente a los estudios de grabación, tenían un largo día de trabajo por delante.
Tras colgar Kasia , Lucy se quedó fija mirando la pantalla del móvil, pensativa. Le iba a costar estar separada de ella aunque fuera poco tiempo; por primera vez comprendía la expresión “siento que la conozco de toda la vida con sólo haber pasado unas horas con ella”, asique según esa realidad estaba decidida a vivir con ella más lo pronto que les fuera posible.
El tiempo separadas pasaba muy despacio, en casi 20 días se vieron apenas una semana en total y ambas estaban agotadas por sus respectivos trabajos.
El personaje de Kasia había ganado interés para el público por su gran interpretación y los directivos decidieron ampliarla las horas de intervención en cada capitulo.
Y el musical estaba siendo todo un éxito por lo que Lucy tenía además muchos compromisos fuera de plató.
A ninguna de las dos la daba tiempo de poder viajar para verse, hablaban durante horas diariamente y hacían mil planes para los días libres que la rubia tendría por Navidad.
Estaba programado que el musical haría representaciones diarias aprovechando las fiestas incluso con sesiones dobles en los días señalados.
Decidieron que sólo se separarían en navidad para cenar y estar ese día con sus respectivas familias, y luego pasarían el resto de las vacaciones juntas en Sturgatt.
Kasia seguía con miedo de que su historia saliera a la luz antes de que Lucy fuera irremplazable para el musical y el riesgo de que la echaran fuera cada día menor.
Y por ello pedía una y otra vez a su novia que pusiera más cuidado cuando estaban en público.“Está loca” pensaba siempre que se veía obligada a pararle los pies cada vez que esta quería regalarle algún gesto de cariño obteniendo de parte de Lucy una gran sonrisa pícara, no podía evitarlo estaba demasiado feliz para fingir.
Era lunes, Kasia y sus amigos se enfrentaban a la última semana de trabajo del año, 14 días libres con el fin de años en medio.
Estaba totalmente ilusionada, se iría a Sturgatt ese mismo viernes y aunque Lucy no saldría de la ciudad estarían juntas todo el tiempo que les fuera posible.
Al terminar las grabaciones previstas, el director reunió a todos el personal para anunciar la celebración de una gran fiesta de navidad realizada por la cadena responsable de la serie para el próximo sábado.
Todos aplaudieron y silbaron contentos excepto Kasia .
.- Kas ,hey amiga, reacciona ¡es genial! .- Traisy en seguida de dio cuenta que eso no era una buena noticia para los planes que la actriz tenía para ese sábado.- Venga kas, seguro que podrás hablar con Lucy y bueno…lo entenderá …-
.- Traisy es que ella…últimamente está…- Kasia no quería contarle que en las últimos días sus conversaciones se tensionaban al hablar de los pocos días que podían estar juntas.- está muy sensible con el tema de vernos y no sé…en la última llamada me ha insistido mucho en que le asegurara que iba a irme el viernes para allá. – suspiró angustiada.
.- ¿y? estoy segura que no se enfadará por un día de espera más o menos, bueno… dos días exactamente pero…- intentaba animarla pero ella misma caía en la realidad de sus palabras – … ¿crees que está planeando algo para vosotras en esos días?.
.-No lo creo es casi imposible, apenas tiene tiempo para estar en casa descansando como para planear un viaje por muy corto que lo quiera hacer. Además ya lo viste, ella es la gran estrella no la darán días libres en toda la navidad. …Supongo que soy yo la que ve las cosas negras cuando no lo son…es que …estoy deseando verla y comprendo su ansiedad… nada más – una sonrisa amarga se dibujó en su rostro.
.- La verdad es que…bueno si tan mal te viene…¡pues vete y olvídate a la fiesta!.
.- Pero realmente quiero ir, me apetece muchísimo compartir ese momento con vosotros, sabemos como es este mundo, igual dentro de unos meses nos separan sin previo aviso como pasó en mi anterior serie, y luego sé que me arrepentiría de no haber estado.
.-¿Entonces? Sólo tienes que llamarla, explicárselo así y ya está ¿no?.
La joven actriz se tapó la cara con las manos y gruño con rabia.
.- No Traisy , no es tan sencillo llevo asegurándole que este viernes nos veríamos desde que supe el día del parón por navidad.- dibujó una sonrisa irónica - Me ha hecho prometérselo de más de mil maneras distintas.-
.- Bueno no llegaras el viernes pero lo harás el domingo y podréis disfrutar del resto de las vacaciones juntas, de todas formas ¿no dices que apenas sale del teatro?.- con una gran sonrisa de animo la apretó la mano consiguiendo que Kasia se animara.
.- Si supongo que tienes razón.- suspiró- venga que te invito a una taza de chocolate caliente.
Tras tomarse el chocolate en la cafetería del estudio, se fueron para sus casas hablando de lo bien que se lo pasarían la noche del sábado. Kasia se fue llenando de ilusión al pensar en esa fiesta.
Al llegar a casa , lo primero que hizo fue llamar a Lucy ,aunque era más temprano de lo habitual no podía esperar más para contarle el cambio de planes, estaba nerviosa temiendo la reacción de su novia.
.- Si Lucy Sherer al aparato – silencio del otro lado –¿diga? ¿Quién es?.
.- Hola amor, soy yo.- la voz temerosa de Kasia puso a Lucy en alerta.
.- ¡Hey! Eres tú, ¿Qué ha pasado? No te oía.
.- Bueno es que ya sabes, deben ser cosas de las redes y eso.- se dio cuenta de lo extraña que sonaba su propia voz y se forzó para mantener un tono normal, pero a cada segundo se ponía algo más tensa.
.- Si claro, bueno ¿Qué tal va todo?- Lucy intentó no pensar en el tono de voz de Kasia al descolgar e inició la conversación sin más preguntas.
Llevaban más de media hora de charla y Kasia aún no había encontrado el momento para afrontar el tema.
Cuando su novia le contó lo que había hecho durante el día, ella le empezó a explicar lo sucedido en el suyo ocultando lo más novedoso.
.- Bueno pues ya a pasado otro día, muy pronto te tendré aquí – cayó un segundo y no escuchó nada al otro lado del teléfono, algo pasaba con Kasia y aún no sabía el qué - …amor ¿ha pasado algo hoy?.
.- Bueno veras…la verdad es que sí, nos han dicho que la cadena va a celebrar una fiesta de navidad donde nos juntaremos todo el personal de las tres series que producen, es una reunión muy importante Lucy . –
.- Ohh! ¡Kasia eso es genial! y ¿Cuándo es? –
.- Es el Sábado próximo.- dijo las palabras como quien tira una cerilla cuando está apunto de quemarle el dedo, esperó en silencio.
.- Pero…Kasia …me dijiste que...quedamos en que...-esas palabras cayeron como una losa sobre su ánimo.
.- Sí lo sé amor, pero es una gran fiesta y será bueno para mi futuro en la cadena – mientras oía a su novia hablar se le iba borrando la alegría de la cara, había hecho llena de ilusión planes para ese fin de semana, y ahora como aprovechando su pena, el cansancio y la tensión acumulada hasta ese momento la hundieron en los cojines del sofá en un profundo silencio.




Capítulo 31
.- ¿Lucy, Lucy? ¿Mi amor estás ahí? – cayó unos segundos para oír lo que procedía de la otra parte del aparato, silencio. No había colgado pero tampoco hablaba sólo podía oír una leve respiración. – Por favor Lucy , háblame.

.- kas yo estoy muy cansada, necesito dormir… mañana hablamos, te…te quiero – apenas la salían las palabras de la boca.

.- Bien hasta mañana, yo también te quiero.

Al oír colgarse el teléfono en el otro lado, un duro nudo surgió en su garganta sintió haberle fallado, acababa de darle su primera decepción desde que se conocieron.

El temor a los pensamientos que su novia tendría ahora mismo y el no poder estar a su lado para explicárselo mejor la sumió en un llanto desesperado de rabia.

En Sturgatt la mañana llegó fría, acababa de nevar y aunque esto solía ser una alegría para Lucy este año no le apetecía disfrutar de ello. Se levantó retrasada, Dennis ya se había marchado y corrió al metro, lo último que le apetecía hoy era una regañina del director.

Al llegar al teatro se cruzó con Dennis y este dándose cuenta de la mala cara de su amiga la detuvo y le pregunto que pasaba, Lucy toreó la situación con un simple – tengo que ir a maquillaje llego tarde- y antes la insistencia del chico concluyó – luego te cuento.- le dio un beso en la mejilla y siguió su camino.

No volvieron a encontrarse en todo el día, en parte porque Lucy cambiaba su dirección con la mínima posible ocasión de encontrárselo a solas, no le apetecía hablar de cómo se habían truncado sus planes.

Al caer la noche no pudo evitar encontrárselo en casa cuando llegó. Dennis la conocía muy bien a estas alturas y sabía que era una chica muy alegre y que en ese día tenía algo en su interior que la entristecía.

Así que en cuanto acabaron de cenar, sentados en frente del televisor inició el interrogatorio.

.- Lucy, venga dime lo que te a pasado hoy.- le dio un golpecito en la pierna para llamar su atención cariñosamente.

Con la mirada apagada empezó a contarle lo sucedido.

.- Kasia ayer me contó que su cadena va a celebrar una fiesta de navidad donde irán todos los trabajadores de sus series.

Dennis movió la cabeza en señal de afirmación.

.- Sí, supuse que sería eso porque esta misma tarde me ha llegado la invitación al correo electrónico.

.- Entonces sabes cuando es, ¿verdad? – el tono se su voz de estaba cambiando a grabe, no pudo evitar irritarse.

.- Si claro , es próximo sábado..¿y?. - la miró esperando una aclaración a ese enfado que se estaba creando dentro de ella.

.- Que no va a venir el viernes como me prometió. – la ira se incrementaba en su mirada.

Dennis no lo comprendía.

.- Y ¿por qué te estas alterando? Si no puede venir el viernes pues vendrá el domingo-empezó a alterarse por la reacción de Lucy – ¡No puedo creer que algo así de sencillo te haya entristecido todo el día y ahora te esté enfadando!.

.- ¡Pero ella me lo prometió! es…– subió el tono de voz mientras se levantaba del sofá de un salto y prefiriendo callarse el calificativo.

.-¡¿es qué? Kasia es una gran artista! – Alzó su voz igualando las fuerzas de sus palabras a las que oía. - ¡Esa fiesta puede asegurarla un futuro en la cadena, habrá muchísima gente importante del mundo de la televisión! – se levantó para encararla. -¡No puedo creer tu actitud!- la chica miró al suelo evitando no herirse con los ojos incrédulos de su amigo – Eres terriblemente egoísta – silencio – espero que no hayas estropeado nada con Kasia en un arrebato como este.

Se dejó caer en el sofá dándose por vencida.

.- Tienes toda la razón – rió con ironía – soy una estúpida, es una gran oportunidad para ella y yo sólo pensando en como arreglar mis cosas.

Dennis se relajó sentándose a su lado.

.-¿De qué cosas estas hablando?. – su voz volvía al tono normal.

.- Llevo semanas preparando una escapada a una pequeña casa rural en las montañas, ya sabes rodeada de naturaleza, un lago y una maravillosa chimenea en el centro del salón.- cayó triste esperando alguna respuesta de Dennis.

.- Wuauu, pero… bueno se supone que la reserva la podrás cambiar y…- Lucy le miró esperando que él mismo cayera en el verdadero problema. – ¡la sesión del sábado!...pero Lucy ¿no te habrás pedido el único día de descanso de todas las navidades para ello? .

El silencio de su amiga le confirmó la situación.

.- Pero desde que empezó el musical has dicho infinidad de veces que elegirías el día de noche buena para viajar a Berlín a ver a tus padres. ¿Por qué lo has cambiado? .

.- Pedí el permiso hace un par de semanas y Anthony lo habló con la directiva y me lo concedieron, con alguna resistencia… pero aceptaron. – una lágrima cayó por su mejilla- Ahora no puedo echarme atrás, ya están todos los días programados bueno eso ya lo sabes tú.

Dennis la acarició la mejilla con una absoluta devoción, su amiga prosiguió sacando toda la angustia sentida durante el día.

.- ¿Me entiendes ahora? Me cegué por las ganas de estar con ella, y cambié el cenar con mis padres en la noche más familiar del año por pasar junto a ella , el que iba a ser el plan más romántico de mi vida.

.- De tu vida , HASTA AHORA .- resaltó su amigo, atrayéndola hacia su pecho para abrazarla.

Ella se dejó llevar y hundida entre los brazos de su amigo se lamentó.

.- Ahora sólo me queda un día solitario, triste y lo peor sin ella.

Estuvieron cayados un buen rato, abrazados.

.- ¡Ya lo tengo! – dijo Dennis sonriente - ¡Te vendrás conmigo!.

Lucy se incorporó – Pero yo no tengo invitación.

.- Claro vendrás como mi pareja, de todas formas te recuerdo que ando soltero amiga.

La cara se le iluminó en un instante – Gracias Dennis, ahora mismo la llamo para tranquilizarla.

.- Muy bien, dila que iremos a celebrar la navidad con todos ellos.

Cogió el móvil – No, no le diré que voy a ir, ella piensa que tengo trabajo, así la daré una gran sorpresa al verme en la fiesta – toda ilusionada se metió en la habitación en busca de intimidad para hablar con la chica de sus sueños.


Lucy tranquilizó todos los temores de kasia sobre el tema de la fiesta, la repitió varias veces que no pasaba nada, que ella trabajaría casi todo el sábado, como tenía doble sesión apenas se verían. Estas palabras animaron enormemente a kasia que enfrentaba feliz y muy animada la víspera de ese día.

El día de la gran fiesta había llegado más rápido de lo esperado kasia y Traisy fueron nerviosas de un lado para otro durante toda la mañana, ambas al día siguiente salían de viaje. Traisy viajaría a parís con Bodo y estaba tan eufórica que hacía sentir a kasia de esa misma forma en todo momento.

Todo estaba preparado, cada uno de sus compañeros tanto los actores como cualquier otro miembro del personal que trabajaba para la cadena iría a esa fiesta.

El momento llegó cuando entraron a la gran sala de fiesta, los tres se quedaron con la boca abierta era una gran discoteca muy exclusiva de Berlín, y se encontraba repleta de personas disfrutando de la fuerte música.

.- Wuauu, esto no tiene nada que ver con la fiesta de estirados del musical de tu Lucy, kasia – dijo Bodo mientras esperaban en la barra las bebidas.

A kasia le hizo gracia el comentario, “ni punto de comparación” pensó para sí misma “me gusta este mundo, me siento libre y cómoda en él”.

Notó un golpe en el hombro, era Traisy llamándola la atención.

.- Mira kasia, estaba segura que vendría – señaló con la cabeza hacia la derecha de la actriz.

.- ¿De quien hablas?- entre tanta gente era difícil saber a quien se refería, miró con atención donde había varias actrices hablando de forma que dibujaban un pequeño grupo aislado de los demás.

.- La pelirroja, kasia ¿no la conoces?.- insistió.

.- Haber – se fijó más, era una chica de estatura media con el pelo corto y revuelto parecido al suyo de color naranja a esa distancia no la llamó nada más la atención. – vale, no me suena..pero ¿Qué tiene de especial esa chica Traisy?.- la miró burlona.

.- Es maquilladora y de las buenas, he trabajado con ella varias veces.- Su amiga hablaba con un todo misterioso en plan cotilla oculta.

Abrió los ojos burlona – Vale mujer, muy interesante ¿algo más?.

Traisy la miró molesta .- Hey, lo que quiero contarte no es eso, es que ha salió del armario hace como un año y bueno igual sabiendo como le ha ido en este mundo, puedas sacar algo de su experiencia.

.- ¿Estas loca? – la rubia soltó una carcajada- creo que sin empezar a beber ya te has pasado de alcohol en sangre.- y sonriendo volvió a mirar a la chica ahora llena de curiosidad.

Justo en ese segundo sus miradas se cruzaron, la chica la regaló una sensual sonrisa y ella apartó la vista rápidamente hacia el suelo mientras notaba como su sangre coloreaba su cara, se estaba muriendo de vergüenza y ni ella comprendía el porqué.

.- Hola Traisy , ¡Cuánto tiempo! – sin apenas darse cuenta la chica estaba a su lado, había acercado como atraída por los ojos de kasia directa a su amiga.

.- Hola… si exacto Sara ha pasado al menos un par de años, ¿Qué tal te ha ido?. – kasia levantó la mirada directa a lo sonrisa de su Traisy, le pareció bastante forzada lo que le provocó una pizca de misterio sobre que clase de chica tenia en frente.

.- Bien no me presentas a tus amigos- miró de forma penetrante a kasia, que la miraba tímidamente manteniendo la rojez en sus mejillas.

Sus ojos color miel se sorprendieron de los hermosos ojos verdes de aquella chica, “son una preciosidad” se dijo. La chica no le pareció realmente muy guapa en su conjunto pero tenía una sonrisa pilla acompañada de una mirada llena de seguridad que sorprendió gratamente a Kasia , pareciéndola una mujer muy interesante.

.- Esta es Kasia Boeck, una de las actrices con las que trabajo.-

La chica la agarró suavemente la mano y besó muy caballerosamente su torso, kasia no pudo evitar un hormigueo en la parte baja del vientre.




Capítulo 32
Enseguida comprendió la atracción física que esa pelirroja le provocaba.

.- Si la conozco…y soy una gran fan de su personaje en la serie, tu interpretación es excepcional… – se acercó susurrándola – …entre los actores alemanes – y con una sonrisa pícara la guiñó un ojo .

Kasia se rió intentando que no se le notara excesivamente, le hizo mucha gracia el comentario en medio de un salón repleto de actores autóctonos.

Ambas se sumergieron un una interesante conversación privada, jugaban y se cortejaban mutuamente.

Traisy comprendiendo que sobraba pero siempre pendiente de que kasia no cometiera ningún error que pudiera lamentar más tarde se apartó de la escena.

Tras un buen rato hablando y bebiendo kasia se sentía realmente a gusto con esa simpática chica. Hubiera dado cualquier cosa por tener a Lucy a su lado pero las cosas estaban así, de forma que estaba decidida a disfrutar de todas las risas que pudiera.

Tras tomar varias copas , decidió no beber ni una más, empezaba a sentir sus efectos.

.- ¿Quieres otra copa? – le preguntó Sara con una mirada descaradamente sexy que casi convence a kasia en ese mismo segundo.

.- No, no puedo tomar más, he llegado al límite por hoy. – contestó intentando aparentar seguridad, pero no lo consiguió.

.- Anda, venga la última deseo brindar por haberte conocido.- le dijo en susurros acercándose peligrosamente a su oído.

La actriz por un acto reflejo se alejó, pero se rindió a la copa y con una tímida sonrisa aceptó la proposición, no quería mostrarse como una antipática.

La fiesta ya hacía bastante rato que había comenzado, no había nadie en la entrada.

. – Bueno a estas horas todos los invitados estarán dentro – dijo Dennis mientras enseñaban las invitaciones.

Los dos amigos entraron ilusionados, Dennis porque estaba deseoso de reencontrarse con sus compañeros y Lucy necesitaba urgentemente abrazar a kasia.

Cuando llegaron al interior de la gran sala, ambos se miraron sorprendido por la cantidad de gente y sonriendo tranquilamente se dirigieron a la barra.

Tomó el primer sorbo de su copa y se dispuso a buscar a su novia. Después de un buen rato la localizó, por el constante movimiento de la gente apenas podía verla, pero la hubiera reconocido entre miles de personas.

Estaba apoyada contra una pared Lucy sonrió instintivamente al ver como esa belleza mantenía una gran sonrisa. Se dirigió en su dirección deseosa del encuentro. Tras recorrer algunos metros alguien la detuvo.

.- ¡Hola! ¡Tú eres Rebecca ¿verdad?! – la chilló una chica cortándola el paso.

Miró sorprendida, sólo pensaba en llegar a donde estaba kasia y se lo estaban impidiendo.

Sonrió moviendo al cabeza y sin parecer descortés, - Perdón, necesito pasar – le dijo a la chica mirando hacia su novia, que ahora la tenía a escasos metros.

Kasia mantenía una gran sonrisa siempre en la misma dirección, bebía de una copa,( casi acaba) sus mejillas estabas rosadas y sus ojos bastantes chisposos.

“Se ha emborrachado” sonrió para si misma, le parecía gracioso verla con esa carita de niña algo atontada.

Desde que estaban juntas nunca la había visto tan relajada y sonriente en público.

La chica no se dio por enterada.

.- Eres.. Lucy S. ¿a que si?.- insistió.

.- Sí, por favor ¿me dejas pasar? .- estaba empezando a desesperarse mientras miraba a kasia.

Sus ojos vieron algo que la produjo el deseo de querer morir en ese instante, una chica pelirroja besaba la mejilla de su novia e insistiendo en su acercamiento juntó sus labios en los que ella tanto deseaba, los necesitaba de tal manera que a veces temía llegar a desquiciarse por su disfrute.

Se quedó petrificada en ese lugar, el mundo se paró y su mente se bloqueó de dolor, la realidad se ralentizó mientras un segundo se le hizo una eternidad mirando como kasia no reaccionaba pareciendo receptiva a esos labios.

Antes los ojos inyectados de celos la realidad se transformó de forma que una lenta imagen sin ninguna pasión se convirtió en una instantánea foto repleta de lujuria.

Salió buscando desesperada el aire frio del otoño y la privacidad de esa calle vacía que la había recibido antes.

Sumergida en sus movimientos todas las personas que llenaban el camino hacia su libertad donde poder volver a recuperar la razón, se le dibujaban ante sus ojos como almas negras en penas que burlonas contemplando su caída al infierno.

Al sentir el frio de la calle respiró varias veces de forma profunda e intensa, sentía sus pulmones llenos de un humo inexistente asfixiándola, sólo ese aire frio y seco la aliviaría.

Se sentó en el primer bordillo que vio, se movió nerviosa, la ansiedad la impedía tomar ese aire que tanto necesitaba, pensó que explotaría sino conseguía relajarse.

El fuerte golpe de la puerta al cerrarse la devolvió al mundo, con unos ojos muy abiertos por su estado y su boca intentando atrapar el oxigeno tan deseado, miró en dirección al ruido.

Una chica salía dando bandazos de un lado a otro, se apoyo en la pares. Sintió nauseas al ver como la chica vomitaba a un metro de la entrada. La pareció una imagen asquerosa y se levantó para irse mientras se relajaba recuperando su respiración.

Al volverse a mirar la chica por pura curiosidad, observó como la chica se volteaba apoyando torpemente la espalda contra la pared; parecía muy débil. Sintió lástima y decidió acercarse para interesarse por su estado.

Tras dar unos pasos la chica giró la cara hacia la luz del letrero de la sala, su cara que apenas había recobrado su color volvió a palidecer, su corazón aun agujereado por el dolor se aceleró de pura rabia ante esa visión mezclándose en esos pocos segundos con pena hacia la persona que tenía ahora en frente. Era kasia, SU kasia; la traidora.

.- ¿Kasia estás bien? – la preguntó buscando su mirada, mientras la agarraba por los brazos.

No consiguió que esta centrara la mirada en la suya, movía la cabeza sin sentido como buscando algo tan desesperadamente que Lucy miró al suelo escrutando un par de metros alrededor suyo.

“¡Soy estúpida!”se dijo “¡Sólo está borracha!” la rabia la inundó y sus ojos se volvieron a inyectar de celos que le dominaban el razonamiento ”Que te ayude tu pelirroja”.

La soltó y decidió dejarla allí confiaba plenamente que alguien la echaría de menos y saldría a buscarla.

Ando apenas cinco metros cuando escuchó otra vez el golpe de la puerta, se volvió mientras un pequeño rayo de alivio se le cruzó por el alma “seguro que es alguien que la ayudará” y más relajada volvió a su camino.

Al escuchar como unas chicas ser reían y se le acercaban por detrás se volteó. Eran dos chicas riendo que ilusionadas miraban fotos en una cámara digital.

.- Vámonos, hay que hacerlo rápido, nuestras queridas revistas pagaran muchísimos por estas fotos .-

.- Sí, mañana las tendremos en todos los kioscos, un gran plan.-

Conversaron justo al pasar a su lado sin percatarse de su presencia.

Buscó el cuerpo de kasia, seguía de pie apoyado contra la pared de la entrada. Se giro dispuesta a irse de allí de una vez.

Puff, otro golpe pero ahora diferente, un mal presentimiento la invadió.

Volvió a buscar al kasia, pero no estaba, la buscó. Sus ojos se abrieron de terror, el cuerpo de la mujer de su vida estaba tirado en el suelo sin moverse, corrió desesperada hacia ella muerta de pavor y culpabilidad.

.- ¡No! ¡Kasia, kasia! ¡Por favor mi vida! ¡reacciona! – la alzó la cabeza sacudiéndola intentaba desesperadamente hacerla reaccionar. Mientras vivía esa escena sintió como caía en un pozo oscuro sin remedio, sólo si volviera a ver esos ojos color miel abiertos saldría de aquel pozo y ver la luz de nuevo.

.- ¡¡Dios! ¡Kasia!! – se escuchó un fuerte grito, la morena alzó la vista en busca de quien había dicho esas palabras.

.- ¡¿Lucy que ha pasado?! – Dennis se puso terriblemente nervioso al ver la escena.-pero ¡kasia ! ¡¿no reacciona?!- Lucy no habló estaba desconcertada – ¡Lucy! ¡por Dios actúa ! ¡llama a una ambulancia!.

Dennis sujetó el cuerpo de kasia manteniéndolo incorporado con la cabeza alta. Sacó el móvil, marcó el número de urgencia y tras contar lo sucedido se mantuvo unos segundo a la escucha luego colgó sin decir una palabra más.

.- Lucy ven, ¡acércate! ¡Tenemos que hacerla reaccionar!-. El chico se quedó helado sin comprender que le pasaba ahora a su amiga.

Estaba de pié con la cara desencajada del terror mirándose las palmas de las manos y temblando de arriba abajo, sobre todo el movimiento en sus manos era claramente visible.

Le miró, de sus ojos salía la mirada con más miedo que Dennis había visto jamás, empezaron a caer lágrimas heladas por un rostro pálido e inexpresivo.

Miró a kasia que seguía sin reaccionar.- ¡Lucy que pasa! - Volvió a mirarla.

Esta volviendo al borde de la realidad se acercó lentamente enseñándole las palmas de las manos, a Dennis se le encogió el corazón de pavor. Tenía sangre en ellas, se miró la que había mantenido sujeta la cabeza de su amiga escasos segundos antes, también estaba manchada.

La morena consiguió controlar sus pensamientos y volvió a esa realidad abstracta donde se encontraba, abrazó el cuerpo de kasia y le gritó todo lo fuerte que pudo, mientras aumentaban el caudal de sus lágrimas, repletas de terror y rabia.

.- Lucy…Lucy...hola.. – Ambos miraban alucinados como kasia abría los ojos y con un leve sonrisa acarició levemente la cara de su novia, apenas tenía fuerzas para levantar la mano.-…¿por qué lloras mi amor?.

Ahora sus lágrimas que seguían cayendo en cascada lo hacían de leve alegría y alivio.

.- ¡Wuauu kas! , ¡¿estas bien?!que susto Dios! – gritó Dennis sonriendo.

.- Lucy..Lucy.- repetía su amiga aún perdida en el mundo de la inconsciencia, sin dejar de mirar esos ojos azules que recuperaban su luz mirándola…- necesito dormir me encuentro mal - pidió con un hilo de voz, cerró los ojos mientras su cara aún muy pálida recuperaba algo de vida.

.- ¿Cuánto va a tardar la ambulancia?- pregunto el chico consciente de que la chica seguía necesitando ayuda.

.- No va a venir – contestó rotunda mientras revisaba la cabellera rubia.

.- ¿Qué?...¡¿Por qué?!.

.- Me han dicho que las tienen casi todas fuera, están vigilando un concierto o no sé que… que sería más rápido si la llevamos en coche. – Hablaba mientras presionaba la herida con un pañuelo – es sólo un rasguño, se lo limpiaran en urgencias.

Volvía a tomar el control sobre si misma, gracias a las miradas agraciaditas y llenas de amor que le regalaba kasia durante los segundos en los que reaccionaba.

“Sólo con verte consciente merece la pena vivir” pensó.

Llamaron a un taxi y se dirigieron a las urgencias más cercanas.

Las enfermeras se hicieron cargo de ella y la vieron perderse tras las frías puertas del hospital.

.- Lucy, cálmate .- le ordeno Dennis al ver que no paraba quieta en la silla – esta en buenas manos, seguro que sale enseguida y nos cuenta que ha pasado.

.- Está borracha, ¡demasiado borracha! – dijo Lucy enfadada, volviendo a dejarse llevar por la rabia.

.- No- contestó rotundo Dennis – Ella jamás ha bebido más de la cuenta, hay algo raro en todo esto. – concluyó su amigo pensativo.

Gruño y con las manos tapándose la cara intentaba calmar los fuertes espasmos del llanto. El chico la abrazó y meciéndola intentó tranquilizarla – Sissss…. Venga cálmate cariño.

.- Dennis ha sido el momento más horrible de mi vida – susurro entre el llanto - Si le llega a pasar algo me hubiera muerto con ella allí mismo. – no podía controlar sus lágrimas.

.- Lo sé, sé cuanto os amáis – Sacó un pañuelo e incorporándola le limpió el rostro.

La chica empezó a recomponerse y no sin esfuerzo iba controlando su rostro.

De golpe un enfermera abrió de espalda la puerta con fuerza, arrastraba una camilla donde iba tumbada kasia con los ojos cerrados.

.- ¿Qué? ¿Cómo está? – Preguntó emocionándose otra vez, no soportaba verla de nuevo inconsciente.

Dennis abrió la boca para preguntar pero se calló al ver que la enfermera que empujaba la cabecera de la camilla se dirigió a ellos.




Capítulo 33
.- Chicos, la vamos a dejar en observación 24 horas por vigilancia. ¿Sois alguno de su familia? –

Dennis contestó rápidamente, no era la primera vez que le hacían esa pregunta en urgencia.

.- Yo soy su hermano y ella nuestra prima- ya había aprendido que diciendo la verdad apenas dejarían que la vieran. Lucy se quedó cortada no esperaba esa respuesta y se mantuvo en silencio.

.- Muy bien entonces. Necesito que llames a tus padres y que vengan. Ya sé que es mayor pero tengo hijos y me gustaría que me informaran de lo sucedido.

.-Pero sólo ha sido una borrachera – dijo la morena con una leve sonrisa, quitándole importancia necesitaba pensar eso para no asustarse más.

.- No, señorita….- la miró esperando una respuesta.

.- Lucy Boeck – le tendió la mano y la enfermera prosiguió tras corresponder al saludo.

.- Bien Lucy creemos que tu prima esta noche ha tomado algo más que simple alcohol, pero hasta que no salgan los resultados de las pruebas no lo sabremos a ciencia cierta y – le sonrió a ambos mientras volvía a sujetar la camilla – no me gusta hacer suposiciones sin pruebas.

Los dos chicos se quedaron boquiabiertos sin reaccionar.

.- Vamos, ¿no vais a venir con ella? La llevamos a una habitación del ala norte.

De un salto ambos se pusieron detrás del grupo y lo siguieron hasta la habitación donde la colocaron despacio en la única cama de la habitación.

Tenía puesto suero y la enfermera lo cambió poniendo un botecito más pequeño en la vía. Lucy miró la escena con ojos temerosos pendiente de cada movimiento de esta.

.- No te asuste mujer, sólo es un sedante .Es mejor que esté dormida mientras su cuerpo expulsa los resto de la droga que se ingirió Dios sabe porqué anoche. – al acabar, se quedó mirándolos en silencio.

Observó que ambos estaban físicamente sanos y ninguno parecía haber bebido, decidió hablarles seriamente.

.- Bueno chicos, esto es muy serio. Mientras antes sepamos lo que tomó antes podemos asegurarnos que su sangre quede limpia completamente de la droga. – Paseó de lado a lado de la habitación – haber.. vosotros estáis bien, no tomasteis nada, supongo – les miró con cara de interrogación.

.- ¡No! – respondieron casi a la vez.

.- Vale, vino con vosotros así que he de suponer que sabéis que tomó, podéis decírmelo, no os denunciare si es algo ilegal o alguna droga de esas alteradas , últimamente por desgracia se ven bastantes por aquí.- calló esperando una respuesta.

Dennis miró a Lucy – Yo no la vi hasta que no os encontré en la calle ¿tu estabas con ella cuando…?-

.-¡No! Yo estaba en la puerta entonces salió ya en ese estado no se nada mas - se puso nerviosa al recordar la escena – supongo que estaba con esos amigos suyos de la serie Traisy y Bodo, siempre está con ellos. – se mordió la lengua para no decir con quien la había visto y que estaba haciendo, la herida de su corazón empezó a quejarse de dolor.

.- Vale, chicos encargaros de llamar a sus padres lo más rápido posible. Aunque como la tenemos sedada tardará en despertar.. – miró su reloj – ..al menos tres horas si responde bien al tratamiento.- les sonrió dirigiéndose a la puerta , se volvió hacia ellos - ¡ah! Estaría bien que localizarais a esos amigos y les sonsaquéis que tomó. – cerró la puerta al salir de la habitación y ambos amigos se quedaron en silencio mirándola.

.-¡Dios! – Lucy acercó una silla a la cama, apoyo los brazos en el colchón y metiendo la cabeza entre ellos resopló varias veces.

Estaba enfadada, realmente cabreada por lo idiota que se había mostrado, aquella chica ahora una desconocida para ella.

Dennis se dejó caer en otra silla, y se mantuvo el silencio por un buen rato más.

.- ¿Qué crees que habrá pasado? – pregunto el chico rompiendo la tranquilidad de la habitación.

.- No lo sé –contestó molesta.

.- Pero Lucy , ¿discutisteis o algo así? –

.- No Dennis – su voz se mostraba grave la ira por el engaño de kasia estaba volviendo a ganar el terreno – ¡No lo sé! Ya te lo he dicho.

El chico notó enseguida el enfado de su amiga pero por muchas vueltas que le daba no encontraba la respuesta a lo sucedido.

.- Pero Lucy, ¡ella jamás ha bebido y mucho menos ha tomado drogas de ningún tipo! .-

Soltó la mano de su novia, la había estado acariciando todo el rato pero decidió que ya iba siendo hora de enfrentar la realidad. Se levantó y mirando hacia la calle por la única ventana de la habitación prosiguió.

.- Puede que simplemente no la conociéramos, ni tú ni yo – Su voz resultaba demasiado seca y dura para lo que su amigo esperaba de ella.

.- No puedo creer lo que dices, ninguno de los dos estuvimos con ella.- Se levantó mirando su espalda sin comprender tanta frialdad. - ¡Dios Lucy! ¡Es kasia ,tu novia! – notó como Lucy rió burlona de forma desesperadamente irónica.

.- ¿Novia dices? – se giró señalándola con la palma de la mano – Esta mujer no es mi novia , o por lo menos no se le parece en nada.

.- ¿Cómo puedes decir eso? – ahora la voz del chico sonaba bastante grabe – no puedo creer lo que dices pero ¡¿Qué te pasa?! – notó el tono alto de su propia voz y se intentó tranquilizar – estoy seguro que ella jamás sería capaz de tomarse nada siendo consciente de ello , pensar lo contrario simplemente es una locura.

Se giró y sus ojos estaban llenándose de lágrimas deseosas de descender por sus mejillas – Simplemente creo que no sabes lo que tu amiga puede ser capaz o no de hacer algo. – las lágrimas cayeron mientras la miraba con rabia.

Dennis no era capaz de descifrar la expresión en la cara de Lucy, sus ojos ahora llenos de rabia, su mirada encendida por el enfado y sus lágrimas de tristeza recorriéndole las mejilla.

Sin previo aviso la chica se dirigió hacia la puerta sin decir nada, Denni la agarró del brazo justo cuando pasó a su lado. La miró muy serio y sujetándola firmemente.

.- No pienso dejar que te vayas hasta que no me cuentes que ha pasado.- Lucy intentó soltarse.

.- Dennis no me apetece – se rindió – simplemente ya no merece la pena.

.- ¡Claro que merece la pena! Quiero saber que narices ha pasado para que en unas horas esa mujer – señaló hacia la cama – pasara de ser tu vida a no merecerse de ti ni la simple duda de su inocencia en todo esto.

La chica se derrumbó dejándose caer en la silla mientras sacaba un pañuelo para secarse la cara.

.- Veras.. –calló, tuvo que acumular la valentía suficiente para decir las palabras sin intentar que estas volvieran a quemarle el alma - .. me engañó.

.-¿Qué quieres decir ?

.- Si.. cuando llegué a la fiesta la vi riendo y besándose con una chica, allí en medio de toda la gente, me estaba engañando con otra.

Apoyó su cuerpo en la cama y intentó analizar esas palabras, tras unos segundos en silencio dijo totalmente convencido de no herrar.

.- No, eso no puede ser.

.- Si lo es.

.- ¡No! –estaba nervioso , empezó a mover la cabeza intentando fortalecer el significado de sus palabras – No Lucy eso es imposible, no lo creeré .

No podía más, se levanto altiva y dominada por los celos se encaró al chico haciendo acopio de orgullo.

.- ¡Si es cierto! , yo lo vi ¡Dennis!.

Se dio cuenta del estado de nervios en el que estaba entrando la chica. Muy despacio la sujetó por los brazos inseguro de que ésta no se cabreara más.

.- Haber escucha, yo no dudo de lo que viste sólo digo que a veces las cosas no son lo que parecen, la realidad en nuestra mente se puede tergiversar. – La soltó, y con voz muy suave y tierna concluyó – sólo digo que creo que se merece un voto de confianza por lo menos hasta que se despierte y nos cuente lo que pasó realmente. – estoy seguro que os queréis, darle esa confianza es lo mínimo que se merece. ¿No crees?. – calló esperando una respuesta, aunque en el fondo ya no quería oír más sobre esas acusaciones hacía una de las mejores personas que conocía.

El silencio se volvió a imponer, Lucy sentada con las manos en la cabeza sentía que ésta le iba a explotar y Dennis acariciaba la mejilla de Kasia pensando en las últimas horas vividas confiando una y otra vez en su inocencia.

De repente Lucy se puso de pie y mirando al chico firme y orgullosa.

.- Tengo que salir- se dirigió hacia la puerta.

.- Pero...volverás ¿verdad? – las palabras sonaron con apenas un hilo de voz.

Se giró y con la mirada invadida por la tristeza contesto con el mismo tono.

.- Si, dijo que en unas tres horas despertaría, estaré aquí para entonces, adiós.- y con la cabeza gacha salió de la habitación.




Capítulo 34
Estaba amaneciendo, los primeros rayos de sol iluminaban las calles, caminaba rápido mirando hacia el suelo casi continuamente, recordando una y otra vez la escena del beso.

Ella lo vio claramente, los labios de esa chica estaban en los de kasia, incluso le pareció haber visto la mano de su chica acariciando el brazo desnudo de la otra, la acariciaba o lo empujaba, no sabría decirlo, las imágenes se sobreponían unas encimas de otras, la realidad y la ficción, los ojos libres de sentimiento o cegados de celos y el dolor.

Movió de lado a lado la cabeza quería sacarse esas dudas, ella vio lo que vio ,sin más discusión y esperaría a que kasia despertara para que se lo confirmase, “no se atreverá a mentirme a la cara” pensó dominada por la rabia creada por todo el dolor que sentía.

Estaba en un banco del parque municipal de Berlín dejando que los rayos del sol secaran la humedad de sus mejillas.

Decidió que no volvería a llorar ni una vez más, mientras pensaba estas palabras vio pasar a dos chicas agarradas de la mano, paseaban tranquilas y felices mirándose como si el mundo de cada una estuviera inmerso en los ojos de la otra. Más gotas saladas cayeron a sus pies.

No lo conseguiría, metió sus dedos entre su pelo apretando su cabeza con fuerza, ahogando un gruñido de desesperación. Jamás conseguiría dejar de quererla pero no podría confiar en ella nunca más.

Y así dispuesta a enfrentarse al ser por el que respiraba, se dirigió al hospital.

Al entrar en la habitación vio que estaba sola, seguro que Dennis no tardaría en volver, él no era de los que te quedan sola en una habitación cuando estas apunto de despertar.

Miró su cara estaba relajada, se sentó en el borde de la cama.

Había recuperado el color, muy poco pero justo el que la caracterizaba.

Estaba preciosa el corazón de Lucy se alteraba cada vez que imaginaba verla abrir los ojos con una pequeña sonrisa en esos sabrosos labios de los que ella jamás se hubiera saciado.

La veía tan tranquila y hermosa, que su rabia se escondía en un rincón de sus pensamientos, el deseo de tocarla la hizo olvidar el dolor, pasó sus dedos por los lunares que tantas veces había besado, y que tantas veces más desearía hacerlo.

Sus ojos sin poder impedirlo buscaron sus labios rosados, imaginó que los besaba.

Justo perdida en esa imagen el recuerdo de la noche anterior la golpeó. Se giró poniéndose de pie y se alejó unos pasos.

Si quería mantenerse implacable ante ella no podía permitirse el lujo de acercarse, su piel, su olor siempre serían un imán para ella.

Sin encontrar la voluntad para mantenerse en sus pensamientos, volvió a acercarse paso a paso.

La miró y otra vez se perdió en esa visión.

Miró los labios rosados de kasia, deseaba tanto besarlos.

Recordó como la noche anterior quiso morir al verla tan mal se hubiera cambiado por ella sin dudarlo.

“¡Bésala!” le gritaba una y otra vez su corazón.

Miró a su alrededor no había nadie que pudiera delatar su falta de voluntad para mantenerse separada de ella. Kasia estaba sedada seguro que no lo sentiría, cuando se despertará la rechazaría pero ahora lo único que más deseaba en esos momentos lo tenía a pocos centímetros.

Muy lentamente posó sus labios en los de kasia recibiendo una descarga de la esencia que la hacía vivir directa al alma.

Se retiró unos milímetros pero quiso besarla de nuevo, presionó sus labios suavemente contra los de la rubia en un desesperado intento de grabar las sensaciones en su cuerpo para la eternidad.

Un suave calor en el borde de su boca la fue despertando del letargo, los abrió lo suficiente para acoplarlos perfectamente con los de su amante, estaba segura que era ella, la suavidad de sus besos y sobre todo su aroma la delataron sin ninguna duda era la otra mitad de su alma la que la estaba besando.

Lucy se sobresalto por un segundo, dudó en cortar el beso pero simplemente no pudo y se dejó perder en él.

Tras varios besos kasia se dio cuenta de donde estaba y se despejó completamente.

.- ¿Dónde estamos?- miró asustada a la cama - ¿Qué hago aquí? – se revolvió mientras Lucy se retiraba de su lado mirándola con ojos tristes.

Ya está, tenía que decírselo, el momento de romper ese maravilloso sueño había llegado.

Se preguntó a si misma si podría soportar el dolor lo suficiente para decirle todo lo que había esto pensando durante esas horas de espera.

.- Kasia ¿no lo recuerdas?, estas en el hospital-

La rubia la miró desconcertada - ¿qué? ¿Por qué? , yo estaba en la fiesta y……es que ¿ha habido un accidente en la fiesta?.

Una risa corta y burlona llena de tristeza salió del cuerpo de Lucy.- kasia te emborrachaste y …- se puso más nerviosa, no encontraba al forma de decírselo .-… los médicos dicen que tomaste drogas …- intentó que su voz sonase fría pero le era imposible. Verla tan perdida, tan vulnerable llenándose de terror antes lo desconocido, provocaba que todos lo barrotes de dolor que había creado frente al inmenso amor que sentía por ella, se estuvieran cayendo cada vez que sus ojos se cruzaban.

.- ¿Drogas? ¿Qué drogas? Yo jamás he tomado drogas además ….. sí recuerdo haber bebido algo en la fiesta – se le corto el habla , puso la mano en la cabeza – Dios, amor …me estalla la cabeza. ¡No consigo recordar nada!

.- Kasia haz un esfuerzo tienes que recordar algo de lo que te pasó. – chilló, empezaba a no creer lo que sucedía.”¿Es que encima tendré que contarle yo que me engaño drogada delante de todos?” se preguntó desesperada.

La palidez volvió a su cara, se dejó caer hacia atrás soltando un gruñido de rabia.

.- No, la verdad es que no recuerdo casi nada a partir de la cuarta copa, las conté, siempre las cuento sé mi límite- la miró de una forma que Lucy no pudo comprender – pero… te recuerdo a ti, recuerdo que me levantaste del suelo – unas lágrimas de terror salieron de sus ojos- ¿qué hacía yo tirada en el suelo? ¡Lucy por favor cuéntemelo!.

Se acercó a la cama y con el rostro intensamente triste se dispuso a contárselo.

.- ¡Oh! Kasia ¡estás bien! – Dennis entró deprisa derecho a abrazarla, esta le recibió con los brazos abiertos y una gran sonrisa.

Lucy vio la oportunidad – yo..yo me voy.

.-¡¿Qué?¿Por qué?! – la preguntó kasia asustada.

.- Tengo que irme, esta tarde tengo que actuar y…- tragó saliva no podía hablar , tenía que salir de allí o se rendiría a ella, jurándole amor eterno otra vez. – Sabes que es muy importante que esté allí.

.- Pero ¿ qué ha pasado?¿Por qué te vas así?..amor por favor…¿es tan necesario que te vayas? – Dennis la miró con terror, su amiga parecía no saber nada si ella no recordaba lo sucedido, entonces ¿Quién lo sabría exactamente? .

.- Si, ¡Dennis! – le miró buscando su ayuda – El te contará todo lo que yo viví ¿verdad amigo ? todo. – el chico movió la cabeza aceptando.

Salió temblando del esfuerzo que se impuso para abandonar el cuarto. Entró en el primer servicio y se sentó a llorar, era lo más difícil que había hecho; en esa habitación se había quedado todo su ser, dentro del mismo cuerpo que había herido de muerte el más maravilloso sueño que nunca volvería a vivir.

Tras recuperar la compostura se fue directa al aeropuerto aún iba con tiempo de sobra para su actuación.

En el hospital kasia miraba con miedo a su amigo, la fría actitud de Lucy junto con su repentina huida, la habían golpeado en al alma. Empezó a pensar que algo inimaginable para ella había pasado.

Traisy y Bodo llegaron casi a la vez en que Lucy salía del hospital, debieron cruzarse por un segundo pero cada uno iba sumergido en sus preocupaciones y no se dieron cuenta.

Al llegar a la habitación la pareja abrazó a kasia, Traisy tenía lágrimas en la cara por verla allí.

.- Lo siento amiga, te pedimos en la fiesta y luego nos fuimos sin despedir, jamás debimos hacer eso – la chica la explicaba rogando su perdón, por no haber estado allí.

.- Traisy tranquilízate no eras mi niñera, necesito que me ayudes a recordar lo que pasó lo más pronto posible.- la calmó acariciándole la mano.

En muy pocos minutos su amiga le contó lo que ella y Bodo vieron, esté movía la cabeza en señal de afirmación a cada palabra de su novia.

.- Luego te dejamos bailando con Sara, de verdad kasia yo no vi nada más, tú sólo bailabas y reías.

.- ¿No la visteis beber de más o tomar algo? – preguntó Dennis, no había interferido en la historia pero está parecía haber acabado y necesitaban mas datos.

.- Bueno bebió un poco y no la vi tomar nada raro, pero de verdad no estaba muy tomada cuando nos fuimos de allí.

.- Exacto Dennis yo conté las copas, recuerdo que tras la tercera no quise tomar más pero Sara me convenció para la última y…- bajó la cabeza avergonzándose – a partir de hay no recuerdo más, hasta que Lucy me encontró tirada en el suelo.

.- De eso tenemos que hablar ahora.-Dennis se dispuso a contar la versión de Lucy a los tres amigos.

Apenas tardó un rato, eran pocos los datos que se tenían de todo.

Kasia al oír las palabras dichas por su novia en los labios de su amigo, lloró entre gruñidos de rabia, y empezó a intentar explicar desesperadamente con la voz muy alta que ella jamás le haría eso a Lucy.

.- ¡No, eso no puede ser verdad! – su cara era la misma imagen de la desesperación ahora comprendía el comportamiento de su novia.

Los tres chicos cayados la miraban impotentes de no poder aliviar su dolor.

.-¡Dennis!¡¿tú me crees vedad?! Quiero decir … es imposible yo no haría eso y menos en una sala llena de gente por muy borracha que estuviera, nunca la traicionaría.

.- Kasia yo….- la miró con pena – sólo te he contado lo que ella me ha dicho, cuando yo salí a la calle para ver si os veía porque no te localizaba por ningún lado, encontré a Lucy tal y como me explicó , contigo en el suelo mientras ella te sujetaba la cabeza desesperada.

En ese momento entró por la puerta la enfermera de avanzada edad, los saludó a todos y se dispuso a quitarle la vía del brazo.

.- Bueno tengo una notica para ti, kasia.- la miró seria. – No sé si tu hermano – ahora buscó con la mirada a Dennis, los tres chicos lo miraron extrañados- Te ha contado como ingresaste anoche.

.- Si señora …- contestó el chico.





Capítulo 35
La enfermera la miró manteniendo la seriedad con una pizca de lástima.

.-Bueno, en las primeras pruebas notamos que aparte de una proporción algo elevada de alcohol en la sangre también llevabas una cantidad significativa de un tipo de excitante.

.- ¡¡¿Qué excitante?!! – se incorporó - ¡¡Qué diablo dice!! – el estado de nervios que la invadió le provocó un pequeño mareo y tuvo que relajarse mientras se dejaba caer en la cama de nuevo.

.- Veo que no lo recuerdas – esperó hasta oír un no apagado – bueno no te preocupes eso es normal, anoche te pusimos un sedante bastante fuerte y tu celebro aún estará atontado.

.- ¿No es por esa cosa que dice que tomó? – Preguntó Bodo hablando por primera vez.

.- No hijo, la verdad es que aunque en el primer momento pensamos que tu estado estaba provocado por el excitante, las pruebas que luego analizamos nos han indicado que sufriste una reacción alérgica.

Los cuatro chicos escuchaban con la boca abierta, Kasia pensaba que no podría haberle pasado algo peor.

.- Veras jovencita, tuviste mucha suerte anoche –

.-¿Qué?¿Cómo puede decir eso?- se enfadó al oír esas palabras, no podía sentirse más desgraciada pensando en los sentimientos de Lucy.

.- Cuando tu cuerpo empezó a reaccionar ante ese excitante algo provocó que no llegara a más, en algún momento de la noche vomitaste, tu estómago estaba vacío cuando ingresaste y esto te hizo expulsar los resto de la droga que aún tu cuerpo no había digerido – recuerdas algo de eso.

Buscó entre los escasos recuerdos que iban apareciendo casi difuminados en un fondo negro, sintió unas arcadas justo en el instante que se vio a si misma con la frente apoyada contra la pared en la calle oscura.

La enfermera notó su malestar – está bien, relájate , no hace falta que me digas que lo has recordado, ya se ve – la puso una almohada en la cabeza – empiezas a recordar ¿verdad?.

.- Si, pero muy mal – se masajeaba la cabellera con una mano fuertemente.

.- Vale pues eso está muy bien, pronto toda la sedación se irá de tu cuerpo, ahora deberías intentar recuperar fuerzas, si al mediodía está todo bien no te haremos quedarte más tiempo.

Cuando la vio más tranquila salió de la habitación.

Traisy enseguida se acercó a Kasia con los ojos muy abiertos.- ¿Lo recuerdas ya?.

.- Si – una lágrima cayo de sus ojos, miró a Dennis – y ya sé porque Lucy vio lo que vio.

.- Me alegro que lo recuerdes todo amiga , ¿Fue Sara verdad? ella te drogó.

La actriz la miró con ojos tan tristes y expresivos que sin decir nada su amiga la comprendió.

.- Creo que fue en la última copa, recuerdo vagamente que empecé a perder el control tras un rato después de coger la bebida – Miró a Dennis con unos ojos inmersos en una oscura tristeza – y aunque aún tengo algunas lagunas creo que cometí errores posiblemente imperdonables. – ya no lloró, simplemente se tranquilizó.

Los ojos claros de Dennis miraron tristemente a su amiga era consciente del daño que todo esto lae provocaría.

Traisy la miró con ira.- Te juro Kasia que si descubro como esa puta te hizo esto se lo haré pagar – se dejó caer en la silla y con un nudo en la garganta dijo – lo siento muchísimo.

.- Hey tranquilízate, tu no eres culpable de nada. – le contestó la actriz.

.- Sí, yo te la presenté, pero te aseguro que esa me va a escuchar.- se levantó y agarrando a Bodo se dirigió a la puerta.

.- Pero… ¿A dónde vas tan rápido?.

. – Luego te llamo, ahora hay cosas que tenemos que hacer.

Y salieron por la puerta dejando a los dos amigos abobados mirándose sin saber que decir.

El resto de las horas las pasaron comparando los recuerdos de Kasia con la versión de Lucy. Dennis le contó como llegaron de Stuttgart y se dirigieron directamente a la fiesta.

La actriz le pregunto sin descanso como podía hacer para que Lucy la perdonase y el chico sólo contestaba que explicara muy bien todos los recuerdos y sensaciones y que seguro que su amor era más grande que todo eso.

Finalmente cuando la dieron el alta, decidió irse con él a Stuttgart; en un par de horas estarían allí, justo en el comienzo de la ultima sesión del día, donde tanto Lucy como Dennis actuarían.

Su primera idea era buscarla en su camerino antes de que saliera al escenario pero luego decidió quitarse del medio, no quería que Lucy estuviera más nerviosa a la hora de cumplir con su trabajo al nivel que siempre se esperaba de ella.

Acompaño a Dennis hasta la entrada, éste llegó a pocos minutos de comenzar la sesión, estaba convencido que le caería una buena regañina pero no iba a ser la primera vez que la recibiera aunque esta vez fuera por una verdadera razón.

Al verle entrar amagó sus movimientos para dirigirse detrás de él pero haciendo caso a la parte racional de su cerebro se dio la media vuelta y se fue para el piso que ambos actores del musical compartían.

Entró utilizando la llave que su novia le había dado unas semanas antes.

Todo estaba en silencio, se tomó su tiempo para recorrer ese espacio que conocía casi a la perfección.

Apenas hacía un par de meses que entró por primera vez pero se sentía como si llevara toda la vida disfrutando de esas paredes que le habían protegido de la realidad, mientras ella vivía un sueño en vida, en los brazos de aquella mujer que le enseñó el verdadero sentido de su existencia.

Inevitablemente entro en su habitación, ese espacio mantenía su olor, se tumbó en la cama “sólo por un instante” pensó, quería estar despierta y totalmente centrada cuando la viera. Estaba convencida de que cuando Lucy escuchara su versión la perdonaría, no estaba dispuesta a perderla por un error y mucho menos cometido dentro de una trampa totalmente drogada.

Su almohada rebosaba de su aroma, el mismo que la hacía perder el sentido cada vez que la invadía, respiró hondo varias veces y convencida de que dentro de unas horas todo estaría de nuevo perfecto se relajó y se quedó dormida perdida en sus ilusiones.

El ruido de la puerta principal la despertó, su corazón estaba acelerado y un sentimiento de angustia le presionaba el pecho.

Durante el tiempo que estuvo dormida su conciencia se sumergió en una pesadilla terriblemente real que la hizo recordar todos recuerdos de la noche anterior junto con los sentimientos que en ese momento la habían inundado.

Seguro que era Lucy, su Lucy, ¿quién sino? miró el reloj de su muñeca y sonrió; Dennis en esos momentos se estaría tragando pacientemente la riña.

Los nervios la invadieron, no sabía como su novia reaccionaría ante ella. Escuchó como los tacones se dirigían al comedor y tras un segundo el sonido cambio de dirección, Lucy habría visto sus cosas encima del sofá y ya sabía que ella estaba allí.

El manillar de la puerta se movió y el corazón de Kasia se paralizo de miedo, realmente estaba aterrada por la incertidumbre sobre la reacción de Lucy, un desprecio de esa mujer le partiría el alma.

En un rápido movimiento pegó su cabeza de nuevo a la almohada y fingió estar dormida.

Cuando la vio allí tumbada sobre su cama su corazón dio tal vuelco que le cortó la respiración por unos segundos, había pasado las peores 24 horas de su vida y ahora en ese instante , en esa habitación, en su cama, estaba todo lo que era deseado y anhelado por cada gota de su sangre.

Dio un paso hacia ella y observó el bello rostro que tanto amaba.

Esos ojos dueños de la mirada más dulce y sincera que conocía volvían a estar cerrados ante los suyos. Esos labios juntos rosados que se le antojaban extremadamente exquisitos ante los suyos. Estaban ahí al alcance de su mano.

Kasia no aguantaba más necesitaba reaccionar y enfrentarse con valentía a la situación, fingiendo pereza en sus ojos los abrió costosamente y allí estaba la dueña de la mirada más brillante y azul que le enloquecía los sentidos, de pie mirándola perdida en sus labios.

Enderezó el cuerpo, Lucy quiso aparentar seguridad y orgullo ante la persona que la había traicionado. Y con un corto y frio saludo “Hola” abandonó la habitación y se dirigió al comedor.

Kasia rápidamente la siguió.

.- ¡Lucy, espera!.

Al llegar al salón se dio la vuelta para encararla, ya está, ese era el momento de enfrentarlo todo.

El pensamiento de la morena le empezó a inyectar orgullo alimentado por los celos y el dolor surgidos por la traición.

Kasia se acobardó antes la mirada inquisitiva con la que la estaba juzgando la morena.

.- Lucy por favor, escúchame …- enseñó las palmas de la mano pidiendo inconscientemente ser escuchada de forma sincera. - ya he recordado todo lo que paso.

.- ¡A sí! Pues mejor para ti – su voz sonó tan fría que heló el ambiente.

.- Pero amor- bajó la cabeza avergonzada – yo jamás te he traicionado, ni durante un segundo sentí ese beso...- Lucy la cortó.

.- ¡A no! Pues eso no es lo que yo vi, estabas disfrutando en su compañía y no negaste el beso ..-

.- Pero eso no fue así- la miró desesperadamente.- yo….

.- ¿Tú? Es que me vas a decir que no estabas disfrutando de la compañía.-

.- ¡No!...sí vale, de su compañía pero no de forma sexual, jamás de esa forma – dio un paso hacia ella – Lucy yo soy incapaz de sentir nada por nadie que no seas tú.

La voz de la morena empezó a sonar más dubitativa, intentaba aparentar frialdad pero a escasos pasos de esa mujer no podía mantener su falsa dureza.

.- Pero...- otro paso de Kasia, miró sin remedió sus labios; la tensión sexual que las empezaba a rodear iba desvaneciendo la razón en su cerebro.

Los gestos de Lucy la llenaban de seguridad para su acercamiento, la amaba y deseaba en esos momentos no podía pensar en otra cosa, todo lo demás se esfumó dando paso al deseo.

.- Kasia yo lo vi pero…- su aroma le estaba encendiendo todos los sentidos de tal forma que pensó que se marearía por el deseo sino lo saciaba en ese mismo instante.

.-pero nada- la agarró por la cintura y con un rápido movimiento pegó sus vientres junto con el resto de toda la anatomía posible.

La respiración de ambas se incrementó sus bocas a pocos milímetros, sus oídos a causa del apagón de sus cerebros sólo captaban el sonido de sus cuerpos intentando controlar sus respiraciones.

Lucy se dejó vencer por el deseo mientras Kasia se abandonó a su instinto mientras luchaba por mantener el control sobre el perfecto cuerpo que tenía entre los brazos.



Capítulo 36
Sus labios se juntaron dominados por el placer de saborearse, sus lenguas se buscaron sin ninguna espera, se conocían bien.

Jugaban y se disfrutaban y tras dominar ese primer instante, besos más cortos y lentos para disfrutarse en cada milímetro, entre pequeños gemidos surgidos de cada roce, de cada instinto saciado.

Gemidos que al ser descubiertos aumentaban el deseo de dar y obtener entre las dos amantes.

Sus cuerpos temblaban , la temperatura subía; Lucy sentía la humedad que estaba surgiendo de su interior y el fuego que crecía en su bajo vientre, su boca estaba sedienta y sabía que no conseguiría saciarse hasta poseerla por completo.

Kasia la mantenía sujeta por la cintura y paso a paso entre besos imparables la llevó hacia la cama.

La tumbo sin apenas separarse de ella unos centímetros, quedando su cuerpo encima y paró un segundo, observó ansiosa como la mirada, su amante estaba ardiente de deseó por ella.

Perdió sus labios en su cuello disfrutando de ese aroma que tanto la enloquecía.

Introdujo suavemente su mano por debajo de la camisa. Primero acarició todo su torso, luego sus pechos ahora duros y abultados por la excitación, pellizcó cada pezón y sonrió picara al oír otro gemido procedente de la garganta de Lucy que estaba abandonada totalmente a su merced.

Decidió dar otro paso más, empezó a desabrochar uno a uno cada botón de su camisa, uno un beso en su lugar , segundo otro beso más cerca del camino hacia sus pechos, tres….

.- Dímelo – susurró – dímelo Lucy . – Un rayo de inseguridad cruzó por su pensamiento, despertando su parte racional.

.- Por favor sigue- le contestó entre los gemidos que junto con los movimiento de sus caderas la tenían flotando entre los besos y las caricias del único ser que amaba en este mundo.

.- No es eso – sonrió, sus besos iban acercándose peligrosamente a su pecho derecho aún tapado por el sujetador-.

.-¿Qué es?, por Dios… dilo – se estaba impacientando diría lo que quisiera escuchar rápidamente para que no parara ese placer que sólo ella le sabía dar.

Lamió y mordisqueó el pezón jugando con la tela, no quiso negarse a si misma ese placer, dejó los pechos y volvió con pasión a saborear sus labio y degustar su lengua.

Haciendo un desesperado esfuerzo casi doloroso volvió a mirarla directa a los ojos, seria dejando que su razón aplastara su deseo.

Ella también estaba muy excitada, le costaba controlar la respiración pero en ese instante se propuso descubrir los verdaderos pensamientos de su amante.

Se centró en esos preciosos ojos azules intentando descifrar lo que había detrás de la cortina de fuego con que la miraba.

.- Di que me crees – Lucy centró su atención en los ojos oscuros que ahora parecían casi negros, mirándola tan profundamente que tubo la impresión de que penetraban en su interior hasta poder leer su alma. Se asustó y durante unos eternos segundos dudó.

.- Si, mi amor, claro que te creo.

A kasia se le partió el alma, era la mejor actriz que conocía pero fuera del escenario podía leer su mirada tan claramente y no tuvo duda, le estaba mintiendo.

Se incorporó en la cama, sin dejar de clavarle una penetrante mirada.

.- Kasia ¿Qué?..- no podía creer la situación que vivía, la excitación aún le cortaba la respiración, su corazón saltaba sin controlar los latidos y Kasia estaba ahí, quieta, mirándola de una forma totalmente desconocida para ella.

.- ¿No me crees verdad? – se levantó, Lucy no se movía simplemente la miraba con la boca abierta , sorprendida – Crees que te engañe, que fui capaz de no tomarme todo esto en serio – señaló todo a su alrededor - ¡ que te olvidé por un segundo!.

.- Bueno… kasia – con apenas un susurro y bajando la cabeza – es que … yo te vi y….

.- ¡tú me viste ¿verdad?! Claro esto te convence de que yo soy una de esas personas capaces de traicionar a la persona que más quiere, ¿verdad?- se enfureció por la idea que llevaban sus palabras y que Lucy no negara la acusación. – ¿sabes? pensé en pedirte mil perdones pero al recordar todo y …créeme “amor” lo recordé todo, me di cuenta que no te engañe ni durante un segundo.- se giró dándole la espalda, y con genio se empezó a ponerse bien la ropa. – Y tú me demuestras que no confías en mi.

.- Kasia por favor yo te lo perdono ¡de verdad!, sé que estabas drogada o borracha, ¿vale?. ,por favor kas no te vayas.- Al ver que ésta ignoraba su perdón , la rabia por esa cabezonería sobre el tema , empezó a hervirle la sangre y esta le nublo el pensamiento. – Lo que creo es que sí pensaste en ella de esa manera, le seguiste el juego conscientemente pero al sentirte físicamente mal saliste a la calle sino…. – su voz sonaba otra vez fría y dura los celos hablaron– te la hubieras tirado.

Bajó la cabeza y habló despacio – Muy bien no pensaba decirte esto, pero quiero que me escuches con atención - se giró mirándola con tristeza y desilusión, acababa de sentir que esas suposiciones sobre sus acciones no las merecía y sin pararse ahora a medir el dolor que sus palabras podrían provocar prosiguió – Ese beso me salvó la vida –

Una risa irónica de Lucy la cortó, está se levantó y empezó a cerrarse los botones y mirándola con la máxima dureza que su alma podía reflejar – ¡ja! ¡Pues no sé que haces aquí entonces!.

.- Si, cuando sus labios me rozaron –

.- ¡Por favor kasia! ¡no necesito que me des detalles! – al oír esas palabras los celos la volvieron a dominar y decidió salir de la habitación.

.- ¡Escúchame! – kasia agarró su brazo y parándola la obligó a mirarla.

Lucy se dejó mover y la encaró llena de rabia.

.-¡Siéntate! me vas a escuchar.- Lucy le obedeció.

.- Cuando noté su acercamiento, no supe como reaccionar pero al notar su lengua rozándome el labio inferior reaccione y Lucy.. – la sonrió irónicamente – ..sentí tanto asco que fue lo que provocó las arcadas y salí a la calle, por eso…- esperó , silencio - … gracias a eso pude vaciar mi estomago expulsando parte de la droga.

.- kas yo..- se estaba calmando poco a poco mientras escuchaba con alivio esas palabras.

.- Yo ya te dije que nunca podría haberte hecho eso –

Lucy se levantó dispuesta a abrazarla, kasia la paró– ¡no! ¡Espera! – el genio la había dominado y no pensaba parar hasta decir todo lo que recordó horas antes. – Creo que no te lo he dicho pero lo que tuve fue una reacción alérgica que paralizaba partes de mis músculos, pero no mi conciencia.-

.- ¿A sí? Entonces ¿por qué esta mañana no recordaste nada?-.

.- Por la sedación, al poco rato de irte, según iba pasando los minutos empecé a recordar despacio. Pero lo que quiero contarte “amor” no es eso. –

.- kasia ¿A dónde quieres llegar?.

.- Justo al momento en que me viste en la calle, me has ocultado unos pequeños detalles.

El cuerpo de Lucy empezó a sentirse revuelto, el temor a que kasia lo recordara todo la asustaba.

.- Recuerdo que estaba apoyada en la pared y te acercaste a mí. Aunque lo intenté no puede centrarme en ti, me encontraba demasiado débil. Luego me apoyaste de nuevo en la pared y te fuiste Lucy, me dejaste tirada en la calle, enferma.

La morena se quedó helada – tu… no reaccionabas y yo estaba muy enfadada y kas… los celos …pensé que alguien saldría – la agarró las manos - kas apenas ande unos metros y…

.- ¡Y! me caí..- se soltó las manos – recuerdo perfectamente como intenté llamarte y al dar un paso con el brazo extendido hacia tu espalda me fallaron las piernas y me caí, entonces fue cuando me hice el corte en la cabeza. – Se iba acercando a la puerta –Me abandonaste Lucy, tu que dices que me amas tanto y que me juzgas tan segura de ti –

Lucy movió la cabeza de lado a lado negando desesperada – kas estaba celosa , enfadada y…

Kasia se acercó a ella encarándola con una mirada fría y oscura – Tu me dejaste abandonada y yo sólo quería que supieras que nadie es perfecto, ¿quién te crees para no confiar en mi? De esa manera. – Se dio la vuelta y salió por la puerta de la habitación derecha a por sus cosas .

Lucy fue detrás de ella – Por favor kas espera…lo siento .

Kasia bajó la cabeza ocultando las lágrimas y sin contestarla salió por la puerta principal.

Lucy se quedó parada en la entrada, fija en la madera de la puerta recién cerrada, no podía pensar estaba bloqueada.

En el instante siguiente su mente reaccionó, imaginó a Kasia saliendo por el portal del piso y subiendo a un taxi, no podría soportarlo, simplemente no encontraba las fuerzas para oponerse a su necesidad de ella. Salió corriendo ya no estaba en el pasillo, ni en las escaleras. Estaría en la calle esperando a un taxi pensó.

Corrió escalera a bajo , ella vivía en un segundo no tardó en llegar a la puerta, salió lanzada a la calle, que estaba vacía era tarde no había nadie por allí.

Se quedo helada, la había perdido.

Allí de pie muerta de frio tenía que hacerse a la idea, es cierto que abandonó a kasia poniéndola en peligro en mitad de una calle de madrugada.

Bajó la cabeza derrotada, no lo había pensado y ahora ni siquiera ella podía comprender su reacción.

El silencio la invadió , no quería moverse albergando la ilusión de un posible regreso de esa mujer, que aún consciente que le había fallado , estaba dispuesta a perdonarla si ella hubiera confiado lo suficiente para no dudar ni un segundo de su lealtad.

Lágrimas bajaron por sus mejillas, refrescando su piel con su rastro húmedo.

Se dio la vuelta derrotada, no iba a volver incluso podría ser que nunca volviera.

Levantó la cara para que el aire helado le calmara la piel rojiza y húmeda por el llanto.



Capítulo 37
Y allí estaba, mirándola mientras salía entre la oscuridad de la entrada al bloque del piso.

Lucy la miró sorprendida.- No te he…visto.

.- Ya me he dado cuenta- le sonrió - salías tan rápido que has pasado a mi lado en la oscuridad sin verme.

Se acercó con temor unos pasos – Pensé que tu..- bajó la cabeza sintiendo la culpabilidad – te habías marchado en un taxi y yo…

.- Tú te quedaste sola ¿verdad? –la sonreía mientras acortaba la distancia entre ellas limpiándola con sus dedos las lágrimas de sus mejillas.

La emoción de tenerla tan cerca otra vez le hizo temblar; su corazón emocionado latía fuerte con los nervios a flor de piel. Kasia la miraba con cariño.

.- Lo…lo siento – la cogió de las manos – de verdad amor yo …- nuevas lágrimas brotaban de sus perlas azules – yo nunca me hubiera alejado sin volver a ver si estabas bien – la besó las manos – por favor créeme, eres toda mi vida , he sido una estúpida el no creerte de inmediato- su cara rogaba una reacción de la rubia – por favor kas los celos ¡¡ los malitos celos!! me tenían ciega.- se iba alterando más a cada palabra, el temblor de su cuerpo , sus lágrimas y su respiración delataba completamente su estado de nervios en el que se estaba hundiendo.

.-Susss cálmate amor – la acarició con la palma de una mano en la cara mientras se limpiaba sus propias lágrimas con la otra. Lucy movió la cabeza uniendo su cara a la caricia. – Lo entiendo, he sido una idiota por querer hacerte sentir el dolor que todo esto me ha hecho a mí misma.

Se acercó acortando casi toda la distancia que separaban sus bocas.

.- Kas te amo, no conseguiría vivir sin ti, ya no.

.- Lo sé – agarrando su rostro con las manos la besó suavemente – yo nunca te dejaré – la volvió a besar algo más intensamente, se separó lo suficiente para clavar sus ojos en los azules perdiéndose en ellos – no podría, además… - sonriendo con una mirada cómplice susurro – Si yo llego a ser tu , me hubiera ido a partirle la cara a esa estúpida pelirroja .

Ambas rieron y volvieron a besarse, en el cuerpo de Lucy todas las sensaciones de miedo y dolor se calmaron.

Su corazón y respiración se normalizaron, abrazó a kasia para intensificar el beso sintiendo ahora los latidos del amor.

Sus cuerpos volvieron a encenderse sintiendo la pasión que las unía.

Kasia se separó del rostro de su chica y soltando un feliz suspiro – Amor estamos en mitad de la calle, ¿no sería mejor que subiéramos?.

.- Es verdad – contestó Lucy , besándola y agarrándola fuerte por la cintura la levantó dando varios paso, al final viendo que no podría con ella, la soltó entre carcajadas.

.- Mejor subo yo solita –

.- Si – se miraron felices y tranquilas una vez enfrentadas antes sus dudas con lágrimas y saliendo victoriosas con sus risas.

Entraron jugueteando, al traspasar la puerta Kasia volvió a sujetarla de la cintura , con un pequeño empujón unió sus cuerpos y enganchando con sus labios la boca de la morena se introdujeron en la habitación.

Kasia quiso empujar a su chica hacía la cama pero Lucy dominó sus cuerpos girándolos y la echó en la cama quedándose de pie , sonriendo lascivamente a ese cuerpo que tanto ansiaba tener.


Sonreía pícara y relajándose sobre el edredón notaba como Lucy la provocaba con una simple mirada mientras se llevaba las manos hacia el cuello de la camisa, la respiración de ambas se iban acelerando.

Sin dejar de clavarle los ojos, se desabrochó el primer botón dejando ver la piel donde caía un colgante; con forma de nota musical.

Luego el segundo donde se empezaba a dibujar el camino del centro de sus pechos.

Kasia sintió como el fuego de su bajo vientre se prendía con cada centímetro visible de esa hermosa piel y dejando que la imaginación corriera más rápido que las manos se excitaba a cada segundo algo más.

Ahora un botón mas y se perdió en la tela blanca del sujetador que destacaba sobre la tez más oscura de la piel de la morena, se imaginó mordiéndola y quitándosela para saborear el tesoro que protegían, la boca se le secó deseosa de ese placer.

El cuarto botón, el inicio del ese estómago liso y atlético. Las pupilas de kasia se abrieron.

El quinto botón y el último de la camisa.

En ese momento los ojos oscuros tras perderse en la intensa mirada azul se fijaron como imanes en el botón del pantalón negro de tela vaquera que protegia el resto de su cuerpo desde la cintura hasta sus pies.

Esos delicados dedos que jugaban con su deseo se entretenían ahora moviendo el botón plateado.

Kasia se mordió el labio inferior y sus ojos profundizaron en lo que se iba descubriendo con los movimientos de esas manos.


Viendo el principio de la braguita de Lucy pensó en las suyas y las noto humedecidas, su sexo se empezaba a inundar con sólo la hermosa visión de ese cuerpo que se le iba mostrando poco a poco.

Su pelvis empezó a desear moverse y tuvo que mantenerse controlada para no lanzarse a ella y hacerla suya.

El pantalón cayó al suelo con un delicado movimiento del cuerpo al que tapaba.

Muy despacio y sin dejar de encenderla con su mirada, lucy se sacó los pantalones por los pies descalzos. Sólo le quedaba encima la ropa interior blanca.

La pelvis de kasia ahora gritaba desesperadamente para empezar a moverse pidiendo ser saciada, sus pensamientos hacían rato se habían esfumado.
Lucy manteniendo el lento movimientos de sus manos, se quitó el sujetador, estaba excitada sus pezones duros y sus pechos hinchados rogaban ser atendidos con la mayor pasión posible.

Kasia se mantenía muda mordiéndose de deseo el labio inferior y pasando la lengua por ellos.

La morena no podía disimular lo mucho que la estaba provocando, las miradas y el deseo que ya era muy visible en su chica.

Cuando sus manos bajaron acariciando su propia piel para meterse dentro de sus bragas, de un salto kasia se puso de rodillas en la cama y la abrazó empujándola hacia ella para atrás tirándola (en) sobre el colchón, girándola para dejarla boca arriba, ella se colocó sobre ese cuerpo desnudo y la besó apasionadamente.

Y sin más espera se bajó hacia su vientre ,parándose a besar un par de veces la piel ardiente en el camino, besó y acarició con los labios su sexo a través de la tela, el cuerpo de Lucy ya sin ningún esfuerzo de contenerse se movía, rogando ser atendido.

Con los dedos quemando la piel a cada roce quitó suavemente la última prenda que protegía el cuerpo ahora desnudo de su amante.

De rodillas entre sus piernas se quitó el jerséis deseaba sentir ese piel en la suya mientras se perdía en ese sexo, húmedo y palpitante, que tanto deseaba poseer.

Los jadeos procedentes de la garganta de su morena amante, la excitaba y la animaba a besar, lamer y mordisquear con más pasión ese centro del placer absoluto que tantas otras veces había saciado.

El cuerpo de Lucy estaba ardiendo, su piel húmeda de sudor y sus movimientos cada vez más acelerados le gritaban a su amante que saciara toda su necesidad de ser poseído.

Kasia presintiendo el orgasmo de su chica, introdujo dos dedos suavemente, y en movimientos cada vez más rápidos y con más presión se dirigió hacia su vientre, besando el camino y saboreando cada milímetro de piel.

Subió sus labios hasta los pechos y mientras los besaba, los lamía y los mordisqueaba produciendo más gemidos en su amante, los movimientos de sus dedos ayudados del resto de su mano ahora empujados con su muslo, se aceleraron rápidamente presionaban mas en cada ola de pasión.

El cuerpo que tenía debajo Kasia se arqueó, sus músculos se tensaron y al paso de un rayo cargado del más puro placer se fueron relajando.

La espalda de Lucy volvió a tocar el colchón y todo su cuerpo dejó de temblar, su respiración poco a poco fue recuperando el ritmo normal, y su corazón bajó los latidos.

.- Kasia, te amo, te amo - sus manos se perdieron en el pelo rubio, acariciando su cabellera mientras esta recobraba la respiración, alterada por el esfuerzo.

Lucy al recuperarse se giró poniéndose sobre el cuerpo medio desnudo de su amante.

Acariciando toda la piel desde el sujetar a los pantalones, se centró en desabrocharlo sin dejar de mirar intensamente lo ojos de su chica. Lo desabrochó y se lo quitó sin más demora.

Ahora con sus piernas desnudas encajándolas unas con otras mientras quemaba toda la piel en la que se rozaban, se dispuso a presionar sobre las bragas negras con su muslo, mientras con sus manos desabrochaba el sujetador, el cuerpo de kasia se empezó a mover en el suave baile del deseo.

La morena entre sonrisas pícaras juntó sus bocas, acariciando sus labios con los otros, su lenguas se buscaban, Lucy provocaba más deseo en la boca de kasia y cuando esta quería saciarse en la suya, se alzaba provocando más deseo.

Agarró sus manos y alzando sus brazos los puso en la almohada por encima de su cabeza, ahora mandaba ella mientras presionaba la pierna notando la humedad y el ardiente calor que desprendía el centro de placer de su amante.

Perdió su boca en su cuello besando el lóbulo de una oreja y recorriendo despacio el camino hacia la otra, fue besando, saboreando con su lengua la piel y rozando con los dientes toda la piel haciendo una pequeña parada en su barbilla prosiguió hasta llegar a su destino.

Al saciarse de esa parte del cuerpo y mientras su pierna incrementaba la excitación y sus brazos mantenía dominado el cuerpo que tenia debajo , se dirigió a saborear los pechos blancos y duros que ahora tenía delante.

Decidió intensificar sus caricias y besos en ese lugar tan característico y soltando los brazos de su amante , y ayudada ahora por sus manos los disfrutó todo lo que deseaba perdiéndose en los pezones rosados y duros de uno a otro mientras sentía los dejos de kasia hundiéndose en su espalda.

Los gemidos de kasia aumentaron su frecuencia según iban pasando los segundos de placer convertido ahora en la tortura en la que Lucy la estaba sumiendo.

Su sexo empezó a palpitar y sus movimientos dirigidos a presionarse contra la pierna de Lucy se incrementaron.

.- Amor por favor, hazlo ya, no puedo más, ¡joder Lucy te necesito dentro ,ya!! – los jadeos ahora eran tan continuos que se mezclaban con la respiración entrecortada.

Todo su cuerpo pedía, ¡no! rogaba sentir la explosión del máximo placer surgir de su interior.

Decidió aumentar más el placer antes de saciarla completamente.

Bajando con besos hacia su pelvis, le quitó las bragas levantando el borde con los dientes y apartándola con las manos de su cuerpo; no con prisa pero sin pausa, recorrió con las manos sus piernas para deshacerse por completo de la húmeda prenda.

Abrazó su muslo derecho con un brazo y con el otro acariciaba su vientre adaptando su cara y su mano al movimiento casi desesperado del cuerpo de la chica.

Con los labios atrapó su clítoris, luego viendo que kasia no podría aguantar más introdujo su lengua en la vagina de esta, lamiendo y saboreando todo su sexo, incremento la presión más y más rápido, con más y más fuerza.

El movimiento ya era desesperado, una explosión ardiente surgió de ese maravilloso centro de placer y kasia sintió por unos segundos todas y cada una de las células de su cuerpo y el estremecimiento en sus fibras junto con el brote de un estallido de placer en su piel.

.- ¡ Dios, te amo !! .- grito ante la gran sonrisa de satisfacción que cubría la cara de su amante.


Capítulo 38
Subió buscando de nuevo sus labios, los acarició y los besó muy suavemente, saboreando el efecto que su pasión había producido en su amante, que ahora intentaba recuperar fuerzas respondiendo a sus besos sonriente.

El día amaneció soleado, la luz entraba por las ventanas y las despertó entre besos y sonrisas cómplices.

En el silencio de la mañana oyeron el golpe de un vaso contra el suelo. Las dos se miraron, Lucy sonrió – Debe de ser Dennis, es un desastre siempre se le esta cayendo al suelo.

Kasia dando un salto salió de la cama – Me voy a la ducha amor–.

.- Oh, quédate un rato más – la tomó del brazo y quiso volverla a meter en la cama.

.- Lucy déjame, amor estoy feliz quiero ver el sol porque mi estrella ya está aquí – se inclinó para darle otro beso, su chica se rindió.

Cuando la chicas entraron en el comedor Dennis la recibió contento, mientras que recogía cristales rotos del suelo. Lucy miró burlona hacia kasia.

.- ¡Hola, chicas! ¿Cómo estáis? – Las miró sonriendo y bajó la cabeza para no parecer demasiado burlón – Ya veo que estáis muy bien.

.- ¡Dennis! – dijo la rubia sentándose en la mesa y golpeando el brazo de su amigo, siguiéndole la broma.

Lucy también reía dándoles la espalda mientras preparaba el café para ambas.

Luego se sentó con ellos dándole una taza a su chica, la regaló una increíble sonrisa llena de todo el amor y la devoción del mundo, que encendió unos fuertes latidos en su pecho.

Tomo aire para intentar volver a relajar su corazón pero cada vez que se perdía en esos ojos azules que la miraban hechizados, su ritmo volvía a desquiciarse.

.-Bueno tenéis algo preparado para hoy, bueno..-su voz sonaba aburrida -..hasta que empiece la sesión de las 8 claro.

.- Pues..- kasia lo cortó.

.-Vamos a ir al parque a pasear y luego quiero dar una vuelta por toda la ciudad y….- Paró al darse cuenta de la cara de burla mezclada con alegría con la que Lucy la estaba mirando.- ¿Qué?.

.- Nada , jaja, que me alegra verte tan no se….- Se reía alegremente -.. tan viva, mi amor.

Movió la silla para quedar justo cara con cara.

.- Tu eres el aire que respiro y tenerte tan cerca me da energía para mover el mundo – besos sus manos – ya lo sabes.

.- ¡Bueenoo!, yo me voy a hacer unos recados…y bueno.. – mirando como le ignoraban se levantó rápido –hasta luego tortolitas jaja- se despidió cerrando la puerta al salir.

Lucy sujetó la cara de Kasia y la besó, un sólo beso que encendía la pasión de las dos.

Otro y el deseo de no parar las volvió a invadir. Kasia se apartó suavemente de su rostro.

.- Mi amor hace un día estupendo y de verdad que quiero ir al parque y que los rayos de sol nos inunden las caras juntitas-.

.- Ohhh,- dijo triste con cara de niño fastidiado – vale, vale, iremos al parque – le volvió a regalar una de sus sonrisas pícaras – ya te pillaré.

Las dos por unos segundos se perdieron en los ojos de la otra, momento que rompieron con sonadas carcajadas y ambas se centraron en sus desayunos.

Ya estaban vestidas y arregladas, les había costado un buen rato entre besos ,caricias y separaciones traumáticas en busca de tranquilizarse lo suficiente para salir al paseo en público como tanto deseaba kasia, aunque Lucy prefería claramente jugar en la cama toda la mañana.

.- Niña, ya te compensaré tenemos todo el tiempo del mundo pero este sol y mis ganas de quemarme en él no están todos los días.

.- Pero si yo ya me quemo aquí – se acercó de nuevo a los labios rojos y exquisitos de la rubia – y sé muy bien que mis manos también queman la tuya.

Kasia le respondió con un profundo y pasional beso – Es que definitivamente no puedo contigo. Cedió y el ambiente empezó a calentarse.

Sus manos se introdujeron por las ropas que cubrían sus espaldas y el abrazo se hizo más y más profundo.

.- ¡chicas, menos mal que aún estáis aquí! – Dennis entro diciendo estas palabras y al verlas allí paradas mirándole quietas, con caras sorprendidas y sus respectivos cuerpos entrelazados aún vestidas, no pudo evitar una gran sonrisa mientras aguantaba las carcajadas.

Las dos se separaron lentamente, había confianza de sobra.

Y mientras se colocaban la ropa, bien.

.- Dennis ¿qué te pasa? – preguntó kasia y mirando como el chico se había quedado parado con una gran sonrisa – puff , amigo esa cara no es por lo que estas viendo ¿verdad?, es algo mucho más grande ¿no? – Al ver que seguía igual la dio en el brazo – Reacciona y contéstame.

El chico sin perder la sonrisa las empujó hasta el comedor.

.- Veréis me he encontrado con un amigo, bueno un ex, y me ha invitado al parque de atracciones y como sé… – puso una gran cara de pillo –.. que os gusta, he pensado que fuéramos los cuatro.

La rubia sonrió e intentando no sonrojarse miró a su chica y luego algo más seria contestó.

.- Gracias cariño pero no crees que deberías ir sólo con él , igual eso es lo que el quiere.

.- Claro que es lo que quiere, pero no pienso ponérselo tan fácil, así que venga acabad de prepararos que nos vamos – Se paró burlón ante su amiga – a tomar el sol y a montar en las atracciones mas impresionantes de la comarca – se fue a su habitación soltando carcajadas.

Las dos chicas se rieron y se fundieron en un fuerte abrazo.

.- Te quiero con toda mi alma – le susurro Lucy en el oído de kasia.

Esta esperó a estar de frente a ella para susurrarle mientras la miraba con amor ilimitado.

.- Y tu eres todo mi ser – la beso – te amo.

Tras varios besos iníciales que tenían un camino totalmente señalado, ésta vez fue la morena quien paro la pasión.

.- Vamos que disfrutaremos con estos dos chicos, jajaj. – la agarro de la mano y se volvieron a arreglar un poco.

Se les paso un buen rato entre arreglarse, juguetear y volver a adecentarse para salir, finalmente pararon ese juego peligroso de convertirse en ciclo al oír a Dennis llamarlas en la entrada del piso.

.- ¡Venga ,vamos! Que me ha llamado Jorge y nos espera abajo en 5 minutos. – dijo arropado en una falsa seriedad, estaba realmente alegre con el plan.

Los tres salieron riendo del portal y Dennis se dirigió a un chico que les estaba esperando apoyado en la pared.

.- Este es Jorge , esta es Lucy y kasia , mis dos chicas favoritas – las sonrió mientras ellas le daban las manos al chico.

Este era algo más bajito que su amigo , moreno y delgado.

Kasia se fijo en su mirada, era sincera y muy tímida, eso la hizo gracia dejando ver una suave y perfecta sonrisa.

Lucy la miraba tan perdida en ella que el chico pudo observarlas y en ese instante sintió un punzón de envidia sana, se moría porque Dennis algún día volviera a mirarle así.

Le clavó lo ojos y observó como el chico rubio desviaba su mirada al suelo rápidamente; “igual tengo una pequeña posibilidad” pensó echando a andar para llamar a un taxi.

Al llegar el sol ya estaba en lo alto y el cielo azul daba una gran sensación de bienestar al día.

Las dos chicas disfrutaban cualquier detalle, pero siempre con mucho cuidado de no mostrarse demasiado cariñosas delante de los demás. Por ello intentaban siempre mostrarse como dos grandes amigas, compartiendo un buen día con otros amigos.

Dennis se mostraba nervioso antes Jorge pero este le trataba de una forma tan exquisita que hasta a las chicas andaban locas con él.

Según pasaron las horas los dos chicos se dejaron de miedos y apartaron la timidez, jugueteaban y coqueteaban claramente creyéndose protegidos por la multitud .

.- ¡Hola! Perdone.- una chica joven interrumpió las risas de Lucy, que disfrutaba y jugueteaba con kasia parar lanzar un balón en la máquina de baloncesto.

Los ojos de Lucy risueños se centraron en la chica – ¿Sí? dime. – dijo mientras le daba el balón a kasia.

.- Veras…- se la veía muy tímida - ¿Es usted Lucy S. la gran actriz del musical Rebecca?.

.- Si claro soy yo – dio un paso hacia ella sonriendo y viendo que la chica la miraba sin reaccionar – ¿Necesitas algo?, no sé ..¿te puedo ayudar en algo? – preguntó con una amabilidad infinita.

.- Si claro – empezó a rebuscar en una mochila de viaje que llevaba colgada al hombro. – me puedes firmar esta foto por favor, sería muy importante para mi.

Se la puso en la mano junto a un bolígrafo; era una de las fotos oficiales del musical, Lucy la firmó sonriendo.

Cuando se la volvió a dar, la miró y lea hizo mucha gracia la cara roja de la chica, parecía estar absolutamente muerta de la vergüenza.

.- Quieres que nos hagamos una foto, así te llevaras un mejor recuerdo – le dijo señalando la cámara que la joven llevaba en la mano.

Los ojos se le abrieron tanto que no parecían ser más flexibles, y muy nerviosa miró para los lados .
- Sí, claro pero ….¿quién nos la hará? – miró a kasia pero por nada del mundo quería molestar.

Kasia con una gran sonrisa se acercó y la quitó la cámara de la mano, mandándolas a colocarse a unos metros la una al lado de la otra. – Venga…sonreíd – y en unos segundos la lucecita roja de la cámara digital se apagó.

.- Ya esta mujer – le devolvió la cámara a la chica que sonreía a más no poder.

.- Muchísimas gracias a las dos – miró a Lucy y algo menos sonriente – creo que eres unas de las mejores actrices que hay en este país, estudio canto en Berlín y soy una gran admiradora de tu trabajo.

La volvió a sonreír mientras quedaba embelesada en el bellísimo rostro de la cantante, reaccionó - Muchísimas gracias, sois muy amables, de verdad.

Kasia se mantuvo al marguen de las palabras que se cruzaron las dos chicas, admirando el cariño con que ese cuerpo; que reunía en uno mismo ser la esencia de su vida y la mayor artista que podría llegar a conocer, trataba a aquella joven que temblaba de pura admiración.

La chica se alejo sonriente y feliz, sintiéndose triunfadora por ese día.

Lucy miraba atontada la belleza del rostro de su chica. Se acercó a ella, mientras esta seguía la marcha de la desconocida.

.- Te comería enterita a hora mismo.- le susurro al oído.

A kasia se le encogió el corazón, por un segundo su celebro se alarmó de que alguien más reconociera a Lucy.

La separó de su cara con dulzura .- Ten cuidado te recuerdo que somos unas simples amigas disfrutando en el parte atracciones.-

Se alejó unos pasos, no sin tener que tragarse el deseo de agarrar esa mano que apenas con un simple movimiento la acoplaría al suyo.

La miró, y extrañada por la forma en que la rubia volvía a mirar el camino por el que la joven desconocida se había marchado.

.- kas ¿qué te pasa , porque miras tanto para allá?.

Su chica la miró y se hecho a reír a fuertes carcajadas – Es que si te lo digo te reirás de mi.

A Lucy se le pegó la risa – Es que si no lo haces me reiré igual, tonta. –

Se acercó soportando la risa , mirando perdida a esos ojos oscuros que tanto amaban – Sólo con verte reír me llenas de vida – y ahora soltando una sonrisa muy pícara - ¿No te habrá gustado la chica?.

Kasia instintivamente dio varios pasos para atrás, si la permitía acercarse, sabía que Lucy no dudaría en besarla allí mismo.

.- Noo, claro que no .

.- Uisnn, se la veía linda – la contestó poniendo cara de disgusto totalmente burlona y fingida.

.- No sólo que me ha hecho gracia la camiseta que llevaba, ya sabes con el dibujo del gato con botas.

Lucy la miró sin saber de qué le estaba hablando.

.- Si tontita, la imagen del gato de la saga de Shrek; el que va en una especie de uniforme de espadachín.

Lucy se hecho a reír inclinándose sobre si misma.
.- ¿Qué ? ¡tanta gracia te hace ¡– se estaba poniendo roja , la avergonzaba dar a conocer sus gustos infantiles , ahora decidió callar y no decirle que ella tenía una igual en casa.

.- Nada, nada cari…- paró – bueno nada kasia que es qué me encanta esa parte infantil que aún conservas.

Se acercó a ella y la cogió del brazo. –Venga vámonos que los chicos nos estarán esperando.


Capítulo 39
El día pasó rápido para los cuatro amigos, todos y cada uno estaban felicez llenos de esperanzas en sus sueños y por vivir ese bonito momento.

La Noche Buena se acercaba y durante la semana siguiente a la reconciliación, las chicas no se separaron; ni en privado ni en público.

Kasia iba a casi todas las sesiones de Lucy. Se situaba en la oscuridad y cambiándose de sitio en cada sesión para no llamar mucho la atención disfrutaba una y otra vez.

Pero no podía evitar que sus ojos la delataran cada vez que Lucy salía al escenario, Kasia cantaba sus canciones susurrando y aplaudía locamente con cada actuación.

Luego se iba directa al piso, para que las personas que esperaban fuera a la magnífica actriz no la relacionaran con ella.

Intentaron que la gente no se fijara en su relación y si alguien preguntaba las dos contestaban que se conocían desde hacía tiempo y que tenían una fuerte amistad.

A ninguna le hacía gracia que las preguntaran pero era necesario tener algo preparado para no meterse en problemas.

El día antes de Noche buena mientras desayunaban, Dennis entró alterado de felicidad.

.- Chicas, chicas – se acercó a ella y les dio un fuerte beso en la mejilla a cada una. Estas sorprendidas y sonrientes aceptaron la demostración de cariño complacidas – Tengo una gran noticia para daros – carraspeó y mirándolas con la euforia más calmada – bueno perdonarme es una gran noticia para mi solo jajajja.

.- Bueno, dinos ¿que pasa? – Kasia agarró la mano de Lucy en un acto ya habitual para juguetear con sus dedos mientras la curiosidad sobre la noticia de su amigo se incrementaba.

El chico se sentó a la mesa y respirando para relajarse, prosiguió.

.- Me voy a Paris con Jorge en Navidad, ainsss estoy muy feliz – las miraba alternativamente – estoy loco por ese chico y pienso disfrutar este par de días con él, lo máximo posible.

Se levantó de un salto y agarrándolas de la cara a cada una las volvió a besar antes de salir de nuevo por la puerta del comedor, dejándolas acabar el desayuno tranquilas.

La rubia miraba a Lucy sonriente pero a esta la había invadido alguna tristeza que se le escapaba.

.- Cariño, ¿Qué te pasa?¿algo no va bien?.

.- ¿A mi? No, no me pasa nada – puso una sonrisa falsa y bebió débilmente nerviosa de la taza de café. - ¿Qué me va a pasar? Estas tú aquí, no me pasa nada.

.- Te conozco Lucy , sé que te pasa algo – tomó un sorbo de café esperando una respuesta que no llegó – vamos, no puedes engañarme – sonrió – ya no. Dime que te pasa, anda.

.- Bueno supongo que te iras, mañana ¿verdad? .

.- Si , te recuerdo que hace un par de semanas que lo hablamos – la seriedad en la cara de Lucy ya era muy palpable – pero…¿Qué problema hay?. Tu también te iras a casa de tus padres – buscó la mirada ahora perdida en la taza de café de su chica – Lucy ¿hay algo que no me has contado?.

.- Bueno, yo no podré irme a ningún sitio – levantó la cabeza atrapando la mirada extrañada de Kasia. – no tengo días libres hasta año nuevo.

.- ¿Y eso? ¿no me dijiste que cogerías Noche Buena y Navidad para ir con tu familia? ¿Y qué por eso yo también me iría esos días a Berlín para luego estar todo los demás días juntas? .

.- Kasia ¿no te has parado a pensar que hacía yo la noche de la fiesta en Berlín?.- un punzón de dolor la pinchó en el estómago, aunque ya estaba todo arreglado el recuerdo aún quemaba.

.- Si bueno…la verdad es que no, con todo lo que sucedió no he querido pensar nada sobre aquello - ahora era ella la que miraba a la taza queriendo evitar los ojos azules arrepintiéndose por no haberse fijado en ello.

Levantó los ojos, sorprendida y temerosa de sus pensamiento.

.- Cariño…¡¿cambiaste los días de estar con tu familia por ir a esa fiesta ?! .

Lucy rió tristemente - No exactamente mi amor, una semana antes de esa noche pedí el tomarme esos días para llevarte a una cabaña en las montañas para hacer turismo rural contigo ese fin de semana – bajó la cabeza recodando apenada. – y cuando me dijiste tu cambio de planes pues yo ya no pude dar marcha a tras con mis obligaciones con la productora.

Kasia se levantó y la animó a levantarse, después le regaló un fuerte abrazo con todo el amor del mundo.

.- Te quiero, realmente eres maravillosa – separándose lo justo para besarla – no me creo la suerte que tengo de haberte encontrado.

La morena se emociono, tanto amor en su corazón hacía que las lágrimas brotaran sin ni siquiera comprender el porqué.

.- No te voy a dejar sola en Navidad, ni aunque me obligasen a marchar de tu lado.

Lucy apretó más el abrazo y de nuevo perdió su rostro en el cuello de su chica inspirando todo su aroma.

Unos instantes después y sin cortar el abrazo.

.- Deberías ir con tu familia, no quiero separarte de ellos.

.- No, me quedaré con lo que mas amo y necesito en la vida. – se separó y tras darle varios besos dulces, la agarro de las manos - y hoy hablaré con ellos, definitivamente no me separaré de ti.

La sonrisa de Lucy sobrepasaba las anteriores, estaba tan llena de amor y de alegría que apenas ella podía ser consciente de esa feliz realidad.

La única sesión de noche buena era a la 6 , las dos chicas estuvieron juntas como todos los días, una en el escenario y la otra en las butacas.

Al acabarla esta vez Kasia la esperó a la salida distanciada del resto, y para no llamar la atención se unió a ella ya en la acera de camino al metro.

.- Como siempre amor una gran actuación – le dijo rozando con sus dedos la mano de la morena, mientras miraba al frente sonriendo. Era el único roce que se podían permitir en mitad de una calle repleta de gente.

La morena siguió andando como si no la hubiera oído, de repente se paró en seco, se giró y la abrazó de forma lo mas casta posible.

.- Recuérdamelo en casa que te conteste como es debido – se separo riéndose volviendo a retomar el camino.

Kasia se había quedado pasmada por ese abrazo, no se lo esperaba y en su cara se implantó una sonrisa abobada.

Llegaron al piso y Lucy fue directa de la habitación a la ducha mientras Kasia preparaba la cena como era lo habitual.

Al salir del baño sólo tapada con una toalla a la morena le extrañó ver en la oscuridad del comedor un reflejo parpadeante, sin pensarlo se acercó a ver lo que era.

Su corazón se aceleró por la emoción que le produjo ver una maravillosa mesa de Navidad con todo lo necesario para pasar una velada de ensueño apenas iluminada con un par de velas.

Kasia salió de la habitación y al verla allí parada de pie ante la mesa, se acercó y rodeando con sus brazos su cintura pegó su cuerpo a su espalda.

.- Feliz Navidad , mi amor. – le besó tiernamente el cuello aun húmedo de la ducha.

.- Pero Kasia…¿cuándo?... no sabía nada – abrazó las manos de su chica.

.- Ja , esa era la idea ¿realmente pensabas que iba a permitir que tomaras una pizza en la noche de Navidad? – la respondió con una suave caricia de su labio inferior sobre su cuello.
Lucy sin pensarlo se giró y pasó sus brazos por el cuello de su chica, la toalla cayó al suelo.

.- Eres lo mejor de mi vida – y se perdió en las sensaciones de un profundo beso.

Cuando dejó que Kasia pudiera hablar de nuevo, esta echó a reír.

.- Amor te morirás de frio si no te pones algo aquí mismo –

.- puff, o mejor subimos la calefacción -

Kasia no lo dudo y la soltó para ir al mando de la temperatura.

.- No – Lucy la paró agarrándola un brazo y volviendo a pegarse a su cuerpo – déjalo mejor me visto para comer y seguro que luego no hace falta que subas esa temperatura. – sus labios se rozaban, pero antes del beso la morena se separó sonriente – me voy a vestir, ahora mismo vuelvo.

Kasia tubo que aguantarse las ganas de poseer ese cuerpo escultural desnudo hasta después de la cena.

Pasaron la mejor noche de sus vidas hasta aquellos instantes, comieron, bebieron y rieron hasta altas horas de la noche, luego hicieron el amor una vez y cuando se recuperaban lo repitieron otra vez y cuantas veces pudieron hasta quedar absolutamente rendidas aunque ambas sabían que jamás se saciarían la una de la otra totalmente.

La noche anterior Kasia había bajado las persianas al máximo para que la luz del día no las despertara, en Navidad no había sesión por lo que podrían amarse sin que el tiempo las apremiara.

Se despertó lentamente con su cabeza en el pecho de Lucy, notando su corazón y su respiración rítmica y relajada.

Estuvo un buen rato en esa postura sintiéndose flotar en el cielo, cuando empezó a sonar el móvil de su chica en el comedor.

Lo dejó sonar pero Lucy se despertó con el ruido e ignorando, no sin esfuerzo su petición de que lo dejara sonar, ésta se fue a atender el teléfono.

“Si mama…vale mama” Kasia intentó respirar lento para oír las palabras de Lucy ,era demasiado cotilla para ignorarlas , “vale, aquí estaré, os espero , besos” .

Al ser consciente del las últimas palabras sus ojos se abrieron de par en par.

Lucy llegó a la habitación algo alterada.

.- Dios mis padres están aterrizando, en menos de media hora están aquí.- Se iba poniendo mas nerviosa según salían sus palabras por su boca.

Kasia se quedó parada no tenía ni idea de como reaccionar, mientras la veía vestirse rápida y torpemente.

.- Kas, amor, venga levantate … - se inclinó y le dio un beso corto y luego se dispuso a arreglar su cama.

La rubia se levanto y empezó a vestirse, despacio sin saber como reaccionar exactamente. Lucy la miró, resoplo y sonrió.
.-Mira, báñate tú primero mientras yo recojo esto, pondré todas tus cosas en el cuarto de Dennis, luego me ducharé yo, así entre las dos recogeremos el resto y si llegan pues la que este preparada pues les abrirá la puerta y ya, ¿vale?.

.-¿Le diremos de que somos amigas verdad? – preguntó con temor Kasia, su chica le había dicho tantas veces que no le importaba gritar su amor que temía que lo soltara hoy delante de su familia.

.- Claro, amor – la besó y con una palmada en el culo la dirigió al baño.- venga que no tardaran.

Al cabo de un rato las dos estaban preparadas, Lucy estaba nerviosa pero lo aparentaba mejor que Kasia, que no se sentía cómoda en ningún lugar del piso.

.- Creo que sería mejor que yo desapareciese - dijo finalmente frotándose las manos sin poder relajarse.

.- ¿Qué? ¡Claro que no! – sonriendo la cogió por la cintura y se pegó a ella – tu eres una de mis mejores amigas y tu familia está de viaje, y para estar sola pues estas aquí conmigo, tenemos una pura y casta relación de amistad.

La besó tan tiernamente que a Kasia la flojearon las piernas – Vale “amiga”, lo que tu quieras “amiga”.

Ambas se rieron sin separarse, el timbre de la puerta del bloque sonó.

Ya están ahí. Lucy cogió el telefonillo y les abrió. Miró a Kasia totalmente convencida de que todo iría bien.



Capítulo 40
Kasia se situó a una distancia prudencial de la puerta, lo suficiente para ver el saludo de Lucy y ser parte ajena en ese momento familiar.

Tras dar los correspondientes besos los dirigió al comedor donde ahora esperaba ella para ser presentada.

.- Papá, mamá esta es kasia – se la señaló a sus padres con la misma educación fría y cortante que ellos la saludaron – es una buena amiga que tampoco ha podido viajar a casa de sus padres.

Kasia sintió como un escalofrío helador le recorría el cuerpo al mirar los ojos negros de la madre de Lucy, la dio la impresión de que esa mujer la odiaba antes de verla por primera vez, se extrañó verdaderamente de su reacción al conocerla.

El padre la saludó con una sonrisa cariñosa y con un apretón de mano suave y correcto, esos gestos amables la tranquilizaron algo.

La madre clavó la mirada en la cara de su hija como esperando más explicaciones – ¿una amiga? – miró a kasia de arriba abajo - ¿de dónde? – volvió a mirar a su hija fríamente – bueno… si se puede saber por supuesto.

.- Del musical y también trabaja esta tarde.

.- Bueno hija, hemos decidido venir a comer contigo ya que tú no has podio ir a Berlín.- dijo el padre a Lucy mientras esta le sonrió dirigiéndole una mirada cariñosa.

.- Bueno pues genial, entonces vendrá con nosotros.

.- Genial papá, claro ¿verdad? – miró con una gran sonrisa a kasia, que seguía de pie sopesando la extraña actitud de la madre.

.- Si claro – asintió una sincera sonrisa.

Al salir a la calle la niebla lo inundaba todo, la luz gris iluminaba escasamente los detalles de las avenidas de una ciudad casi desierta.

Hacía mucho frio y junto a la humedad que lo mojaba todo no era un momento agradable para pasear, pareciera que el invierno entraba señalando su lugar en el calendario.

La calefacción del Audi que el padre de Lucy conducía llegaba a kasia en la parte de atrás, produciéndola un suave alivió momentáneo sobre la piel fría de sus mejillas.

Sintió el calor de la mano de Lucy sobre la suya.

Lucy la acarició aprovechando la protección de ese espacio del coche.

Miró al retrovisor empujada por la curiosidad y sus ojos chocaron con la mirada oscura del rostro de su madre.

Sintió un punzón de temor en su alma, esa mirada la estaba juzgando, por alguna razón presentía que su madre la estaba vigilando en cada movimiento.

Ese instante de pavor hizo que soltara con prisa la mano aún fría de su chica.

Kasia la miró con media sonrisa, se había percatado de la mirada al retrovisor y el posterior cambio en sus ojos.

Ambas se buscaron y la rubia la regaló una mirada llena de complicidad que relajó a su novia.

Al llegar al restaurante kasia quedó impresionada por el nivel de lujo de este.

Sabía que Lucy pertenecía a una familia rica pero al ver la ostentación del local y lo familiar que ese lugar les resultaba a los tres se sorprendió.

Empezaba a ser consciente de la clase de vida que rodeaba el ser que amaba.

Lucy estuvo toda la comida atenta a ella, desde ayudarla a elegir el menú en una carta en la que no entendía nada, a preguntar como estaba o si necesitaba algo a cada instante.

Pero no pudo evitar sentirse nerviosa, la impresión que le producía que los ojos negros de su posible futura suegra que la vigilaban y analizaban cada movimiento la empezaba a ahogar.

Cuando sintió el roce da la mano de Lucy por debajo de la mesa en sus vaqueros, dio un salto y se levantó pidiendo permiso para ir al baño dirigiendose al fondo del salón.

Lucy se quedó sorprendía y sin separar sus ojos de su espalda sonrió cómplice.

.- Permiso – y sin más se levanto con el objetivo de seguirla.

.- Claro amor- al dar un par de pasos, escuchó la contestación amable de su padre, y con una suave sonrisa para si prosiguió su camino.

Al llegar al baño se encontró a kasia mojándose la nuca mientras respirando costosamente.

Se acercó y se puso a lavarse las manos justo en el lavabo de al lado, miró a su alrededor y había tres mujeres más acicalándose al su alrededor.

La observó intentando leer su comportamiento, sonrió para si suponiendo el estado de nervios que tendría.

.- ¿Estás bien? – la preguntó casi en susurro.

Kasia miró hacia los dos lados, cerró el grifo y se dirigió a coger papel para secarse las manos.

La morena extrañada la observó como se pasaba el papel las manos nerviosas, mirando a los azulejos situados a su altura y permaneciendo callada.

Cerró su grifo y se puso a su lado imitando su acción.

Ambas observaron en silencio como las otras chicas salían una por una del baño.

No sin esfuerzo buscó la mirada de aquellos ojos oscuros que parecían perdidos en su pequeño mundo particular.

.- Kas, amor ¿estás mejor? – silencio y se acercó a su rostro - ¿más relajada? – más silencio – por favor - subió su mentó cariñosamente en busca de su mirada, en un esfuerzo de tranquilizarla con sus ojos.

Pero aunque la rubia se dejó dirigir el rostro seguía negándose a mirar directamente a las dos perlas azules que la reclamaban impacientándose.

.- kas amor dime algo – buscó con pequeños movimiento ya casi desesperada su atención.

Kasia clavó en un rápido instante sus ojos sobre ella.

.- No me llames así – calmó su tono al darse cuenta que si no se controlaba este sonaría más alto de lo debido- ...podrían oírte- y dio un paso para atrás, esa cercanía ahora la incomodaba.

.- Vale – dio un paso para atrás también intentando que kasia se relajara. – Pero necesito saber qué te pasa.

.- ¿Qué me pasa? ¿Qué te pasa a ti?..es decir ¿en qué estabas pensando? – notó la expresión de extrañeza de su chica. – Si ya sabes..- se giró y dándole la espalada - ..tocándome en la mesa con tus padres sentados allí mismo, lo he notado.

La morena sonrió aliviada - ¿eso ha sido?.. si reconozco mi culpa - Se acercó a su espalda y la rozó con sus dedos la mano que más cerca tenía , su chica la apartó y este gesto la preocupó.- kas sólo quería tocarte la mano – acercó sus manos a su espalda pero sin tocar la tela luchando con el deseo de acariciarla.

Las bajó soltando un suspiro que kasia pudo oír y que la estremeció al notar el aire respirado por Lucy rozarle el cuello deduciendo la cercanía de esa boca que tanto deseaba.

Se giró y no sin dudarlo antes , la agarro las manos despacio.

.- Estoy bien, es que me he puesto muy nerviosa al notar tu tacto en el muslo – la regaló una pícara sonrisa mezclada con el temor en sus ojos – siento mi comportamiento infantil.

Sonriendo movió la cabeza mostrando que la entendía y miró rápido la estancia para asegurarse que no había nadie.

Apretó sus manos y la besó suavemente.
.- No te preocupes por mis padres, ellos son así de serios – notó como kasia bajaba los ojos en un gesto triste y enseguida se dio cuenta de que seguro que habría notado las miradas de su madre.

Decidió volver a juntar sus ojos, y con sus frentes juntas – Mi madre no se como a nadie – sonrió intentando mostrar seguridad – aún.

La rubia la sonrió devolviéndole el pequeño beso – Venga vámonos. – se soltaron las manos y sonriendo se dirigieron a la mesa.

Tras la comida navideña salieron todos del restaurante , la luz era casi la misma, la niebla no había abierto y a esas horas ya no lo haría.

.- Bueno chicas, ha sido una comida estupenda – las sonrío sinceramente el señor Schindler mientras se colocaba el abrigo – pero ahora nos tenemos que volver a Berlín que tengo unos negocios pendientes y urgen para mañana, ¿cariño? – le dio un beso a Lucy y – encantado de haberte conocido – le ofreció la mano amablemente a kasia – lo mismo digo, un placer – le respondió todo lo cortes que sabía ser.

El chico encargado de los coches no tardó en llegar con el Audi.

La señora Schindler permaneció en silencio hasta el último instante.

.- Bueno chicas , Lucy – la dio un seco beso en la mejilla – te llamaré esta noche, quería hablar contigo pero mejor lo dejamos para año nuevo – miró descaradamente a kasia y volvió a dirigirse a Lucy con una sonrisa irónica – que seas tú la que nos visites.

Por un segundo kasia deseó que no se dirigiera a ella y se acabara rápida esa incómoda situación.

Estaba claro que esa mujer mayor de ojos negro no la quería cerca de su hija , cosa que no había intentado disimular en casi ningún instante.

.- Y a ti.. – la dirigió la mano con unas de las sonrisas más falsa que kasia había recibido en su vida – … encantada, niña.

La devolvió el saludo con el rostro demasiado serio aprovechando que su marido estaba subiendo al coche y Lucy mirando para el lado contrario, simplemente no pudo evitar ser sincera en ese momento.

Al enfrentarse a la mirada asesina de esa mujer la sensación de que esa astuta mujer las había descubierto la volvió a inundar.

Se fueron para el piso.

Hablaron y entre arrumacos pasaron las escasas horas para la sesión especial de Navidad.

Lucy intento quitarle la mayor importancia posible a la actitud de su madre. Esta estaba enfadada desde que por teléfono le contó que había dejado a Jonny, y así se lo explicó a kasia.

La joven rubia por su parte se calló todos los miedos y temores que le habían creado los instantes vividos.

El viaje a Berlín se le estaba haciendo largo se convenció de que no debía alterar a su marido mientras que conducía pero a cada minuto que pasaba más se enfurecía y ya no podía callar mas.

.- Al final ese chico va a tener razón – dijo firme asegurándose de iniciar la conversación sin rodeos.

.- ¿Qué? – se extraño de las primeras palabras que dijo su mujer tras una hora de viaje. - ¿De cúal chico me hablas?

.- Peter voy a llegar al fondo de esto.

.- ¿Pero Miriam de qué hablas? Explícate no te entiendo nada.

Ambos miraban hacia el frente; el hombre concentrado hacia el frente y la mujer con la mirada perdida sin centrarse en la realidad, sumergiéndose en sus pensamientos.

.- Veras, amor cuando tu hija dejó a Jonny , esta me llamó desesperado unos días después.

.- ¡¿Qué?!¡¿Por qué no me lo dijiste?! – el hombre empezaba a temer por las suposiciones y enredos que un chico joven era capaz de inventar al haber sido abandonado por la mujer que amaba.

Peter nunca juzgó a su hija por ninguna de sus decisiones y si ella había decidió romper esa relación pues él no tenía nada que decir sobre ello.

.- No te dije nada querido porque lo que me dijo acerca de cómo se había producido la separación me parecía una idea totalmente absurda.

.- Pues la verdad es que no me extraña un chico herido puede inventar cualquier cosa, seguro que hoy ya no cree nada de lo que te dijera.

.- Si, él no lo sé, pero yo después de lo que he visto hoy estoy empezando a dar un voto de confianza a su relato sobre lo sucedido.

.- A sí, dime querida y ¿de qué se trata? Si dices que empiezas a creerlo igual yo puedo a ayudarte a sopesar tus dudas.

.- Bueno …- dudó unos segundos pero decidió decirlo rápido y sin más rodeos -¡me dijo que Lucy estaba liada con una chica! Y por eso le abandonó.

.- ¡¡Pero qué estupidez es esa!! – el hombre alzó la voz, ahora si enfadándose seriamente antes aquellas absurda idea y decidió pulsar las luces de emergencias y parar el coche en medio de la autovía .



Capítulo 41
La mujer no se sorprendió mucho de la reacción de su marido. Lucy siempre había sido la favorita de sus dos hijos, y como ella le había reclamado alguna vez; siempre la consintió demasiado. Le miró sintiendo en lo más profundo un poco de placer morboso hacia el fuego rabioso que prendían los ojos azules del hombre ahora perdidos en el asfalto.

.- ¿Cómo se ha atrevido?- masculló mientras apretaba el volante con rabia – es un ser despreciable ¿cómo se ha atrevido?.

.- Peter tranquilízate, no es bueno para tu corazón – la voz de la mujer parecía intentar sofocar el fuego que ella misma acababa de encender.

.- ¡Pero eso es una vil mentira! – Reaccionó, arrancó el coche y mientras volvía a centrarse en el coche – Tengo que hablar con ese cabrón – se incorporó a la autovía de nuevo – Voy a hablar con ese estúpido en cuanto lleguemos a Berlín – sentenció marcando cada palabra con voz rotunda y grave.

.- Pero… Peter el chico… no sé – el ver lo alterado que se había puesto su marido, Miriam ya no se atrevía a expresar tan tajantemente de ese presentimiento sobre la identidad sexual de su hija.

.- ¡No! – le cortó - ¡ ni se te ocurra defenderle! Es un gran mentiroso no me puedo creer que se haya inventado esa infamia y además te la contara a ti a su madre…por Dios!!.

.- Pero …

.- ¡Pero nada Miriam! ¡Ese me va a oír! .

.- Vale… pero mejor antes de que hables con el, pues lo debatiremos en casa – no pararía tan pronto, sabía que esa rubia a la que su hija llamaba amiga no era de fiar y que como miraba a su hija no era muy normal.

Una vez retomado el camino, un silencio tenso se instaló en el vehículo.

El día de Navidad ya se había acabado, nada mas llegar al piso Lucy llamó a sus padres mientras que Kasia hacia lo respectivo con los suyos.

El señor Schindler no quiso alterarse mas y después de llegar a Berlín decidió que en Navidad las cosas ya estaban bien y que al día siguiente enfrentará a ese sinvergüenza difamador. Así que al hablar con su hija omitió ese tema y simplemente la informó de su tranquila llegada a la casa familiar.

.- Adiós, papá –

.- Adiós, hija – la poca fuerza con que su padre la había despedido le creo un sutil presentimiento, que la arrugo un par de segundos el corazón.

Miró el aparato y quitándose esa mala impresión de su cabeza lo colocó en el cargador para centrarse en preparar la cena para su novia.

Kasia entro en el comedor soltando un sonoro suspiro. Lucy la miró y dejó que la gran sonrisa de la chica de sus sueños se la reflejara en su cara.

.- Amor, ¿todo bien?- la preguntó mientras la veía acercarse peligrosamente a ella.

.- Si, pero hay una cosa que….- cambió su cara reflejando algo de tristeza.

.- Dime, ¿hay algún problema con tu familia?.- la miró curiosa.

Kasia se separó un paso y bajando la mirada – No con ellos no… conmigo – y se perdió en el silencio.

Ese silencio alertó a la morena, que dejó los utensilios en la encimera y ahora temerosa de las palabras que pudiera oír, alzó la cara de la chica suavemente.

.- ¿Contigo? Amor …pero – silencio - ¿qué ocurre? – intentó leer los ojos oscuros que ahora apenas brillaban mientras miraban al infinito de detrás de ella.

Clavó sus ojos en esas dos perlas azules que tanto amaba, sonrió y envuelta en una gran expresión de picardía. Lucy no la entendía, Kasia la agarró de la cintura y la empujó contra si en un rápido movimiento.

.- Que no consigo decidir como y cuantas veces te voy a dar placer esta noche.

La morena reaccionó abrazándola fuertemente “¡te amo, te amo!” la dijo mientras disfrutaba de ese abrazo, Kasia no pudo decir nada durante un rato, las risas junto a la necesidad de respirar la quitaban la capacidad de hablar. Y para cuando se estaba reponiendo, Lucy se separó lo justo para besarla una y otra vez sin que ella pudiera decir nada.

Apenas comieron entre los arrumacos y las ganas de poseerse en las sábanas que ya tantas veces eran testigo de su amor.

Vivieron otras de sus noches; esos momentos especiales llenos de sensualidad que sólo ellas sabían crear ; amándose de una forma tan intensa que pareciera como si al salir el sol fuera la última oportunidad de volver a poseerse, llenándose la una de la otra hasta límites que sobrepasaban el subconsciente. Anulando toda la razón y regenerando las más ilusas esperanzas olvidando todo temor en sus mentes, quedando solo el vago recuerdo de cómo ambas se anhelaban al separar sus cuerpos con los rayos de sol.

El sonido del timbre, las despertó a la vez.

Lucy a trompicones se puso la bata y tras mirar por la mirilla, abrió costosamente.

.- Uff, amigo creo recordar que tienes llaves – apenas se fijó en el chico que en un susurro la contestó mientras de metía de nuevo en la habitación.

.- Si, pero …creo que la he perdido.

Cerró la puerta detrás de si, se fue al sofá en silencio, se dejó caer sobre los cojines y tras perder sus dedos entre su pelo, cerró los ojos dejando caer la primera lágrima.

.- ¡Hola! – Kasia entró como un vendaval al comedor derecha a sentarse en el sillón al lado de su amigo - ¿Qué tal cuéntame ese gran viaje?

Dennis lentamente apartó sus manos de la cara y en silencio mostro su rostro empapado en lágrimas a su amiga. Esta que estaba con las palabras en la boca y al observarle su sonrisa se borró lentamente quedándose helada sin saber lo que decir.

.- Dennis – reaccionó tras un instante - ¿Qué te ha pasa? - la sorpresa provocó que sus palabras sonaran en un hilo de voz.

Se acercó lo suficiente para poner su mano en la rodilla para intentar tranquilizarlo mientras ésta volvía a poner sus manos en su cabeza dejando caer más lágrimas.

.- Aquí tienes tu café – Lucy puso los cafés en la mesa y se sentó a su lado.

Kasia la miró con pena guiando su atención sobre el chico.

.- Pero Dennis ¿qué te ha pasado? , se puede saber ¿qué?… - se levantó de un salto y rodeando la mesa se sentó a su lado pasándole la mano por la espalda – anda tranquilízate.

El chico dejó de llorar y con unos pañuelos de papel que le acercó Kasia se limpiaba la cara buscando la forma de contar a sus amigas lo que le acababa de pasar.

Las miró y ambas estaban calladas y expectantes a que empezara su relato.

.- Bueno – carraspeó tenía la garganta un poco saturada por el llanto, las volvió a mirar y tragó saliva mientras intentaba encontrar la forma de empezar a redactar. Ya las tenían en la boca pero paró en seco.

.- ¡Niño habla ya! – Kasia le cortó nerviosa - ¡¿te ha pasado algo en Paris o con Jorge?!

Lucy con un gesto la pidió que se callara y ésta la obedeció.

.- Veréis … ¿Paris? – se dibujo una gran sonrisa en el – oh, Dios chicas me lo he pasado en grande, he estado perdido en un sueño los dos días.

Las chicas se miraron extrañadas y a ambas se les dibujó una media sonrisa en los labios mirando como el chico clamaba la felicidad de esos días.

.- Pero el problema no ha sido eso – las miró volviendo a sumergirse en la tristeza – el problema ha venido cuando he llegado a la entrada del piso y…..

.- ¿Y? … vamos dilo ya Dennis – ahora fue Lucy la que no aguantó el presionar al chico.

.- He encendido el móvil, veréis lo apagué cuando salimos para el aeropuerto hacia Paris, no quería que nadie me fastidiaría …- se sacó el móvil del bolsillo y lo movió en la mano como sopesando su peso - ..y ahora me alegro de ello – paró para coger aire . – Al encenderlo he visto 15 llamadas perdidas de me agente.

.- ¿Quince llamadas? Y …supongo que le has llamado.- preguntó Lucy, antes el silencio que mostraba Kasia, que ahora empezaba a temer lo ocurrido , se levantó lentamente y les dio la espalda perdiendo su mirada atreves de la ventana.

.- Si, le he llamado inmediatamente, ni siquiera he esperado a subir – miró triste a su amiga que seguía acariciando su espalda lentamente – Me ha dicho que he sido expulsado del musical – quiso disimular el valor de esas palabras sonriendo amargamente ante los ojos abiertos de par en par de su amiga que le miraban sorprendida sin decir ni una sola palabra.

.- ¡No! No pueden hacer eso… pero ¿por qué? – se levantó enfurecida. - pero ¿qué motivo te han dado?..por Dios .

.- Si pueden – la voz de Kasia al darse la vuelta sonó fría - ¿Te han pillado, no?.

.- ¿Pillado?¿el qué? –

.- Con Jorge…- le sonrió tristemente - .. ¿verdad?

.- Si, eso es.. – volvió a taparse la cara intentando inútilmente aguantar las lágrimas – por lo que me ha contado un inversor de los más veteranos y ricos me vio junto a su hijo como nos besábamos en el parque de atracciones y luego me reconoció en mi última actuación .

.- ¡¿Por eso , por besar a alguien a quien quieres?! - gritó Lucy.

.- ¡Si!

.- ¡Claro! – sentenció Kasia al mirarla con ojos fríos llenos de rabia.

.- ¿Eso es legal? ¿Dennis? Le has preguntado tus derechos.

El chico vencido por los acontecimientos se empezó a relajar mientras iba digiriendo lo sucedido.

.- Si he preguntado Lucy, pero ese tío es uno de los mayores inversores con una mentalidad totalmente arcaica un fascista radical que odia a los gay y que por él nos encerraría a todos. No hay nada que hacer Tomy me lo ha afirmado varias veces, y que tendré suerte si ese neandertal no me busca más problemas en este tipo de espectáculo.

Los tres chicos se sentaron derrotados y durante un buen rato nadie dijo nada.



Capítulo 42
Dennis decidió volver a Berlín por lo que las dos disfrutaban solas del piso. Así los días de Navidad pasaron entre mañanas de amor y tardes de éxitos en el musical.

Poco a poco la presencia de Kasia en el teatro durante toda la semana empezaba a llamar la curiosidad entre los trabajadores, que cada vez más, no se cortaban en mirarla curiosos y perderse en murmullos.

.- ¿Amor, al final has decidido que te pondrás para la fiesta?.- preguntó Lucy tumbada en la cama fijándose en cada detalle del cuerpo de su amante, que sólo era tapado con una toalla tras la ducha mañanera mientras Kasia buscaba en unos cajones su ropa interior.

.- No – contestó la chica mientras seguía sumergida en la búsqueda de su ropa – veras Lucy, es que…- no encontraba las palabras adecuadas, deseó desaparecer de aquella habitación para no tener que enfrentar las posibles consecuencias de su decisión final sobre ese tema.

Era el día de noche vieja y Lucy estaba muy ilusionada por poder celebrarlo con el amor de su vida al lado, pero Kasia se sentía cada vez más incómoda entre los componentes de musical, sin Dennis ahora se sentía fuera de lugar en todo ese mundo.

Y realmente no le apetecía nada ir a esa fiesta llena de gente estirada y tal vez seguir oyendo los mismos comentarios homófobos en contra del comportamiento de Dennis.

Le hervía la sangre cada vez que alguno de esos viejos capitalistas, que se creían con derecho a juzgar todo lo que había en la tierra por el simple hecho de tener mucho dinero, recriminaba ofensivamente la opción sexual de su mejor amigo.

Aunque lo que más la dañaba era el que siempre tenía que callar y seguir su camino para no llamar la atención y que su presencia pasara lo mas desapercibida posible.

Encontró su ropa y decidió enfrentar la pregunta de su chica. Se puso firme y dándole la espalda de forma consciente contestó.

.- No voy a ir.

.- ¡¿Qué?! – La morena sonrió , seguro que Kasia bromeaba , se incorporó – anda dime lo que te vas a poner ¿el vestido rojo verdad?.

Lentamente se giró buscando sus ojos.

.- Cariño, no voy a ir - bajó el rostro – no quiero ir.

.- ¡¿Cómo?! – la miraba sin poder creerlo – llevamos toda la semana planeando los detalles de esa fiesta , hablando de ella y ..¿Ahora dices que no quieres ir?- se levantó y se quedó de pie al lado de la cama, mirándola seria, estaba molesta.

Kasia dejó la prenda en la cama y se acercó a ella para intentar calmarla con caricias.

.- Amor en esas fiestas…sólo van gente muy estirada y de mentalidad muy cerrada...y no me siento bien entre ellos- dijo mientras agarraba sus manos.

Lucy se soltó, Kasia le acarició la cara y se acercó para besarla, ella dio un paso hacia tras.

.- Son mis compañeros y pensaba que te caían bien ¿Qué malo tienen?..¿por qué ahora me vienes con esas cosas?- Kasia se acercó de nuevo – ¡no! no me vas a calmar con besos.

La rodeó y mirando al armario la dio la espalda, firme y con los brazos cruzados intentando calmar la rabia que se le había prendido por dentro.

.- De verdad Lucy no me gustan , no me fio de ellos ..de lo que piensan y ….-

.- ¡¿Y?! – se giró rabiosa encarándola para ver si conseguía enterarse de lo que realmente pasaba – haber por favor aclárame que pasa en realidad – movió los brazos exigiendo escuchar la respuesta que ella ya sabía pero que intentaba fingir en todo instante.

.- Bueno …amor…- no estaba dispuesta a encararla y entrar en la disputa de quien llevaba la razón sobre ese tema, la miró sonriente calmándola ,ahora si, con su demostración de paz- no me encuentro bien con sus comentarios, sus miradas y su forma de juzgar a Dennis y todo lo relacionado con la homosexualidad.

.- Lo sabía … - se sentó derrotada sobre la cama y calló asumiendo que su novia tenía toda la razón con respecto a el pensamiento homófobo; desde lo de Dennis parecía haberlo llenado todo.

A ella misma la habían criticado y juzgado por haber compartido casa con Dennis. Ella había decidido aguantar las miradas, los comentarios en susurros mientras no pasaran a mayores.

Pero sabía que no tenía ningún derecho de pedirle a su pareja que también lo aguantara en silencio.

Se dejó caer hacia atrás – Mierda - susurró, Kasia tenía razón en no querer ir.

Kasia se tumbó a su lado mirándola sonriente y con una mirada invadida por el gran amor que sentía hacía esa preciosa mujer – Haber …mi amor…¿que te vas a poner? .

.-¿Yo? … - se levantó – ¡no voy a ir! y se fue para el salón en silencio.

Kasia se incorporó, y rápidamente se vistió sin pararse en lo que se ponía deseando no perder ni un segundo en ir tras ella.

Cuando llegó al comedor Lucy tenía la mirada perdida a través del ventanal, el día estaba totalmente iluminado y despejado y pensó que esa imagen le llenaba por completo su corazón.

.- Un bonito día para despedir el año - le dijo al sentirla entrar sonriendo para si con tristeza.

.- Lucy por favor…amor..no puedes faltar a esa fiesta – se acercaba pensando cada paso , no quería volver a tensionarla con su cercanía – lo hemos hablado , y es muy importante esa fiesta para ti.

.- No voy a ir – dijo firme.

Al llegar a unos centímetros pasó sus manos despacio por la cintura de la morena que cerró los ojos al sentirla y se dejó abrazar sin moverse, notó como Kasia apretaba los brazos cruzados en su cintura y sus labios le rozaban el cuello, abrazó a su vez el gesto que la mantenían unidas.

.- Pero.. no quiero ir sin ti.- se dejó mecer.

.- Tienes que ir y yo me sentiría fatal si fuera, te fastidiaría a ti y ambas lo pasaríamos mal.

Se giró para ahora mantener el abrazo frente a frente y la beso de forma tan tierna y a la vez pasional que ambas sintieron prender sus cuerpos casi ala vez.

Iniciaron un leve movimiento meciéndose y entre risas y suspiros permanecieron así durante unos minutos . Lucy rompió el movimiento girándose para perderse en los oscuros ojos que tanto amor le regalaban diariamente.

La respiración se le empezó a descontrolar al sentir de nuevo los labios y el ardor del aliento de su amante sobre su cuello.

Kasia deseaba volver a saborear cada centímetro de esa piel de la que nunca se saciaría, y se volvió a perderse en ese aroma que la excitaba de forma incontrolada.

Introdujo sus manos por dentro de la camisa de su chica mientras alzaba la cabeza para disfrutar en cada rincón de su cuello de los besos de Kasia, con sus dedos empezó a recorrer su espalda mientras disfrutaba de la suavidad y el tacto de la piel que tanto la enloquecía.

El sonido del la alarma rompió la magia que se estaba creando y ambas se separaron con cara de fastidio y desganas.

.- A trabajar – Kasia le regaló un profundo beso antes de soltarla del todo.- Te amo.

.- Y yo ….- le contesto Lucy sin dejar de mirarla dando pasos hacia atrás en dirección al fuerte sonido y sonriéndole - eres mi vida.


Capítulo 43

La noche llegó, Lucy se fue a la fiesta, iba muy desanimada pero resignada a cumplir con su deber para su futuro profesional y kasia se quedó en el piso, entreteniéndose en llamar a todos sus seres queridos a la espera del momento de las doce campanadas.

Unos minutos antes del fin del año, Lucy buscó un sitio apartado del resto de la gente que llenaba el gran salón donde se celebraban todos los acontecimientos relacionados con el musical.

En un pequeño rincón se colocó, cogió su teléfono y llamó a kasia.

.- Dime, amor ¿Ha pasado algo? – contesto kasia extrañada por la llamada.

.- No, pero…- se tapó el oído libre para poder oírla mejor, porque el gáleo en la sala iba en aumento según se acercaba la cuenta atrás. – amor, ¡quiero contar hacia atrás contigo, escuchar tu voz será la mejor manera de entrar en este año!.

En la cara de kasia se dibujo la sonrisa mas sincera y feliz que podía describir su cara, en esos momentos se sintió la mujer mas afortunada del mundo.

Tras la cuenta atrás ambas se mandaron mil besos a través de sus móviles.

Y al cumplir con las felicitaciones y deseos correspondientes para el año recién iniciado ; Lucy se fue a casa.

Al abrir la puerta abrazó a kasia tan rápidamente que a esta no le dio tiempo ni de saludarla.

Con un pequeño empujón con la pierna la morena cerro la puerta tras de si.

Según caminaban hacia la habitación kasia dejó de intentar hablar, los continuos besos cada vez mas apasionados de su chica se lo impedían. Se rindió ante esa pasión, de todas formas no había palabra más importante que el roce de esa lengua que buscaba la suya con un deseo imparable. Sus labios juntos se apretaban, se acariciaban y dejaban paso una y otra vez a sus lenguas que jugaban desesperadas por saborearse y sentirse mutuamente. Lucy se quitó el abrigo y lo dejó caer al suelo.

Llegaron al borde de la cama y kasia se dejó caer sin dejar de abrazar a Lucy animándola a ponerse encima. Esta lo hizo gustosa y sin perder ni un segundo empezó a desabrochar los botones de la camisa del pijama de la rubia. Kasia se relajó y se dejó hacer mientras el deseo le empezaba a invadir cada una de sus células.

Lucy parecía poseída por la lujuria ante el cuerpo de kasia, la besaba , la acariciaba una y otra vez, perdió su boca en el cuello de su amante mientras amasaba sus pechos y pellizcaba excitantemente sus pezones. El tacto de las manos de kasia la volvió a la realidad, Lucy llevaba aun puesto el vestido, así que luchando por los movimientos de su novia sobre ella la fue desabrochando la larga cremallera situada en la parte de atrás del vestido. Lucy se percató de ello y se movió de forma indicada para facilitar que kasia la desnudara. Finalmente se ladeó algo, para separada de ella poder quitarse el vestido del todo, y tirarlo con un movimiento del pié fuera de la cama. Miró a kasia, estaba delante de ella que aún tenía el pijama, pensó que eso no podía consentirlo, la deseaba totalmente desnuda y con besos y caricias se dispuso a despojarla de la suave prenda de algodón. La giró dejándola boca abajo mientras le acabada de quitar los pantalones por los pies. Despacio, con tiempo para que el deseo de kasia por sentir su cuerpo sobre su espalda creciera segundo a segundo, se puso en horcajadas sobre sus piernas y se desabrochó el sujetador, luego se entretuvo en desabrochar el de kasia, excitando cada milímetro de piel que sus dedos rozaban en el sutil movimiento con el pequeño encaje de metal.

Una vez lanzado los sujetadores fuera de la cama, Lucy se dedicó a causarle el máximo placer posible con sus caricias, labios y lengua dibujando formas sobre toda la espalda, parándose en algunos momentos sobre su nuca para excitarla desde ahí. En un lento movimiento introdujo su brazo entre le estomago de la rubia y las sabanas, kasia alzo su cuerpo lo justo para abrirle el camino a esa mano que la quemaba según alcazaba su pubis. Acercó más su pecho a la espalda de la rubia, a esta se le escapó un suave gemido al sentir los pezones de su amante dibujando miles de sensaciones de su piel.

Lucy llevó su mano al centro del placer de kasia, y formando un abrazo con ese brazo y apoyándose con el otro en el colchón empezó a moverse sobre la espalda de kasia situando su pierna derecha entre las de kasia uniendo su pelvis a los glúteos de su amante.

Cada vez más curvada hacia ella deseando pegarse a la piel ardiente que tenia sobre su espalda, levantaba su cuerpo con la ayuda de sus antebrazos, separándose del colchón para adaptarse a los movimientos de su amante, mientras sentía la humedad y el ardor de los besos de Lucy en su nuca.

Ambas se coordinaron en la danza del placer uniendo su ritmo, kasia bajó la cabeza y abrió sus piernas lo justo para levantar la cintura y facilitar el movimiento que los dedos y el brazo de lucy sobre su clítoris y su vagina. Sintió como los dedos de su amante la penetraban y su mano empujaba una y otra vez sobre su sexo.

En esa postura aunque el muslo de la morena movía su cuerpo no ayudaba mucho a la presión que ésta tenia que ejercer sobre el conjunto que formaba del centro de su placer. Los cuerpos ardientes sudaban, kasia disfrutando al máximo de cada embestida y Lucy esforzándose presionaba con la fuerza de su brazo casi en la extenuación en cada empuje. Y entonces explotó el mayor placer que un cuerpo puede sentir ahora dentro del cuerpo de kasia; tan deseado de producir por una y de recibir por la otra. Los dos cuerpos extenuados y sudorosos, cayeron abatidos sobre el colchón.

Entre la necesidad de tomar aire y de recuperar fuerzas Lucy la miraba sonriente.

Capítulo 44
Cuando el ritmo de su respiración se normalizó suavemente, decidió que ahora la tocaba a ella poseer a la mujer más hermosa que había visto.

A veces la pregunta del por qué ella había tenido tanta suerte la invadía temiendo vivir sólo una fantasía, pero en momentos como esos instantes; se sentía tan amada que esas dudas se esfumaban.

El día de año nuevo amaneció totalmente iluminado, el sol hacía relucir cada detalle donde llegaba.

El despertador de Lucy vibró en la mesilla de noche, con los ojos aún cerrados y todo el cuerpo invadido por una pereza casi imposible de combatir, lo paró costosamente dejándose caer de nuevo sobre la almohada y recordando con fastidio que ambas tenían que viajar a Berlín para comer con sus respectivas familias.

Se giró para contemplar el rostro de la mujer por la que su corazón latía, aquella imagen inundaba su alma y volvía a tentar a su piel con el mayor deseo que jamás antes de aparecer ella había sentido.

Era el primer día de un nuevo año, y pensó que se sentía tremendamente feliz. El empezar el año en ese estado de ánimo la llenaba de fuerzas y esperanza.

Con pereza se levantó a prepararse el café, la tranquilidad que la rodeaba la llenó de paz.

Mientras la cafetera preparaba el café, el silencio se rompió con el fuerte sonido de su teléfono. Enseguida recordó alarmada que se lo había dejado en la mesilla de noche, corrió a la habitación y tomó el teléfono rápidamente clavando su atención en el rostro de Kasia para asegurarse de que esta no se había despertado, salió de la habitación y contesto en voz baja.

.- ¿Diga?...oh mamá, ¡¡buenos días!! - Lucy volvió a la cocina intentando mantener algo del silencio que la había rodeado minutos antes. - Sí mamá, claro que lo recuerdo, cogeré el avión y para la hora de comer estaré allí….sí, no habrá ningún problema…ni excusas.

Al acabar y colgar el teléfono se mantuvo mirando por el ventanal del comedor pensativa, le fastidiaba tener que separarse de Kasia aunque sólo fuera por un día, los minutos se le hacían eternos cuando ella no estaba cerca.

Justo en ese instante sintió como la agarraban por la cintura y apretaban un cuerpo contra el suyo, ambas soltaron un susurro de placer en sus gargantas.

.- Mi amor…uumm – la estrecho más fuerte -...era tu madre ¿verdad?..- beso en el cuello muy tiernamente, mientras Lucy dejaba escapar un gemido y curvaba la cabeza para atrás -… ¿tienes que irte ya?...joo…aún es pronto.

Ambas se mantuvieron unos segundos abrazadas y disfrutando de una pequeña danza creada por la inercia de sus cuerpos.

Viajaron las dos juntas y al bajarse del avión se despidieron con un amistoso abrazo. Kasia no era capaz de relajarse en público y la morena notando la tensión que eso creaba entre las dos aceptaba pacientemente las escasas muestras de cariño de su chica en esos instantes.

Era casi mediodía cuando Lucy llegó a casa de sus padres, todo estaba tranquilo.

El lugar era un pequeño palacete situado a las afueras de Berlín, rodeado de un gran terreno repleto de arboles y plantas decorativas, perfectamente cuidado por los empleados de los Schindler.

Tras cruzar la puerta una sensación de aire helado le golpeó la cara provocándole un fuerte escalofrío.

Al fondo del pasillo vio a la ama de llaves ir hacia ella.

.-¡Hola Tina!...¿y mis padres?.-la saludó con una gran sonrisa.

.- Hola… señorita. Sus padres la esperan en el salón.

La sequedad con que esa mujer la recibió la pareció algo inesperado, realmente la conocía poco pero siempre que se habían visto la había tratado con cariño y simpatía.

Lucy decidió no darle mas vueltas “tendrá un mal día” pensó y tras dejar el maletín de viaje en el primer armario que encontró se dirigió al salón convencida de que sus padres estarían tranquilamente esperándola mientras tomaban un aperitivo antes de la comida de celebración.

Entró enérgicamente en la estancia donde ambos progenitores la esperaban de pié con rostros tensos. Lucy sin percatarse de la tensión del instante, dio un beso a cada uno.

.- Hola hija – la saludó su padre serio.

.- ¡Ya era hora!- regaño su madre, dejando el periódico que estaba leyendo en una pequeña mesita situada al lado del sofá.

A Lucy toda esa sequedad la empezaba a extrañar demasiado, se paró durante unos segundos para analizar los dos rostros tensos que la miraban.

Su padre la había dedicado un mínimo amago de sonrisa cuando la saludó pero pocos instantes después su rostro se endureció y su mirada reflejaba tristeza luego se giró hacia otro lado.

Al ver la mirada heladora con la que su madre la observaba sintió un fuerte punzón lleno de temor en el pecho “¡la habrían descubierto! …es imposible” respiró profundamente intentando esfumar esos temores.

.-Bueno Lucy ¿cómo va todo?.- le preguntó la madre mientras se sentaba y le indicaba señalando sutilmente el espacio vacio del sofá a su lado.

Se sentó despacio, insegura del verdadero significado de la pregunta.

.- Bien mamá..va todo bien – la dedicó una tímida sonrisa.

.- Veo que dudas amor .

Miró a su padre sin saber que palabras decir, este estaba de espalda mirando el jardín por un gran ventanal, permanecía en silencio mientras fumaba su pipa de forma aparentemente relajada.

.- Claro mamá, todo esta bien – se giró lo suficiente para poder mirarla directamente anulando la necesidad de torcer la cabeza - ¿por qué debería ir mal? Todo esta bien –sus palabras empezaron a salir nerviosas de su boca - …el trabajo , la obra va genial …y mis jefes están contentos y…

.- Tu amiga ¿aún sigue en tu piso?.- preguntó interrumpiendo la frase de su hija.

.- ¿Kasia?.

.-Claro – miró a su marido y manteniendo una risa burlona volvió a dirigirse a ella - ¿Qué otra persona podría ser?...- en ese instante la sonrisa se le borró dejando ver una seriedad llena de curiosidad sobre su respuesta. – …que yo sepa debe ser una de tus mejores amigas ¿no?, yo diría que la mejor – dijo de forma tajante y tez heladora.

.- Bueno…si..es una gran amiga…pero..– se refregaba de forma nerviosa una mano con la otra , sus temores iban creciendo según le iban golpeando cada palabra que salía por la boca de la mujer que le dio la vida - ..¿qué?...¿qué importancia tiene ese detalle? – volvió a mirar a su padre buscando un alivio para sus miedos pero este parecía no estar presente, le pareció que ese hombre sólo era una escultura perfectamente moldeada fría e inerte.

.- ¿No tienes nada que decirnos de esa gran amistad – puso un énfasis especial sobre las últimas palabra –que tienes con esa chica?.

.- No – Sintió como un fuerte nerviosismo la invadía desde su interior empezando una lucha entre alma y cuerpo. Deseó poder tener el suficiente aguante para poder disimular su verdadero estado interior.

.- ¿No? Veras, me han hablado de tu amiguita, esa tal Kasia - la madre se levantó y la miró duramente en un intento de imponer su persona a la de su hija que ahora se mantenía paralizada.

En ese instante lo supo; sus padres lo sabían, era un hecho, alguien las había pillado y se lo habían contado sin ningún tipo de contemplación.

Sin levantarse, intentó reaccionar – madre no entiendo por qué lo de amiguita – ahora luchaba por no dejarse vencer por el temor al daño que la verdadera realidad les produciría a todos – Kasia es una mujer estupenda y …- se levantó, no soportaba ni un segundo mas la figura impositora de su madre encarándola.

.- Exactamente Lucy, es una mujer – ahora atravesándola con la mirada – y por lo que se ve..¡te has olvidado tu de ese detalle! – las palabras salieron llenas de veneno directa a su alma.

Pero ella no se delataría tan pronto - ¿Olvidado?..- se giró dirigiendo sus ojos al suelo no encontraba las fuerzas para seguir manteniendo esa mirada de hielo que le quemaba el pensamiento - …no entiendo a que te refieres.

.- Lo sabemos tu amiga es una de esas…y ¡tu estas ensuciándote con ella! – la imponente forma de juzgarla desgarró el alma de la chica, un paso y a pocos centímetros de su cara recibió las palabras más duras que una hija puede escuchar de su madre – “me das asco”.

Sintió como las piernas la fallaban y en un gesto instintivo clavó los ojos en la espalda de su padre rogando la ayuda del hombre que siempre desde que nació la había defendido ante todo.

Pero este no reaccionaba y en su susurro casi un ruego desesperado de ayuda.- Papá…. – en ese instante ante lo que se le antojó un perpetuo silencio se sintió la persona más sola del mundo allí, de pie y temblando de pies a cabeza , había sido descubierta; ahora recibiría su condena.


Capítulo 45
.- ¡Basta Miriam! -. Peter se dio la vuelta, estaba muy nervioso y sus ojos parecían que iban a estallar de pura rabia.

Lucy dudó de hacia donde podría ir dirigida esa rabia mientras sus ojos iban llenándose de lágrimas y su cuerpo, de pie inerte temblaba de tal manera que empezó a sentir pequeños espasmos en sus manos y sus rodillas.

Su padre dio un par de pasos hacia ellas dos .- Basta…- ahora bajó la cabeza triste y pensándose cada palabra lentamente prosiguió .

.- Miriam no te permito que la hables de esa manera a nuestra hija - sus voz sonó en un tono aparentemente tranquilo, quería tranquilizar la situación y lo mejor era controlar su volumen.

.- ¡Peter! ¡Claro! – la mujer chillaba, quería imponer su agresividad.- ¡Tú siempre la has disculpado por todo! - enfurecida cada vez mas se separó unos pasos de su hija, en un intento de evitar encararse a su marido. – ¡Pero esto no se lo voy a permitir! – golpeó el airé con los movimientos nerviosos de sus brazos.

.- ¡Ya basta! – esta vez si quedaba claro a quien iba dirigida la rabia, Miriam dudó si parar su ataque durante unos segundos , su marido nunca la alzaba la voz y jamás la había mirado con tanta rabia en los ojos. Pero en un segundo después sus dudas se marcharon sus pensamiento enseguida se organizaron para seguir el ataque “seguro que esa rabia iba dirigida a su hija aunque lo pagaría con ella sino se mantenía firme en sus ideas”.

.- Miriam deja de hablar de esa forma ahora quiero hacerlo yo. – se acercó a Lucy que seguía derrumbada con la cabeza gacha y sin haber dicho ni una palabra mas.

Al sentir la figura del hombre que mas quería cerca, el miedo a su rechazo aumentó su parálisis. Pensó que no podría temblar más, que su cuerpo estallaría sin que su mente pudiera evitarlo.

.- Lucy …- intentó hablarle con el mayor cariño posible -..hija..¿es cierto que mantienes una relación con esa chica?.

La morena reaccionó sorprendida, en su subconsciente un rayo de alivio atravesó el dolor que la poseía. Miró a su padre extrañada “¿es que entonces no lo sabían todo?¿qué estaba pasando?¿es que eran meras suposiciones?”, en un par de segundos reaccionó, esas dudas aliviaban en alguna parte sus temores.

Los miró, ambos padres se mantenían en silencio esperando su respuesta, dio por hecho que si su madre también dudaba era porque su delator no la había podido acusar totalmente.

Se estaba perdiendo en esos pensamientos cuando volvió a escuchar gritos.

.- ¡Ya está bien! ¡Esto es ridículo! – la mujer aún mas nerviosa cogió una revista que destacaba entre los periódicos de papel grisáceos llenos de noticias internacionales ; que ellos siempre leían. Se acercó a ella y con el brazo extendido animándola a cogerla.- ¡Toma! Y ahora haber si te atreves a negarlo-.

Lucy cogía la revista notando como las hojas se movían reaccionando al temblor que poseía su mano derecha.

La miró apenas tuvo que fijarse, en la portada se veían claramente varias fotos de Kasia y en una de ellas la más grande formando el fondo de la página, la de su novia besando a una chica “¡Sara! ¡¡Ella de nuevo!!” se gritó para si misma, mientras se sentaba lentamente en el sofá.

En un gesto de rabia tiró la revista al suelo y gruñó con toda su alma mientras se tapaba la cabeza con las manos queriendo ocultarse a la realidad.

La madre la miró con una sarcástica sonrisa mezcla de la furia y de la absoluta seguridad en sus palabras.

Lucy sintió como se le clavaba esa mirada en la nuca.- Ahora no podrás negarlo.. tu amiguita es de las raras y tú según me han contado eres una amiga muy especial suya – se acercó de forma que apenas quedaba un paso entres sus pies - ¡venga atrévete a negármelo!.

.- Haber amor – el padre en un gesto severo pero amable alejó el cuerpo de la madre de su lado y la habló con cariño – Lucy mi niña, cuéntanos que pasa…- le acarició el pelo – puedes contármelo yo no voy a juzgarte.

Lucy levantó el rostro hacia su padre, estaba totalmente mojado y sus preciosos ojos azules antes llenos de vida, ahora se mostraban rojos y tristes.

.- ¡Uff, por favor hija habla ya! – la desesperación de Miriam aumentaba a cada segundo, se fue a mirar por el ventanal para darle la espalda a su marido en un intento de calmarse - ¡esto es ridículo!.

.- Papá, yo la amo – esas palabras fueron dichas con la mayor sinceridad que una persona puede hablar.

El padre se sentó a su lado y mirándola con toda la ternura con la que un padre puede mirar a su hija le cogió las manos temblorosas.

. – Cálmate, debes pensar esto muy seriamente puede que cambie todo tu mundo por ello – le acarició las manos suavemente – pero antes cálmate amor.- entonces alzó su mano para limpiar algunas lágrimas de ese rostro por el que daría su vida mil veces obteniendo la mayor sonrisa de agradecimiento que jamás había recibido.

Lucy miró a su padre y fue consciente que ese era el momento en que debía enfrentarse a sus sentimientos y luchar por ese amor que le había dado el verdadero significado de la vida o dejarlos ocultos hasta poder llegar a destruirlos y seguir con esa vida de hija perfecta por la que siempre había luchado.

La expresión de su cara sorprendió el alma de aquel hombre que tanto la quería.

.- Papá ya es inevitable, mi corazón, mi alma incluso mi tranquilidad dependen de ella. La amo con todo mi ser. Antes de que ella apareciera sólo vivía para complacer a los demás, para avanzar día a día e intentar estar cómoda al día siguiente y que todos a los que quería estuvieran bien… – Alzó sus manos y besó las de su padre con un par de profundos besos llenos de amor -… pero no sentía nada, simplemente vacio – Su mirada estaba repleta de amor, ahora sus ojos brillaban con una luz con la que nunca lo habían hecho. El hombre se quedó embelesado fascinado por la pasión a la vida que fluía del cuerpo de su niña .-Pero ahora está repleto ,desbordado por los sentimientos ; amor , ilusión , pasión incluso miedo a perderla , o dejarme arrastrar por todas las personas que no comprenden este amor, incluso..- la tristeza volvió a sus ojos y giró la cabeza para mirar a su madre que seguía de espalda –… me odiaran por ello…- volvió a mirar a su padre y una sonrisa inundó su rostro rompiendo por primera vez esa dura tensión que casi la hunde en la mayor de las tristezas, había dudado pero ahora estaba decidida, nadie la separaría de esa mujer - …y que para mi es tan natural, bueno y limpio que apenas puedo comprenderlas.

El padre que había dejado llenar su alma por todo ese amor que esa impresionante mujer emanaba la abrazó fuertemente.

.- Eres realmente la persona más valiente que he conocido en toda mi vida.

.- Señores, la comida ya está servida en el comedor, si desean - el mayordomo había entrado sin percatarse de nada y les indicó amablemente que salieran del salón hacia el comedor.

Peter fue el primero en reaccionar, se levantó con una sincera sonrisa en la cara .-Vamos mi reina que tenemos que celebrar que seguimos vivos para poder ver el inicio del un nuevo año - le tendió la mano a su hija , en uno de esos gestos caballerosos que tanto la gustaban a su heredera, con este le pedía la amabilidad de levantarse apoyándose en su mano, pero Lucy con un movimiento de su mirada , le indicó su deseo de hablar con Miriam.

El hombre lo entendió enseguida y las dejó solas.

La mujer madura, se dirigió rápidamente hacia la puerta negando el acercamiento de su hija con un movimiento del brazo a media altura, claramente la dio a entender que hablarían en otro momento.

La morena lo comprendió y se fue junto a sus padres a comer, triste pero intensamente satisfecha por su decisión.


Capítulo 46
Al acabarse la comida todos los primos y amigos de la familia fueron despidiéndose, kasia se instaló en la puerta para despedir cariñosamente uno a uno a todos los invitados a la comida, que sus padres tenían por costumbre celebrar en el año nuevo.

Tras abrazar a su prima Claudia y despedir cortésmente a su marido se dispuso a repetir su acción con el siguiente en la fila; su primo Sergio un chico rubio, alto y delgado “el perfecto alemán” decía su tío muy orgulloso de su prole, un buen “macho”.

Kasia recordó en ese instante como desde pequeña había estado influida en el típico pensamiento tradicional que rodeaba a todos los varones de su familia.

“Posiblemente ya es hora de que todo eso cambie” se dijo dibujando una pequeña sonrisa en su rostro.

El sonido de su teléfono la devolvió a la realidad, “seguro que es ella” le chilló su mente, mientras se disculpaba por no seguir con las despedidas se dirigió a su habitación.

Una vez protegida por las paredes descolgó y con voz suave atendió la llamada segura de que sería Lucy.

.- ¡Amor! Dime, ¿Qué tal todo?.

.- Kasia, soy yo.

.- ¿Qué?

.- Amiga ¿no me reconoces?.

.- Oh…si..-Kasia tubo que centrarse ahora en esa voz, no era lo que esperaba y tardó unos segundos en reaccionar - ..si ..claro Dennis, ¿Cómo estas guapo? .

.- Muy bien pero…

.- ¡Feliz Año nuevo! – le cortó, estaba feliz, en esos momentos su corazón palpitaba lleno de amor y sentía que nada la podría dañar.

.- Kasia…tengo que hablar contigo –

.- Si dime – la sonrisa empezó a borrársele de la cara, la voz de Dennis aunque cariñosa como siempre reflejaba seriedad.

.- Veras…- no sabía como decírselo sin parecer demasiado pesimista.

.- dime… - los segundos de silencio la llenaron de temor – Dennis me estas asustando.

.- No cariño no te asustes veras… Te acordaras del incidente con Sara pues….- cayó de nuevo.

Una sonrisa irónica se dibujó en el rostro de la rubia.

.- Si claro lo recuerdo , Dennis creo que tardaré en olvidarlo.- un punzón de dolor revivió en su interior al recordar el dolor que esos instantes propiciaron. –Dennis ¿puedes decirme que pasa con eso?.

.- Vale, veras cariño tengo una amigo en la revista Tuell , ya sabes unas de las que más información contiene de los famosos.

.- Si claro …pero ¡venga sigue! .- Kasia empezó a temerse lo que su amigo intentaba decir.

.- Si me dejas hablar te lo contaré – cayó unos segundo para ver si Kasia le escucharía ahora sin cortarle – bien pues ya tienen imprimido el folleto con el que mañana abrirán el año y Kasia me gustaría que no te lo tomaras muy mal.

Al oír estas palabras no le quedaron mas dudas algo relacionado con los últimos acontecimientos de su vida, esos que la hacían sentir la mujer más feliz del mundo saldrían a la luz seguramente distorsionados por una de las revistas mas sensacionalistas del momento. Se sentó en los pies de la cama y se dispuso a aguantar el chaparrón.

.- Amigo creo que ya sé por donde vas así que explícamelo todo, pero lo primero …¿sale Lucy?.- rogó para que su chica no se viera metida en ningún escándalo en la prensa rosa.

-No. Sales tú con Sara. Nadie más.

Su corazón palpitaba fuertemente en su pecho, en ese instante su mente se empezó a llenar de todas las dudas y todos los temores que surgían de lo desconocido mezclado con lo conocido esas uniones de cosas que forman el miedo, de repente una fría y pesada sensación de miedo la inundó.

El silencio se instaló por unos segundos entre los interlocutores.

.- Dennis..¿qué puedo hacer? –

Su amigo pudo detectar el temor que la estaba invadiendo en su voz.

.- Tranquila.. yo te ayudaré a afrontar esto pero deberíamos quedar y plantearnos tu nueva situación ante todos.

.- Si , eso haremos …quedamos a las cinco en la cafetería de siempre, en el centro.

.- Muy bien Kasia ,allí te esperaré amiga.

Apenas fueron un par de horas pero a ella la parecieron una eternidad. Apenas se paró en arreglarse estaba demasiado preocupada para pensar en trivialidades y decidió que con unos vaqueros y una camisa blanca pasaría desapercibida en la cafetería.

Las calles estaban repletas de gente, no hacia mucho frio y todo el mundo disfrutaba de las luces navideñas y del sueño de un nuevo año repleto de esperanzas. Caminaba rápido mirando hacia el suelo, sin saber exactamente porque no quería que nadie la reconociera , tal vez temía que le recriminaran su nueva imagen pública. Sus pensamientos se iban centrando en las palabras que posiblemente intercambiaría con su amigo.

De repente algo le cortó el paso.

.- ¡ No me lo puedo creer! Mira Pablo, a quien tenemos aquí.

Kasia levantó la cabeza , no reconoció al hombre que estaba cortándole el paso pero la sangre se le heló al mirar hacia el lado, esa cara repleta de arrugas y pinturas que intentaban mitigar el paso del tiempo. La reconocería entre un millón ,su seriedad , su sequedad y sobre todo su mirada inquisitiva clavándosele en el alma.

Era Miriam la madre de la persona que mas amaba en este mundo, por la que daría su vida y todos sus sueños con ella.

.- Me alegra mucho verte – la mujer dijo estas palabras con el mayor tono frívolo que pudo.

Ante la mirada de terror con que Kasia se había quedado, la mujer, el hombre de mediana edad que la acompañaba, era Pablo su mayordomo. Este miró simpáticamente a la chica, pero al ver la seriedad de su jefa enseguida se enderezó y su rostro reflejó indiferencia hacia la chica.

.- Señora, yo también me alegro de verla pero.. – quería salir corriendo y deshacerse de aquella situación, lo último que deseaba no enfrentarse al mundo sin haber hablado con Dennis y sobre todo con Lucy.- … tengo que irme, llegó tarde …

.- ¿Tarde? …no creo que sea tan urgente…- la mujer no parecía dispuesta a dejarla seguir tan fácilmente.

.- Si señora tengo una cita y es necesaria mi presencia … - con un elegante movimiento de cabeza , indicó educadamente su intención de proseguir su camino.

Al dar un paso sintió un pequeño alivio al ver que el hombre se apartó hacia un lado dejándole el camino libre , pero algo la sujetó el brazo. Lo miró era una mano arrugada, con temor siguió el camino del brazo. En ese momento se dio cuenta que esa mujer estaba dispuesta a torturarla sin ninguna posibilidad de librarse.

.- Tengo que hablar contigo, no te vas a ir a ningún lado – la ironía con la que esa mujer la sonrió sin soltarla el brazo, hizo que al fuerte latido de su corazón se le sumó un fuerte escalofrío que le erizó todo el bello del cuerpo. – entremos en este café.

Se introdujeron en la cafetería que estaba a unos pocos metros de donde se encontraron.

En silencio Kasia dio gracias de que estuviera tan cerca , necesitaba sentarse , esa mujer la odiaba y seguro que la había descubierto fue la única explicación al extraño comportamiento de la mujer.

Las dos mujeres se sentaron en una de las elegantes mesitas, era un elegante local decorado de manera típica del centro de Berlín, mientras que Pablo se dirigía a la barra.

Una vez acomodada una en frente de la otra, el hombre puso un café delante de cada una.

.- Espero que te guste el café, me he tomado la libertad de pedir los dos a mi gusto , gracias Pablo. – dijo y sin dejarla contestar tomó un sorbo y se dispuso a iniciar la conversación – Bueno señorita, no me voy a andar con rodeos – la mirada llena de temor de la chica le confirmaba sus mayores temores. – quiero que dejes a mi hija.

Estas últimas palabras sonaron en el celebro de Kasia como si le hubieran metido un fuerte golpe en sus pensamientos, apenas pudo reaccionar.

.- Yo …señora…su hija…yo no…- se sintió como si estuviera desnuda ante esas personas.

.- No intentes engañarme niña, te recuerdo que he vivido tres veces mas que tu y conozco a las tipejas como tu.

.- ¿Qué? Perdone señora …- no sabía como reaccionar ante ese claro insulto – pero yo no soy ninguna tipeja, no sé a que se refiere .

.- Vamos, sé lo que hay entre tu y mi hija, ahora quiero que me asegures que la vas a dejar –“¿Dejar?..pero que dice esta mujer” se dijo Kasia afrontando la situación.

.- No. – su rostro ahora reflejó seguridad y firmeza.

.- ¿No?¡pero tu que te has creído! – el enfado de la mujer ya era patente.- ¡no eres nadie!¡nadie para ella!

.- Eso no es cierto – Kasia mantenía su firmeza y no dejó que se le notara sus temores, se mantuvo enderezada sorprendiéndolos – la amo y lo que es maravilloso es que ella también me ama.

.- ¿Es dinero?

.- ¿QUE? – el rostro enfurecido de Kasia , se enfrentó al de la mujer ahora llena de ira.

.- Si, señorita es por dinero ¿verdad? – se dispuso a buscar algo en el bolso- ah- dijo al encontrar la chequera y enseñándosela siguió con su ofensa – venga ¿Cuánto quieres? Por cuanto te puedo comprar para que no destroces a mi hija, con falsa historia de amor con la que intentas engañar a mi hija.

Kasia se levantó de golpe de la silla – No estoy dispuesta a aguantar ni un segundo más sus insultos – cogió su bolso y se dirigió hacia la salida.

.- ¡NO!¡Espera! – la mujer reacciono a tiempo para volver a sujetarla en brazo y frenar su huida, Kasia la miró furiosa. – perdóname por favor, hablemos, perdona mi actitud.

Kasia vio una de las mirada mas sincera que había visto, esa mirada la había heredado Lucy y por eso no pudo impedir quedar vencida por esa realidad, era la madre de su chica no debían quedar las cosas así y se dispuso a sentarse de nuevo.


Capítulo 47
La tensión creada unos minutos antes desaparecía con cada suave sonrisa con la que la mujer se quería disculpar.

Se sentaron de nuevo.

.- Querida niña, me he confundido contigo está claro que quieres a mi hija tanto como ella dice quererte a ti.- muy dubitativamente estiró su brazo y agarró suavemente la mano de kasia.- pero por favor necesito que me escuches precisamente por ese amor que os une.

Kasia tomó aire y lo soltó suavemente relajándose en la silla, en ese instante recordó que tenia algo que hacer.

.- Bien señora la escucharé, pero necesito avisar a la persona con la que había quedado- se levanto amablemente – por favor disculpe.

Tras unos minutos kasia volvió a la mesa, mas tranquila había avisado a Dennis y pospuso su cita para la noche.

.- Bueno señora, la escucho.

.- Mira niña tengo mucho miedo por mi hija, si veras es que… - se movió incómoda – mi hija lleva toda la vida trabajando para conseguir lo que hoy tiene, kasia no puedes permitir que lo tire todo por la ventana.

.- Señora perdóneme pero es su hija la que tiene que decidir eso, yo no puedo decir nada – el tono de su voz iba aumentando a cada palabra. – además no veo porque dice eso, su hija no va a tirar nada , ella es una gran profesional y….

.- No me refiero a eso, ¡claro que Lucy es una profesional!, niña…- se inclinó cariñosamente hacia ella y con un suave murmullo – he visto a mi hija, trabajar cuando debía estar jugando, llorar de rabia cuando algún movimiento no le salía, levantarse y repetirlo de forma casi enfermiza – los ojos de la mujer se llenaron de lágrimas – trabajar es lo único que ha hecho en su vida, lloré mucho viendo como se negaba a jugar o a salir con los amigos , sólo para seguir practicando una y otra vez . - kasia se le rompió el corazón al ver como una lágrima recorría el rostro de aquella mujer aparentemente fuerte y orgullosa - con apenas trece años se encaraba a nosotros cuando intentábamos que se tomara el baile y el canto más relajadamente. – se limpió las lágrimas del rostro y con la mirada triste prosiguió – y ahora verla tirar todo eso por una ilusión, un deseo...

.- ¡Es amor! ¡Amor señora! – los gritos se oyeron en toda la cafetería y tuvo la sensación de que todo el mundo se giró para mirarlas , bajando la cabeza hablo en susurros – ¿Es que no lo puede comprender?, ¡por favor! .

.- ¡Pero es que no lo habéis pensado! ¡En el mundo donde estáis esto no os traerá nada bueno! Y si es verdad que quieres a mi hija…

.- Claro que la quiero, daría mi vida por ella, pero es precisamente ella la que menos miedo tiene a todo lo referente a su trabajo.- los gestos de kasia mostraban lo nerviosa que la estaba poniendo las palabras de la mujer.

.- Tranquilízate – la mujer intentó de nuevo agarrar su mano pero esta vez kasia la quito de su alcance quedando claro su enfado - ¿de verdad crees que mi hija no lo va a perder todo cuando se descubra vuestra relación?.

.- Vale, puede que todo no siga igual pero seguro que podremos con ello, yo estaré a su lado todo el tiempo, no la dejaré sola ¡JAMAS! .- Se revolvió nerviosa en la silla, quería irse de allí sentía que iba a explotar de rabia.

.- Estoy segura que crees lo que dices pero la vida nunca es como queremos, yo puedo asegurarte que ella hoy lo destrozara todo por ti, pero tú no puedes asegurarme que SIEMPRE – la mujer enfatizó en esa última palabra – ¡SIEMPRE! estarás con ella, porque .-hizo un intento por suavizar su voz -.cariño, simplemente no puedes asegurarme que la seguirás queriendo dentro de unos años, y para entonces ya se habrá perdido todo, habrás destrozado su vida , su futuro a costa de ese sentimiento ,normalmente imaginario que a todos nos nubla pero que no todos nos vencemos a el.

.- Eso no es cierto yo la amo y siempre lo haré, de eso estoy totalmente segura.- La mirada fuerte y firme de kasia, ahora empezaba a mostrarse triste y perdida.

La duda golpeó sus pensamientos “esa mujer era mucho mayor que ella , era una maestra en la vida y ella apenas una novata, y si tenía razón, y sí todo era el resultado de un impulso, de una ilusión, del fuerte deseo de encontrar a la persona amada, la que siempre nos acompañará y nos amara para el resto de nuestras vidas”.

Se levantó aparentando un genio y una firmeza en sus palabras que no sentía. – Jamás nunca la abandonaré.

Se dirigió a la puerta y al pasar justo al lado de la mujer , esta la sujetó de la mano mientras que le decía las últimas palabras.- Sólo una cosita mas, ¿De verdad crees que podrás aguantar ser la culpable de destrozar la vida de la persona que tanto dices amar ahora mismo?.

Con un movimiento seco del brazo se liberó y abandonó en silencio la cafetería dejando a la mujer y a su chofer dentro.

Al ver la soledad de la que ahora volvían a disfrutar su jefa y el , la miró con curiosidad y al observar su maléfica sonrisa, no pudo evitar la pregunta.

.- ¿De verdad cree señora que ha conseguido algo con esta conversación? – el trabajo a sus servicio de tantos años le daba la confianza necesaria para exponer su opinión hacia la conversación de la que había sido un mero espectador – yo creo que ha salido incluso mas convencida de su relación con la señorita Lucy, señora.

La mujer le dirigió una mirada maternal llena de seguridad en su acción.

Para destruir una idea aparentemente firme sólo tienes que sembrar la duda ante ella.

Continuará...

Escrito por: Lesy
En JemmaEsparta sin movidas
®Lesy Derechos Reservados 2011 (Gracias SAGGI)
Parte dos de "El lugar coreccto de las cosas"